Capítulo 41
Punto de Vista de Selena
Es extraño.
La expresión y las palabras de Carlos son muy raras, muy diferentes de lo habitual. Parecía tener miedo de mirarme a los ojos, luego dijo algo de repente y se dio la vuelta para irse.
Observé su figura apresurada, preguntándome qué había sucedido.
Fue a la puerta, y en el momento en que su mano giró la perilla, miró hacia atrás otra vez. Bajo mi mirada perpleja, caminó en silencio hacia mi lado, se sentó en la silla junto a la cama y respiró hondo como si hubiera tomado una decisión importante.
—Lo siento... Te mentí, Selena. Dijiste algo en tu sueño, y lo escuché... —reveló Carlos.
Mi corazón se aceleró, y todos los músculos de mi cuerpo se tensaron al límite. —Yo... ¿Qué dije? —Agarré la colcha y tragué saliva. No debería haber escuchado mis palabras sobre el hombre, ¿verdad?
Carlos se sentó, y no pude leer nada útil de su expresión excepto la lucha.
—Si estás bien ahora, creo que deberíamos hablar —reflexionó.