Capítulo 34
El punto de vista de Selena
Silencio, aún silencio.
No sé si Carlos le contó a Billy sobre nosotros. De todos modos, no tengo nada que decirle a Billy, aunque noto que me ha estado observando en el espejo retrovisor.
En los semáforos, Billy no pudo contenerse más. —Selena, no sé qué pasó entre tú y Carlos, pero por favor cree que él realmente se preocupa por ti...
¿Carlos se preocupa por mí? Cerré los ojos y fingí no escuchar a Billy.
Obviamente, ambos sabemos que estoy fingiendo estar dormida. Billy suspiró y continuó conduciendo.
Cuando volvimos a la Manada del Valle Negro, el tiempo estaba muy malo. El cielo estaba oscuro y gris, y la lluvia caía a raudales, creando una pesada cortina sobre la villa de Carlos.
—Selena, espera un minuto —Billy detuvo el coche y corrió al maletero para coger su paraguas. Lo ignoré. Sabía que estaba mal desquitarme con Billy por mi enojo hacia Carlos, pero corrí hacia la lluvia sola.