[Shin mira a sus alrededores, no hay nadie más presente.]
Shin: ¡¿No se supone que los demonios están extintos?!, ¡¿qué se supone que haga ahora?!
[De pronto, la bebé le muerde la mano como un perro.]
Shin: ¡¡Auch!!, ¡detente!
[Tras unos segundos logra zafarse y su mano comienza a sangrar.]
Shin: R-Rayos… me clavó los colmillos por completo… tiene una mordida muy fuerte…
[Shin mira al cielo y se percata que el sol está empezando a ocultarse.]
Shin: Está anocheciendo…
[Él mira a sus alrededores una vez más, pero sigue sin haber nadie cerca.]
Shin: No puedo dejarte aquí sola… supongo que te llevaré a casa…
[Shin acomoda a la bebé en sus brazos y comienza a caminar. Tras veinte minutos llega a una pequeña casa de madera, alejada de todo.
Él cierra la puerta y coloca a la bebé en una mesa.]
Shin: Lo siento, pero no estaba esperando visitas… no creo que tenga algo que una bebé pueda comer…
[De un cajón, Shin saca un pequeño pedazo de sandia.]
Shin: Rayos… esto es lo último que queda… ¿te gusta la sandia?
[Él acerca la comida a la bebé, quien de un mordisco, como si fuera un animal, la devora por completo.
Casi le arranca un dedo a Shin en el proceso.]
Shin: ¡W-Woah!, ¡te la comiste de un mordisco!
[Él le limpia la boca con un pañuelo.]
Shin: Debes tener más cuidado al comer o harás todo un desastre..
[Al terminar, la bebé lo mira fijamente con una leve sonrisa. Shin suspira.]
Shin: Supongo que debería darte un nombre… no puedo llamarte bebé toda la vida…
Pero ciertamente nunca se me ha dado bien dar nombres…
[Él se rasca la barbilla por unos segundos.]
Shin: Que te parece… ¿Haruka?
[Ella asiente en señal de aceptación.]
Shin: ¡Muy bien!, ¡entonces a partir de este momento serás Haruka!
Mañana iremos al mercado del reino para comprarte ropa y otras cosas, por el momento vamos a dormir..
[Al día siguiente, Shin despertó y cargó a Haruka solo para percatarse que había crecido un poco.]
Shin: ¡W-Woah!, ¡¿eres más alta que ayer?!, ya no pareces una bebe de dos meses Haruka… ahora pareces de seis… ¿cómo es posible?
Debe tratarse de algo relacionado con la genética de los demonios..
[Él se vistió y preparó a Haruka rápidamente para después encaminarse al mercado. Él le puso una bufanda en el cuello para esconder su boca y sus colmillos.
Sin embargo, mientras camina por las calles del pueblo, se detiene frente a una pared que tiene un cartel pegado.
En él aparece el héroe Hiroshi, pero más viejo y con una barba. Debajo hay un mensaje que dice lo siguiente.]
"El héroe Hiroshi sacrificó su juventud por el bien del reino, ¡ahora haz tu parte!, ¡reporta cualquier actividad de índole satánica!, ¡o cualquier actividad que se aleje de la palabra de dios y del gran testamento!
¡Con tu ayuda podremos preservar la luz del reino!, ¡no podemos permitir que la opresión de los demonios vuelva a ocurrir!, ¡mantengamos la pureza del reino con la ayuda de todos!"
Shin: Será mejor andar con cuidado…
[Hay puestos de comida, ropa y baratijas en ambos lados de la calle. No solo eso, sino que la gente a los alrededores es de apariencia pobre, algo que contrasta mucho con la infraestructura elegante y pretenciosa del reino. Hay patrullas de guardias de armadura plateada recorriendo todo el lugar, por lo que Shin se anda con cuidado.
Se detiene en un par de puestos y le compra algo de ropa a Haruka, un juguete de tela y algodón y algo de fruta.
Sin embargo, al pasar un puesto donde vendían pollos asados, Haruka comienza a intentar zafarse de los brazos de Shin.]
Shin: Shh… shh…tranquila… ¿que te pasa?..
[Ella señala el puesto de comida.]
Shin: ¿Q-Quieres algo de comida?
[Shin mete su mano a su bolsillo y saca un par de monedas de plata.]
*En la mente de Shin*
–Rayos… quería guardar esto.. pero si Haruka quiere que compre el pollo… –
[Sin pensarlo dos veces, Shin lo compra y lo guarda en su mochila. Al volver a casa, nuevamente pone a Haruka encima de la mesa, para después sacar el pollo.]
Shin: Es bastante grande… con esto podríamos comer dos días seguidos..
Voy por un cuchillo para cortarlo…
[Shin se da media vuelta y camina hasta la cocina. Una vez ahí toma un plato de madera y un cuchillo.
Sin embargo, al regresar, no hay ni un solo rastro del pollo, mientras que Haruka tiene la boca inflada.]
Shin: ¡¿EH?!, no me digas que… ¿t-te lo comiste de un solo bocado?
[Haruka se pasa la comida de la boca y después eructa, solo para sonreír placidamente después.
Shin no puede evitaR soltar una pequeña risa y sonreír un poco.]
Shin: Supongo que hoy me quedo sin cenar..
[El cielo anochece y la luna llena brilla a su máximo esplendor. Haruka alcanza a verla por la ventana… pero… al hacerlo, algo se activa en su interior…]