Chereads / Konosuba: El titan y la Reina Kevivan's Cut / Chapter 22 - Capitulo 16: La Batalla del cielo y la tierra

Chapter 22 - Capitulo 16: La Batalla del cielo y la tierra

Paso el tiempo en Axel no habian ocurrido mas problemas durante un lapso de un mes desde la derrota de Hans, todo fue paz y tranquilidad.

El sol brillaba con fuerza en la tranquila tarde, mientras el grupo disfrutaba de un momento de calma en la espaciosa mansión que Eren había conseguido con sus esfuerzos. Aqua estaba recostada en el sofá.

Megumin intentaba convencer a Eren de acompañarla a practicar magia explosiva, y Darkness revisaba documentos con una expresión más seria de lo usual.

De pronto, los tranquilos momentos fueron interrumpidos por un fuerte golpe en la puerta. Aqua, visiblemente irritada, se levantó con torpeza y abrió para encontrarse con el mayordomo de Darkness, que parecía nervioso, casi temblando.

Aqua: (mirándolo con desdén) ¿Y ahora qué? ¡Siempre que alguien como tú aparece, terminamos con más problemas! ¡Fuera de aquí!

El mayordomo, visiblemente asustado, levantó las manos en un intento de calmarla.

Mayordomo: (tartamudeando) S-señora Darkness, vine... porque traigo noticias urgentes. Usted... usted podría perder lo más preciado que tiene.

La habitación cayó en silencio. Eren, que había estado puliendo su espada, levantó la mirada con una expresión seria, mientras Megumin dejó caer el tomo de magia que tenía entre las manos.

Darkness: (parándose de golpe) ¿Qué? ¿Qué dices? ¿Qué es eso tan grave?

Aqua: (señalándolo) ¡¿Ves lo que digo?! ¡Sabía que esto iba a traer problemas! ¡Fuera, fuera, antes de que empieces a maldecir la casa o algo peor!

Eren: (cruzando los brazos) ¿Es verdad eso? Más vale que expliques rápido.

El mayordomo, sudando como si estuviera enfrentándose a un verdugo, sacó una carta sellada con un elegante emblema. Darkness, al reconocer el símbolo, palideció inmediatamente.

Mayordomo: (temblando) La princesa Iris ha escuchado de sus hazañas y desea... d-desea conocer más sobre sus aventuras. Ha ofrecido pagarles por compartir sus historias en la corte real.

El grupo dejó escapar un suspiro de alivio, pero Darkness todavía lucía rígida.

Darkness: (apretando la carta) ¡Eso no es todo! ¡¿Acaso no entienden lo que significa?! Si llegamos a deshonrarla con nuestras... (mira a Aqua y Megumin de reojo) payasadas o si Eren pierde la paciencia, ¡la princesa podría ordenarnos ejecutar!

Las palabras de Darkness bastaron para volver a tensar el ambiente. Sin embargo, antes de que pudiera hacer algo, Megumin y Aqua se acercaron a toda prisa, tratando de arrebatarle la carta.

Megumin: (excitada) ¡¿Una invitación de la realeza?! ¡Déjame verla! Seguro querrán oír de mi magia explosiva.

Aqua: (con una sonrisa traviesa) Tal vez la princesa también quiera que bendiga el castillo con mi divinidad. ¡Dámela, Darkness!

Darkness: (protegiendo la carta) ¡No! ¡Esto no es un juego! (Se la mete bajo el pecho) ¡No podemos responder sin pensar!

Eren observó la escena con exasperación creciente.

Eren: (frotándose las sienes) Esto va a ser un desastre...

El caos continuó mientras Megumin intentaba trepar encima de Darkness y Aqua daba vueltas como un tornado buscando la forma de meter mano. Mientras tanto, el mayordomo, completamente ignorado, murmuraba para sí mismo:

El mayordomo de Darkness, Heidel la había informado de que la princesa Iris vendría especialmente a Axel para conocer a Eren y su grupo, fascinada por sus hazañas al derrotar a varios generales del Rey Demonio.

Darkness: (con un suspiro pesado, sosteniendo la carta arrugada) ¡Basta! Esto es algo serio, y ustedes no están ayudando. ¡Eren, Historia, necesito que entiendan la magnitud de esto!

Eren, apoyado contra la pared con los brazos cruzados, levantó una ceja sin mucho interés. Historia, sentada cerca de la ventana, parecía perdida en sus pensamientos, con una expresión que mezclaba nostalgia y desdén.

Historia: (con calma) Explícalo rápido, Darkness. A mí tampoco me interesa meterme en problemas innecesarios.

Darkness: (con voz firme, ignorando el comentario) La princesa Iris quiere conocernos... bueno, más bien escuchar nuestras historias de "hazañas heroicas". Si lo hacemos mal, si alguien actúa de forma inapropiada, podríamos avergonzarla. ¡Eso podría ser desastroso para nosotros!

Aqua: (alzando la voz) ¿Por qué estás mirando a Eren cuando dices eso? ¡Yo soy una diosa, Darkness, y tú eres más torpe que yo!

Historia: (cruzándose de brazos con una pequeña sonrisa burlona) Darkness tiene un punto, Aqua. Aunque eso también te incluye a ti. Y a Megumin.

Megumin: (ofendida) ¡Oye! ¿Qué insinúas? Mi magia explosiva es la cúspide del arte mágico. ¡La princesa debería estar honrada de escucharme!

Historia: (sin perder la calma) Insinúo que eres tan inútil como Aqua y Darkness juntas. Pero, claro, con más fuegos artificiales.

Darkness palideció, ofendida pero sin poder negar la afirmación. Eren dejó escapar un gruñido, claramente irritado.

Eren: (gruñendo) Entonces no vayan. Simple. Yo no tengo tiempo para estas tonterías.

Historia: Estoy de acuerdo. Darkness, escribe una respuesta rechazando la invitación. Este grupo no es apto para algo tan importante.

Darkness: (algo insegura) ¿Están seguros? ¿Y si...?

Historia: (interrumpiendo) Hazlo.

Al día siguiente

Darkness entró en el salón común con una carta en la mano, su rostro mostraba una mezcla de resignación y terror.

Darkness: (suspirando) Lo sabía. Respondí demasiado rápido.

Historia: (alzando una ceja) ¿Qué pasó ahora?

Darkness colocó la carta en la mesa, donde Aqua y Megumin, ya curiosas, se apresuraron a leer.

Megumin: (riendo nerviosa) ¡Oh! Esto... esto es más grande de lo que esperaba.

Aqua: (pálida) ¿Una fiesta? ¿En el castillo? ¿En nuestra honor?

Darkness: (con voz sombría) La princesa no aceptó nuestro rechazo. Está organizando un gran banquete en nuestra "honor". No podemos decir que no ahora.

Eren: (cruzándose de brazos) No iré.

Historia: (mirándolo con severidad) No puedes simplemente ignorarlo, Eren.

Eren: (indiferente) Ya lo estoy haciendo.

Darkness y Historia intercambiaron miradas, claramente frustradas.

Darkness: (con una sonrisa tensa) Muy bien. Si es lo que quieres escuchar, no hay banquete. La guardia real vendrá a darnos un mensaje... ¡nada más!

Historia: (siguiendo el juego) Exacto. Sólo eso, Eren.

Eren las miró con sospecha, pero finalmente asintió, prefiriendo no discutir.

Historia: (susurrando a Darkness) Esto es tu responsabilidad si sale mal.

Darkness: (con una sonrisa forzada) Todo estará bajo control. ¡Lo prometo!

Sin embargo, ambas sabían que mantener a Aqua, Megumin y Eren presentables sería un desafío digno de héroes... o suicidas.

Aunque inicialmente Darkness había rechazado la invitación a la cena, pensó que podría escaparse de la situación... hasta que recibió una carta oficial de la princesa, invitando a todo el grupo y haciendo imposible su excusa.

En la mansión Dustiness

Darkness: (con un tono autoritario) Bien, ¡hoy es el día en que todos luciremos como héroes de verdad! Les pedí a los sirvientes de mi padre que prepararan ropa adecuada para cada uno de ustedes.

Los sirvientes llevaron una pila de vestidos al salón principal, donde Aqua, Megumin e Historia esperaban. Eren, sentado en una silla con los brazos cruzados, ya parecía aburrido.

Sirviente: (entregando un vestido a Aqua) Este debería ser adecuado para usted, señora.

Aqua lo sostuvo frente a ella y frunció el ceño.

Aqua: (molesta) ¿Esto no parece más un vestido de novia? ¡No estoy planeando casarme, Darkness!

Darkness: (apretando los dientes) No hay tiempo para quejarse. ¡Póntelo!

Mientras Aqua se retiraba a cambiarse, los sirvientes intentaron encontrar algo que le quedara a Megumin.

Sirviente: (ofreciendo un vestido más pequeño) Este es de cuando la señorita Darkness era niña.

Megumin: (mirándolo incrédula) ¡¿Cómo es posible que esto me quede grande?! ¡Esto es ridículo!

Historia: (con una sonrisa burlona) ¿Tal vez porque estás atrapada en el cuerpo de una niña eterna, Megumin? Deberías agradecer que no te ofrecieron ropa para muñecas.

Megumin: (frustrada) ¡Historia!

Finalmente, Darkness, visiblemente exasperada, ordenó que un sastre trabajara rápidamente en adaptar uno de los vestidos. Mientras tanto, Eren seguía sentado, observando con una mezcla de indiferencia y diversión.

Darkness: (mirándolo) ¿Y tú? ¡No puedes presentarte con esa ropa andrajosa!

Eren: (sereno) Estoy bien así.

Historia: (cruzando los brazos) Eren, no seas terco. Necesitas verte presentable.

Eren: (gruñendo) ¿Y para qué?

Historia: (con una sonrisa sarcástica) Porque sería una pena que la princesa pensara que somos unos bárbaros sin modales. Aunque... supongo que sería verdad en tu caso.

Eren suspiró y finalmente aceptó ponerse un traje que pertenecía al padre de Darkness.

Aqua: (regresando con el vestido puesto, tropezando un poco) ¡No puedo moverme bien en esto!

Historia: (mirándola de arriba abajo) Pareces lista para una boda, Aqua. Aunque no sé quién sería lo suficientemente valiente para casarse contigo.

Aqua: (irritada) ¡Cállate, Historia!

Cuando todos estuvieron listos, se reunieron en el salón principal. A pesar de los inconvenientes, lucían sorprendentemente elegantes. Incluso Eren, aunque claramente incómodo, se veía impecable con el traje.

Hoy era un día importante la realeza enviaban una escolta 

Eren: Aqua chicas vamonos!

Aqua: A donde con tanta prisa? Eren

Eren: Huh?! Que rápido olvidas las cosas... hoy vendrá la guardia real de la capital ha darnos un mensaje importante.

Las demás solo rieron con una risa burlona de alguna forma les había causado gracia discutir.

Megumin: (tratando de contener la risa) ¡Eres el único que se creyó esa mentira, Eren!

Eren: (mirándolas con sospecha) ¿Qué están tramando?

Historia: (sonriendo mientras caminaba) Nada, nada. Sólo sigue andando.

De camino hacia las puertas de Axel comenzaron a hablar de temas triviales Eren solo caminaba escuchándolas hablar se sentía agradecido por todo lo que han logrado conseguir compañeros, amistades, gente en la que realmente pudiera confiar sobre todo esa sonrisa que lo caracterizaba hace cinco años anhelando la libertad de los suyos.

En su interior, recordó esa sensación que había perdido hace cinco años: la libertad que había anhelado, y una vez más, se sintió agradecido por estos momentos, por estos compañeros... y por una vida que, aunque llena de caos, se sentía genuina.

Aqua: Mmmm ¿Qué clase de vestido o ropa que crean que deba comprar? Una vez que nos hagamos asquerosamente ricos – Hablo con orgullo.

Historia: Un gran vestido zafiro vendría bien con tu peculiar cabello jeje.

Eren: Ni idea el porque chicas piensan en arreglarse bien, nunca lograre comprender eso de ustedes – Comento el chico con desinterés.

Darkness: Venga venga Eren tampoco tienes que decir que te gusto Jujuju.

Eren: EH?! Eso no viene al caso!!

Darkness: Me encanta molestarte jujuju.

Esta paladín no hacia otra cosa más que fastidiar a Eren de cualquier forma eso fue beneficianté tan grande era la lujuria de Darkness incluso espantaba al propio Dullahan atormentándolo o desconcertando a un archiduque del infierno habian ventajas favorables el tener a Darkness.

Eren: Diablos tía eres como una patada en la entrepierna.

Darkness: Ouch no me vendrían mal un cumplido de vez en cuando.

Megumin: Chicas ¿Alguna sabe si Eren sale con alguna chica de la ciudad? Sabe he oído rumores de que una es la afortunada.

Eren: AH?! No digas que no vienen al caso, Megumin

Megumin: AHU?! Dije algo indebido?

Eren: No salgo con nadie al menos por el momento, ¿Por qué tanto interés? AJA! Acaso con Yunyun en el grupo de Porco te quedaste sin quien joder!!

Ella quiso ocultar sus nervios sus esfuerzos fueron inútiles su desesperación estallo trato de cambiar el tema de Yunyun, supo que metió la pata inconscientemente es cierto su bondad y humildad la hacían maravillosa pero su torpeza a veces la llevaba a cometer locuras y metidas de pata al relacionarse con los demás.

Megumin: NO! NO! Claro que no! Esto..! Esto...! ¿Qué deberíamos cenar? – Hablo tratando de evitar sus preguntas del chico.

Eren: Lo capto no quieres habla sobre ello bien... llegamos!

Inmediatamente se detuvieron a recibir a los diferentes caballeros acompañados de un mensajero habian venido por petición del rey, las chicas acordaron comportarse formalmente con la nobleza por lo que Darkness estuvo regañándolas por sus tonterías, el primero en hablar fue un hombre con aspecto noble por lo visto era el cabecilla.

????: Es un honor conocerte aventurero Eren Jaeger hemos oído grandes cosas sobre ti deseábamos conocerte en persona me presento, soy Lain de la casa Coleslaw, de bajo rango, archimaga al servicio de tutora de la princesa Iris del reino de Belzerg..

Eren: No hay problema pero disculpe... ¿No era solo un mensaje? Entiendo que quiera mantenerse seguros son necesarios tantos guardias?

Lain: Es una gran fiesta

Lain: "Oh, mi querido Eren, no tienes de qué preocuparte. Es una gran fiesta en honor a tus hazañas, después de todo. Sin embargo… una persona con una fuerza tan increíble como la tuya, pues… no podemos ser descuidados, ¿verdad? Un héroe de tu calibre podría despertar tanto admiración como… cómo decirlo… temores infundados."

Eren frunció ligeramente el ceño. Había algo en el tono de Lain que no le gustaba, como si estuviera sondeando sus reacciones. Sin embargo, mantuvo su compostura mientras otro hombre, un comandante de la escolta real, intervino.

Comandante: "Dime, Eren, es impresionante ver a alguien de tu fuerza en un lugar como este. Me preguntaba… ¿acaso has liderado ejércitos antes? Tienes ese aire de… experiencia. Tal vez en otro reino o, quién sabe, en otro tiempo."

Eren: "Liderar… ejércitos, dices." Eren apretó la mandíbula, sintiendo cómo su pasado intentaba resurgir en su mente. "Bueno, la experiencia de batalla es inevitable para alguien que se enfrenta a generales del Rey Demonio. Pero no soy más que un aventurero ahora."

El comandante intercambió una mirada con Lain, y ambos parecían satisfechos con la respuesta, aunque una sonrisa sutil asomaba en sus rostros, como si disfrutaran de los sutiles intercambios. Lain continuó, con un tono de curiosidad contenida.

Lain: "Curioso, Eren. Me preguntaba, un hombre tan determinado como tú… ¿qué harías si te encontrases con una amenaza a la humanidad, digamos… algo que pudiese destruir reinos enteros? ¿No te resultaría familiar la sensación de tener… tanto poder en tus manos?"

Las palabras de Lain le golpearon profundamente, haciéndole recordar los eventos del Retumbar y las decisiones que lo llevaron a cargar con el peso de tantas vidas. ¿Cómo sabrían de esa experiencia, de esos pensamientos que lo habían atormentado durante tanto tiempo? Eren guardó silencio, intentando no mostrar ninguna señal de perturbación.

Eren: "Creo que cada persona hace lo necesario para proteger lo que ama. Ese sería mi único propósito, nada más."

El comandante asintió lentamente, observando a Eren con una mirada calculadora.

Comandante: "Desde luego, desde luego. Un propósito noble, sin duda. Pero dime, Eren… ¿cuántas vidas crees que serían un precio justo para esa protección? Es solo una curiosidad… después de todo, en la defensa de un reino, siempre se requieren sacrificios. Estoy seguro de que alguien de tu experiencia lo entendería."

Eren sentía como una presión en el pecho. Cada pregunta era una daga dirigida cuidadosamente hacia su pasado, hacia esos oscuros recuerdos de sangre y destrucción. No podía evitar pensar que tal vez estos hombres sabían más de lo que decían, y esa posibilidad lo inquietaba. Sin embargo, respiró hondo y mantuvo su expresión controlada.

Eren: "Uno siempre debe buscar evitar sacrificios innecesarios. Pero si son inevitables… supongo que uno debe vivir con las consecuencias, ¿verdad?"

Los ojos de Lain se entrecerraron levemente, y una sonrisa pequeña y enigmática cruzó su rostro.

Lain: "Sí… vivir con las consecuencias. Muy bien dicho, Eren. Bien, entonces, si estás listo, la princesa Iris te espera en el castillo para una celebración en tu honor. Será una ocasión memorable."

Eren: "Gracias… aceptaré la invitación."

Mientras la escolta real comenzaba a organizarse para escoltar al grupo hacia la capital, una sensación de desconfianza crecía en el pecho de Eren. No podía dejar de preguntarse si esta "fiesta" era realmente en su honor… o si había otros motivos ocultos detrás de ella.

Aqua (susurrando a Eren): "Oye, ¿no crees que estos tipos están… un poco raros? Digo, ¿por qué tantas preguntas?"

Eren: "No lo sé… pero mantén los ojos abiertos, Aqua. Tengo el presentimiento de que esto es más que una simple celebración."

Los guiaron a uno de los salones del castillo real en la capital del Reino. Eren se veia muy desconfiado, la archimaga Lain conocía su identidad, Podría ser que tambien sepa de la fundadora? Sus posibles amigos en este mundo.

Aqua: Son mucha gente.

Lain: Hemos trabajado en muchas fiestas

Sin ponerse en protestas, continuaron su camino al castillo, Cada uno de esos sujetos le eran sospechosos a Eren, Quizas los Marley se encontraban en ese mundo, eso era, mucha gente murio en el retumbar, tiene sentido que Beelzerg tenga tantos reencarnados Marleyanos.

Eren: Historia...

Historia: En efecto me di cuenta, muchos marleyanos vinieron Aqui

Eren: debo vigilarlos

Historia: Tu tambien te diste cuenta?

Eren: Desde el principio, sobretodo Lais, ella me da un mal presentimiento, que debemos hacer ahora?

Historia: Convertir la ciudad en un campo de batalla no es un opcion. Cuando sea el momento los neutralizaremos, talvez sean marleyanos...

La chica se sorprenderia, no lo creeria posibles, sus antiguos enemigos, los mismos que intentaron erradicarlos de alguna forma, Al igual que Armin y Mikasa habian reencarnado

Historia asintio a su amigo

Aqua los miraba con curiosidad

Aqua (en susuros): Ustedes dos de que hablan?

Eren: Nada importante, solo es un disparate - Hablo intentando evitarla'

Uno de los Marleyanos vuelto Heroe tropezo, a vista de todos nadie la ayudaría, mas Historia se ofreceria a ayudarle al chico, quien humildemente la acepto.

Historia: Estas bien?

Marleyano: Si, eres muy amable al preocuparte por un chico que ni conoces. Historia: Para nada, me gusta ayudar a los demas - decia riendo un poco -Marleyno: "Espera, no nos hemo visto antes? en algun lugar? "

Historia: Para nada, no recuerdo haberte visto en algun lugar

Marleyano: Bueno ,tengo que volver con mis compañero

Eren: Historia apresurate, no hay tiempo para hablar con desconocidos

Historia: ya voy Eren

Marleyano: Eren? Historia? no puede ser ustedes son

Ambos se encontrarian confundidos

Eren: Disculpa, te conocemos?

Marleyano: Como olvidar a los eldianos que se oponian a la paz...

El marleyano se retiraria con recuerdo de resentimiento.

Eren e Historia se quedarian callados, habian espantado al chico

Marleyano: Esos no traman nada bueno.

Eren queria evitar a toda costa otra carniceria

Una heroina Marleyana se acercaria

Eren: Pero si eres... Guerrera honorraria de Marley Finger.. o prefieres que te llame Pieck Finger?-Contesto el chico con una mirada determinada, inmediatamente la chica cambio a confirmar su identidad, en efecto era la anterior usuaria del titan fundador, Eren solo le miraba con una mirada de desprecio

Pieck Finger: Vaya, te volviste mas listo que antes, tranquilo no te matare, ya no estamos en Marley, aunque ha nadie aqui le faltan las ganas de matar al fundador.

Eren: Si lo que dices es verdad, pruebalo

Pieck: Me pondria unas esposas si pudiera, pero ahora estas en la fiesta del Rey de Marley.

Eren y equipo continurian caminando, pensando Eren que mataria a Pieck si hiciera algun movimiento brusco.

Eren: Crees que por ser una mujer te perdonaria si me atacaras?

Pieck: ah, Eren, eres una persona completamente diferente, descuida chico, no pienso traicionarte, confia en la palabra de esta dama.

contesto con una mirada fria Historia se vio en la necesidad de unirse a la planica, esto parecia dejar de ser un juego y podria tornarse en una guerra o una declaracion de guerra en el reino de Belzerg

Historia: Te llamas Pieck finger, o me equivoco?

Pieck: La misma, tu eres la ex reina de Paradis, Historia Reiss. Segun las palabras de Reiner te describia como una chica ideal o una deidad.

Historia: El? quien? Reiner?

Pieck: No lo sabias? el se encontraba totalmente enamorado de ti o mas bien, se asemeja a una obsercion

Historia: Ah... esa no me la sabia, pero de ninguna manera dejare a Eren, Hay una sola persona a quien amo y solo a esa persona.

Pieck sentiria pena por el muchachon, Historia lo habia enviado a la friedzone y de forma muy cruel, aunque preferible estar solo que con quien no te corresponda.

Pieck: Ay muchacha, que te perdonen, imagina si estuviera aqui.

Eren: imbecil

Pieck: ay muchacha, me caes bien, vamos a la fiesta.

Eren (en pensamientos): no confio en esta persona, parece divertirse pero , y si intentan secuestrar a Historia? Ya vi con Silvia que la sangre de Historia tiene un mejor efecto sobre los poderes titan.

no- Pensaria el chico

Lais daria una gran sonrisa, señal de que habian llegado a su destino.

A medida que Eren y su grupo avanzaban hacia el salón del castillo, una mezcla de tensión y sospecha se apoderaba de él. Las palabras de Lain y del comandante seguían resonando en su mente, cada una de ellas un recordatorio de su pasado y de los sacrificios que había hecho. Al entrar al gran salón, sus ojos se posaron en los numerosos rostros presentes, buscando amenazas escondidas y posibles enemigos entre la multitud.

De repente, un conjunto de figuras familiares captó su atención: Armin, Mikasa, Ymir, y hasta Sasha estaban allí, cada uno vestido para la ocasión, pero también con el mismo aire de alerta que él mismo llevaba. Eren sintió un escalofrío al verlos a todos reunidos, como si el destino hubiese planeado un extraño reencuentro entre ellos, y no podía evitar preguntarse si esta "celebración" terminaría convirtiéndose en una batalla campal.

Darkness: "¿Qué ocurre, Eren?" – preguntó, notando su expresión tensa. – "No tienes que preocuparte. Es lógico que tus amigos estén aquí. La princesa Iris pidió prestado el castillo para la fiesta… después de todo, ¡este castillo pertenece a mi familia!"

Eren le lanzó una mirada llena de desconfianza. Las palabras de Darkness, en lugar de calmarlo, parecían intensificar sus temores. Si la realeza de Belzerg había permitido el uso del castillo para esta celebración, ¿no sería esto una estrategia para reunir a todos los que podrían considerarse una amenaza en un solo lugar?

Armin: (susurrando a Eren mientras se acercaba) "Eren… ¿no tienes la sensación de que esto es demasiado conveniente? Todos aquí… nosotros, los Marleyanos… es como si alguien quisiera que estuviéramos juntos en un solo lugar."

Eren: "Lo sé. No me gusta nada esto, Armin." – susurró de vuelta, con los ojos fijos en Pieck, quien lo observaba desde el otro lado del salón con una sonrisa enigmática. – "Si intentan algo, no dudaré en hacer lo que sea necesario."

Aqua, que había estado observando la conversación, se acercó curiosa, susurrando en voz baja y sin comprender la tensión del momento.

Aqua: (en susurros) "Oigan, ¿de qué están hablando? ¿Por qué están todos tan serios? ¡Es una fiesta! ¡Deberían relajarse!"

Historia: (poniendo una mano en el hombro de Aqua) "No es tan simple, Aqua. Hay personas aquí… personas con las que hemos tenido una historia complicada. Necesitamos estar alerta."

Mientras tanto, Pieck se aproximó con paso lento pero seguro, dirigiéndose hacia Eren con una expresión fría y calculadora, aunque en sus labios había un leve rastro de diversión

Armin sentiria una gran desconfianza, no podia confiar en la gente de Beelzerg con tanto reencarnado marleyano, solo en las aliadas de Eren.

Armin: Eren te diste cuenta?

Eren: Si, los marley han reencarnado aqui, me pregunto si todavia tendran el objetivo de tener al fundador

Mikasa, quien había permanecido en silencio junto a Armin, miró a Eren con una mirada seria y protectora. Aunque se había acostumbrado a ver a Eren en situaciones de riesgo, la situación actual le producía una inquietud diferente.

Mikasa: "No importa lo que pase, estaré a tu lado, Eren. Si esto se convierte en una pelea… nos aseguraremos de salir de aquí juntos."

Darkness: (tratando de calmar los ánimos) "Vamos, todos. Entiendo que pueda ser intimidante ver a tantos rostros conocidos de otro mundo, pero les aseguro que la princesa Iris no tiene malas intenciones. Esta fiesta es para honrar a los aventureros. No sería propio de ella provocar un conflicto."

Historia: "Puede que tengas razón, Darkness, pero no podemos darnos el lujo de bajar la guardia. Si las cosas se tornan peligrosas, debemos estar preparados para actuar."

La tensión en el aire era palpable, y cada uno de los amigos y enemigos de Eren parecía estar al límite, evaluando cada movimiento y cada palabra como si fuera una señal de que el conflicto estaba por desatarse. Aunque todos intentaban mantener las apariencias en la fiesta, la atmósfera estaba cargada de la posibilidad de una confrontación en cualquier momento.

Eren mantuvo su mirada fija en Pieck y los demás Marleyanos en el salón, con sus manos listas para reaccionar si era necesario. Por su parte, Armin también se preparaba mentalmente, evaluando la situación y considerando las opciones en caso de un enfrentamiento.

Mientras tanto, Aqua, ajena a los matices de esta peligrosa reunión, se sirvió una copa de vino y miró a los demás con curiosidad.

Aqua: (a Megumin) "¡Oye, Megumin! Todos están muy serios, pero yo pienso disfrutar de la fiesta. ¡Nos han invitado y no podemos desaprovechar la oportunidad de probar la comida gratis!"

Megumin: (suspirando) "Aqua… a veces creo que vives en otro mundo. Pero bueno, supongo que alguien tiene que divertirse mientras los demás se preocupan."

Mikasa: Tranquilo Eren, yo me encargare de esa mujer de 4 patas

Eren: Si me lo dices tu me tranquilizo, confio en ti

Mikasa: no te defraudare

Nuevamente fueron interumpidos cuando una voz los llamaria, una gran habitacion, cada aventurero en una mesa guiada.

Eren: Y bien, nos llamaron a una fiesta, o no? Al lado Pieck hablaba con Darkness y Megumin, ambas chicas parecian haberse llevado bien con la pelinegra. Eren se volveria contra Pieck. Eren no confiaria en la pelinegra.

Un Marleyano se acercaria y escupiria a Eren : aplastaste tanta gente, les destruiste sus sueños, tus pecados nunca seran perdonados.

Los presentes se quedarian sorprendidos por la declaracion, no creian posible, pero un solo marleyano se atrevio a sacar el tema del retumbar, no queria aceptarlo, pero el destino se las arreglo para devolverlo a ese infieno.

Eren: Porque haces esto?

Marleyano: No es obvio? ambos tenemos un objetivo en comun, acabar con el rey demonio, somos iguales en eso y nada mas

Historia y Aqua mirarian con desprecio al chico colocandose adelante de Eren para defenderlo

Historia/Aqua: Eren no es una basura, es nuestro amigo

Marleyano: vaya, cuanto amor, cuanta pasion, eres admirable, muchacho y que haran al respeto?Historia: Tu no lo conoces.

El Marleyano se retiro a su mesa por protocolo de un guardia. Eren, Historia, Megumin, Darkness y Porco, junto con algunos magos carmesis, se encontraban reunidos en el majestuoso salón del castillo real en la capital del Reino. Allí, rodeados de otros héroes y personajes notables del reino, esperaban ansiosos a que la princesa los recibiera.

Pronto, la elegante figura de la princesa Iris apareció en el salón, vestida con un deslumbrante traje de gala. Su cabello dorado caía en suaves ondas sobre sus hombros, y su mirada brillaba con una mezcla de curiosidad y respeto hacia los héroes reunidos.

La Princesa solo le habla a Claire para que Caire hable por ella.

"Bienvenidos, valientes héroes", dijo Claire en nombre de la princesa con una sonrisa cálida.

"Es un honor tenerlos aquí y agradecerles personalmente por su valiosa contribución a nuestro reino".

Todos los presentes se inclinaron en señal de respeto y agradecimiento. 

"He oído hablar de sus hazañas y estoy asombrada por su valor y dedicación", continuó Claire en nombre de la princesa.

"Por favor, siéntanse como en su hogar y disfruten de esta velada".

Darkness sentía el nerviosismo en cada fibra de su ser. Sabía que la situación podría empeorar en cualquier momento, pero también había una parte de ella que se deleitaba en la posibilidad de un enfrentamiento. ¿Una batalla en medio de una gala real? La sola idea le provocaba escalofríos de emoción.

Mientras observaba a sus compañeros, su atención se desvió hacia la princesa Iris, quien aún daba la bienvenida a cada invitado con una sonrisa serena y cálida. Darkness trató de concentrarse en la voz de la princesa, aunque le costaba apartar la mirada de Pieck, quien conversaba con Megumin y Aqua. Por algún motivo, el intercambio entre ellas parecía amigable, lo cual desconcertaba a Eren y lo llenaba de desconfianza.

Antes de que Eren pudiera responder, un guardia del castillo intervino y obligó al Marleyano a retirarse a su mesa. La tensión quedó flotando en el aire, y los ojos de todos se posaron de nuevo en Eren, quien observaba al Marleyano con una expresión de mezcla de ira y tristeza. Por un momento, las sombras de su pasado parecían pesar más que nunca.

Darkness aprovechó la pausa para dirigirse hacia la princesa Iris, quien observaba con una expresión de calma que parecía estar ligeramente ensombrecida por la preocupación. Para Darkness, ese momento era un recordatorio de lo impredecible que podía ser una reunión con héroes y enemigos de tantos mundos.

La princesa Iris, notando la incomodidad, se adelantó e hizo un gesto para calmar a los presentes.

Claire en nombre de Princesa Iris: "Valientes héroes, esta noche es una celebración de sus esfuerzos y sacrificios. Dejen atrás las rencillas del pasado, aunque sea por esta velada. En este salón, todos están bajo mi protección."

Darkness, recordando las advertencias de Heidel y los temores de Eren, asintió discretamente. No podía evitar sonreír ante la situación. Para ella, había algo poéticamente caótico en esa paz frágil, en esa tensión que latía bajo la fachada de cordialidad.

Mientras tanto, Aqua, completamente ajena al peligro latente, se sirvió otra copa de vino y levantó el vaso en un brindis improvisado hacia Megumin.

Aqua: "¡Megumin, deja de preocuparte! Estamos en una fiesta de la realeza, ¡y hay comida y vino gratis! ¿Qué más se puede pedir?"

Mientras Aqua alzaba su copa y sonreía, un recuerdo reciente le vino a la mente, uno que rápidamente la hizo tensarse y mirar la copa con desconfianza. ¿Vino? Ya no podía beber como antes, y no solo por los efectos habituales. Se quedó mirando el vaso, fingiendo contemplar el color del líquido, mientras su mente vagaba a aquel día de revelaciones que había compartido únicamente con Wiz.

Megumin suspiró, mirando a Aqua con una mezcla de resignación y diversión.

Megumin: "A veces creo que no entiendes nada de lo que está pasando, Aqua... pero supongo que tienes razón. Alguien tiene que divertirse mientras los demás se preocupan."

Eren observaba a sus compañeros, y aunque la desconfianza aún persistía en su corazón, una parte de él encontraba consuelo en su presencia. Por ahora, tendría que confiar en ellos y en la promesa de la princesa de mantener la paz, aunque cada fibra de su ser le advirtiera que el conflicto estaba al acecho.

En medio de la tensión y la incertidumbre, la fiesta continuó, y aunque Eren mantenía una postura defensiva, la imagen de Aqua y Megumin riendo y brindando le recordaba que, por ahora, él también era parte de ese mundo, aunque fuera por un momento.

Aqua regresó de su recuerdo y parpadeó un par de veces, mirando la copa de vino en su mano. Con cuidado, colocó un dedo sobre el borde y utilizó su poder de purificación, convirtiendo el contenido en agua sin que nadie lo notara.

Aqua (en voz baja, para sí misma): "Solo una simple agua... y nadie sospechará."

Dio un pequeño sorbo, fingiendo disfrutar del sabor, mientras reía con Megumin y los demás. De alguna manera, ese secreto le pesaba menos cuando fingía que todo estaba bien.

Entre risas y brindis, la velada avanzaba, y Eren y su grupo empezaban a relajarse un poco, disfrutando de la comida y bebida de la gala. Sin embargo, la tranquilidad del momento se vio interrumpida cuando, de entre todas las mesas del salón, una figura se acercó al grupo de Eren.

Darkness, con una mezcla de orgullo y reverencia, reconoció de inmediato a la visitante. Era nada menos que la Princesa Iris Stylish-Sword Belzerg, la joven noble de Axel, acompañada por su guardaespaldas, Claire Field Symphonia. Al ver que la princesa se dirigía a ellos, Darkness tomó el control de la situación con rapidez.

Darkness: "¡Por favor, todos limítense a comer y asentir! Yo me encargaré de hablar."

Eren, Historia, Aqua y Megumin intercambiaron miradas, algo confundidos, pero finalmente asintieron. Darkness se puso de pie y se inclinó respetuosamente ante la princesa.

Darkness: "Es un honor tenerla aquí, su alteza. Permítame presentarle a mi grupo. Este es… Eren Jaeger y su equipo." — Al decir el nombre de Eren, Darkness hizo una pausa con cierta emoción, como si el simple hecho de mencionarlo le diera un placer masoquista. Luego, miró a sus compañeros y continuó — "Y, alteza, les presento a Iris Stylish-Sword Belzerg, la digna princesa de este reino."

Iris sonrió con cortesía, irradiando una serenidad que resaltaba su noble linaje. Eren observó a la princesa con cierta curiosidad, notando que parecía una versión más joven y delgada de Darkness, pero con un aire más refinado y delicado. Mientras tanto, Historia observaba las tres uvas adornando el cabello de Iris, preguntándose si tenían algún significado especial.

Aqua, visiblemente emocionada de encontrarse ante la realeza, se inclinó con exagerada cortesía.

Aqua: "¡Oh, su alteza Iris! Es un honor conocer a alguien de tan alto linaje y belleza." — Mientras decía esto, Aqua comenzó a mover las manos como si fuera a hacer uno de sus famosos trucos de fiesta, los cuales usualmente terminaban en desastre.

Darkness, dándose cuenta de lo que Aqua planeaba, se inclinó rápidamente hacia ella y le dio un codazo firme.

Darkness: "¡Aqua, por favor, contén tus impulsos! No es momento de hacer desaparecer objetos importantes."

Aqua, sorprendida y un poco dolida por el golpe, hizo una mueca y decidió mejor quedarse en silencio, aunque no pudo evitar murmurar algo sobre "solo querer animar el ambiente".

Megumin, por su parte, aprovechó la oportunidad para sacar una capa oculta bajo el vestido que le había prestado Darkness, y, en un gesto dramático, se la colocó sobre los hombros. Luego levantó el brazo, preparándose para hacer una extravagante presentación al estilo de los magos carmesí.

Megumin: "¡Yo soy Megumin, la más poderosa archimaga del Clan Carmesí! ¡Portadora del hechizo supremo de la explosión!"

Darkness, anticipando que la teatralidad de Megumin podría incomodar a la princesa, se lanzó rápidamente sobre ella, sujetándola por los hombros para evitar que continuara. Megumin, atrapada, solo pudo murmurar un "¡Déjame brillar, Darkness!" antes de que Darkness lograra detener su espectáculo.

Historia y Eren compartieron una mirada cómplice, ambos conscientes de la importancia de la etiqueta y la formalidad debido a sus pasadas experiencias en las murallas. Ambos hicieron una reverencia educada y se presentaron con cortesía.

Historia: "Su alteza Iris, es un placer conocerla. Soy Historia, y me siento honrada de estar en su presencia."

Eren: "Eren Jaeger. Gracias por recibirnos, princesa."

Ambos intentaron mostrarse solemnes y dignos, tal como lo harían en la corte de las murallas. La princesa Iris los observó con una sonrisa cálida, y Eren no pudo evitar notar cierto aire de ingenuidad en su mirada, lo que le causó una leve decepción. En sus ojos, Iris parecía ser una noble más, alguien protegido de la dureza de la vida.

Claire Field Symphonia, la guardaespaldas de Iris, habló en nombre de la princesa, con una voz autoritaria pero respetuosa.

Claire: "Su alteza está ansiosa por escuchar sobre las aventuras de su grupo. Nos han dicho que han enfrentado peligros impresionantes. ¿Podrían compartir algunas de sus hazañas?"

Eren intercambió una mirada con Historia y Darkness, y sintió un ligero desinterés. Aunque sabía que la princesa probablemente estaba acostumbrada a escuchar historias fantásticas, dudaba que realmente comprendiera la brutalidad y las dificultades que enfrentaban los aventureros.

Antes de que cualquiera pudiera comenzar a contar sus historias, se escuchó un ruido extraño. Todos en la mesa miraron hacia Aqua, quien, en tiempo récord, había tomado una servilleta y comenzado a "dibujar" en ella usando comida como tinta. La sorpresa fue mayúscula cuando alzó la servilleta, revelando un retrato detalladísimo de la princesa Iris, tan fiel que incluso mostraba pequeñas migajas de pan que simulaban las migajas reales en la boca de la princesa.

Aqua: "¡Miren! ¡Es la viva imagen de su alteza! Me inspiré en su belleza para crear esta obra de arte."

Todos se quedaron mirando el retrato, sin saber cómo reaccionar. La precisión era tal que incluso la princesa se ruborizó, sorprendida de verse a sí misma retratada de manera tan... inusual.

Claire: "¿Cómo... cómo lograste tal precisión con solo comida y una servilleta?"

Aqua: "¡Eso es lo que pasa cuando tienes el talento de una diosa! Nada me detiene."

Megumin y Darkness miraban a Aqua con una mezcla de incredulidad y resignación. Mientras tanto, Historia se llevó una mano a la boca para evitar soltar una carcajada, y Eren simplemente suspiró, acostumbrado ya a las excentricidades de Aqua.

La princesa Iris, aunque un poco confundida, sonrió con gratitud.

Princesa Iris: "Es...precioso. Gracias

No esperaba un regalo tan… único." — Su tono era diplomático, aunque era evidente que no sabía cómo reaccionar del todo. Sin embargo, su sonrisa revelaba una auténtica admiración hacia el esfuerzo que Aqua había puesto en el retrato.

Darkness, claramente avergonzada por el comportamiento de su compañera, se inclinó hacia la princesa con una expresión mortificada.

Darkness: "Por favor, su alteza, no se preocupe. Castigaré a esta insolente de Aqua personalmente." — Sus ojos brillaban con una extraña emoción mientras pronunciaba esas palabras, pero rápidamente intentó recuperar la compostura — "A golpes, si es necesario."

Aqua: "¡¿Eh?! ¡¿Castigarme por ser talentosa?! Darkness, ¡eres cruel!"

Pero antes de que Darkness pudiera responder, la princesa Iris rió suavemente y sostuvo el retrato en sus manos, observándolo con detenimiento.

Princesa Iris: "En realidad, me ha gustado. Es un retrato muy… espontáneo. Refleja algo de mi espíritu, supongo."

Claire, que había estado observando la escena con una mezcla de incredulidad y satisfacción, sonrió al ver a Darkness tan agitada.

Claire: "Parece que Lalatina se pone un poco histérica cuando está en compañía de sus… particulares compañeros." — Claire disfrutaba de ver a Darkness en situaciones incómodas, como cuando ambas eran jóvenes.

Darkness, al escuchar su nombre de pila, "Lalatina", en boca de Claire, sintió que la vergüenza le subía por el rostro. Su postura se volvió rígida y asintió, intentando disimular su evidente incomodidad.

Claire: "¿Qué les parece si cenamos? La comida está servida."

La tensión en el ambiente se disipó un poco mientras todos se acomodaban alrededor de la mesa. Durante la comida, los héroes compartieron historias de sus aventuras, y aunque Darkness intentaba comportarse dignamente, aún no podía sacudirse la vergüenza por su "histeria" de antes. Se sentía completamente expuesta ante la princesa, Claire y Lain, quienes parecían disfrutar de su incomodidad.

En medio de la conversación, Claire mencionó algo que captó la atención de Eren.

Claire: "Así que… de ustedes hablaba el aventurero Porco Galliard."

Eren: "¿Porco Galliard? ¿El que tiene el poder del Titán Mandíbula?" — preguntó con tono neutral, aunque un brillo de reconocimiento apareció en su mirada.

Claire asintió: "Sí, ha hablado de ustedes. Debo decir que respeto y admiro a ese aventurero… Pocos poseen su fuerza y habilidades."

Eren, sin querer alargar la conversación, empezó a hablar sobre algunas de sus hazañas, pero su tono era extremadamente directo y casi carente de emoción.

Eren: "Derrotamos al Dullahan purificándolo con el poder de Aqua, liberando su alma de no muerto. A Vanir lo destruimos con la magia explosiva de Megumin. El Destructor lo desintegré desde dentro con mi poder de Titán Colosal. Al limo Hans también lo purificó Aqua, y a Silvia, la quimera, la partí en dos con mis garras usando el Titán Mandíbula."

El ambiente en la mesa se tensó, y tanto la princesa Iris como Claire y Lain se quedaron mirando a Eren con expresiones de asombro y, en el caso de la princesa, un poco de miedo.

Historia, al ver las caras de pánico en sus oyentes y notar que Eren no tenía mucho tacto para contar historias, lo interrumpió con una leve sonrisa y le dio un codazo amistoso.

Historia: "¡Tarado! Los estás asustando." — Luego miró a la princesa y a los demás, sonriendo con amabilidad — "Permítanme contarles las aventuras de nuestro grupo de una manera… menos aterradora."

Claire observó a Historia con interés, notando sus rasgos nobles — el cabello rubio y los ojos azules — y preguntándose si era de la nobleza, aunque no mencionó nada al respecto.

Historia comenzó a narrar, suavizando las partes más intensas de sus batallas. Contó cómo juntos habían derrotado a tres generales del Rey Demonio y al Destructor del reino, resaltando la valentía y el trabajo en equipo de cada uno de sus compañeros. A medida que hablaba, Iris escuchaba con atención, su admiración por el grupo creciendo con cada palabra.

Sin embargo, fue una anécdota en particular la que terminó de captar la atención de la princesa.

Historia: "Hubo una vez en la que Silvia, una de los generales del Rey Demonio, me obligó a fusionarme con ella para controlar el poder del Titán Mandíbula que había robado de Eren. En ese momento temí lo peor, ya que no tenía control sobre mi propio cuerpo y todo parecía perdido… pero, a pesar de todo, logramos vencerla. Aunque, debo confesar… técnicamente morí en esa batalla." — Hizo una pausa dramática y luego sonrió — "Afortunadamente, Aqua estaba allí para revivirme."

La princesa Iris la miró con los ojos muy abiertos, completamente cautivada por la historia. No todos los días se escuchaba de alguien que había regresado de la muerte gracias a una diosa un tanto excéntrica.

Princesa Iris: "¡Increíble! Su valentía y espíritu de equipo son inspiradores. Debe haber sido un momento aterrador… pero gracias a todos ustedes, el reino sigue protegido."

Claire: "Por cierto, me causa curiosidad saber… antes de convertirse en aventureros, ¿a qué se dedicaban cada uno de ustedes?"

La pregunta resonó en la mesa, y por un momento el grupo se quedó en silencio. Eren, siempre con su semblante serio, cerró los ojos, como si estuviera recordando algo doloroso. Las imágenes de su pasado y el caos del Retumbar cruzaron por su mente; el rugido de los titanes, los gritos de terror, y la desolación. Al final, habló en un tono bajo y firme, sin dar muchos detalles.

Eren: "Era… militar. En un reino muy, muy lejano."

Su respuesta escueta dejó un aura de intriga en la mesa. Claire notó el peso en las palabras de Eren, intuyendo que su pasado no era nada sencillo.

Historia, en cambio, esbozó una pequeña sonrisa nostálgica al recordar su vida pasada. Pensó en su tiempo en la granja, en su humilde origen y cómo, al final, había terminado en un puesto de poder como reina de Eldia. Sin embargo, decidió omitir esa parte.

Historia: "Yo… crecí en una granja. Eventualmente me uní al ejército del mismo país que Eren. Nos conocimos ahí."

La respuesta de Historia era parcialmente cierta, pero Claire captó un brillo en sus ojos que sugería algo más profundo. Sin embargo, no hizo preguntas al respecto, al menos no directamente.

Mientras el grupo continuaba compartiendo anécdotas, Claire empezó a observar la dinámica de cada miembro. Era evidente para ella que Eren era quien cargaba con la mayor parte de la responsabilidad en el grupo, usando su habilidad de Titán para proteger a todos. Darkness —o "Lalatina," como Claire prefería llamarla en voz baja para incomodarla— parecía ser la guardiana del grupo, interponiéndose para proteger a sus compañeros con su cuerpo resistente y su determinación inquebrantable. Megumin, aunque peculiar, contaba con una habilidad devastadora que podía acabar con cualquier amenaza al final de la misión. Y Aqua, a pesar de su comportamiento errático, era la encargada de sanar las heridas y restaurar a los caídos.

Sin embargo, cuando analizaba a Historia, Claire no veía un rol tan definido. Según el propio relato de Historia, parecía que ella no tenía un rol tan crucial en las batallas, lo cual le resultaba curioso. Claire se preguntó si Historia era simplemente la "aventurera bonita de clase ladrona" del grupo, alguien que acompañaba a los demás sin tener una función específica en las misiones. Quizás, al igual que Darkness, solo era una noble disfrazada en busca de nuevas experiencias, pensó Claire para sí misma.

En medio de la velada, Claire aprovechó para hacer otra pregunta, esta vez dirigida a Eren.

Claire: "He escuchado algunos rumores… Se dice que derrotaste a Porco Galliard. Es uno de los aventureros más reconocidos, y debo admitir, la princesa y yo pensamos que es bastante… apuesto."

La princesa Iris, algo avergonzada, asintió levemente, compartiendo la misma opinión.

Eren soltó un leve suspiro, sin darle demasiada importancia al comentario, y entonces sacó su tarjeta de aventurero con naturalidad. Al entregársela a Claire, notó que la mirada de la joven noble se posó curiosamente en ella, examinándola con interés.

En la tarjeta, se podían ver las habilidades de Eren. Las palabras "Titán" y "Control Parcial" estaban registradas en su lista de poderes.

Claire, al ver los detalles en la tarjeta, arqueó una ceja, visiblemente impresionada.

Claire: "Es poco frecuente que los aventureros tengan la habilidad de crear sobre sí mismos algo que algunos llaman 'golems de piel'. Aunque los propios aventureros con esta habilidad suelen referirse a ellos como 'titanes cambiantes'. Sé que Porco es uno de ellos… pero él solo tiene un tipo de titán. Tú, en cambio, tienes nueve. Es… un don impresionante."

Claire se detuvo un momento, visiblemente sorprendida, y luego formuló la pregunta que tenía en mente.

Claire: "¿Dónde obtuviste esa habilidad? No es algo que se vea todos los días."

Eren la miró, manteniendo su expresión seria y enigmática.

Eren: "Fue… un regalo." — Su tono fue enigmático, sin dar más detalles, claramente prefiriendo mantener cierto misterio en torno a su habilidad.

El ambiente se volvió ligeramente incómodo, y en ese momento, Aqua, que había estado observando la conversación, decidió interrumpir de manera dramática, fingiendo estar borracha.

Aqua: "¡Jaja! ¿Quién necesita historias misteriosas cuando tienes a esta grandiosa diosa aquí para animar la noche?" — Declaró, alzando una jarra de agua como si fuese cerveza — "¡A brindar por el grupo más poderoso que ha visto este reino! ¡La Diosa Aqua los cuida a todos!"

El intento de Aqua de cambiar el tema y su aparente embriaguez hizo que varios en la mesa soltaran una risa nerviosa, incluyendo a la princesa Iris, quien no pudo evitar reír ante la excentricidad de la diosa.

Historia, sonriendo con paciencia, susurró a Eren:

Historia: "A veces pienso que Aqua hace esto a propósito para aligerar el ambiente."

Eren suspiró, apenas esbozando una sonrisa. Eren: "Por lo menos sabe cómo llamar la atención, eso es seguro."

La conversación continuó animada y cargada de anécdotas mientras todos disfrutaban de los platos exquisitos que el castillo había preparado para los héroes. La princesa Iris y su guardia personal, Claire y Lain, parecían fascinadas por cada detalle de las aventuras de Eren y su equipo. Claire, sin embargo, no había terminado con sus preguntas.

Claire: "Eren, tengo que insistir… ¿cómo fue exactamente que lograste vencer a Porco? Todos dicen que es un luchador increíblemente rápido y letal."

La atención de todos se centró en Eren, quien, después de una pausa, alzó la vista y habló con serenidad.

Eren: "En un combate entre un titán de siete metros, como el Mandíbula de Porco, y un titán de diecisiete metros como el mío…" —hizo una breve pausa, pensando en las palabras adecuadas— "gana el que actúa más rápido."

Eren se acomodó en su asiento, recordando con claridad aquel enfrentamiento en otro mundo, en otro tiempo. Su voz era firme, como si no tuviera dudas de sus decisiones.

Eren: "En cuanto vi su ataque, no dudé. Tomé a Porco por su mandíbula y lo lancé lejos antes de que pudiera hacer nada. La diferencia de tamaño y fuerza fue suficiente para desorientarlo. No siempre es cuestión de velocidad; a veces, la rapidez en la toma de decisiones es lo que decide el combate."

La mesa quedó en silencio un instante. La princesa Iris y sus compañeras se miraron, visiblemente impresionadas. Incluso Aqua, quien generalmente no mostraba mucho interés en las historias de Eren, parecía intrigada.

Claire, asombrada: "Eres… más estratégico de lo que imaginé."

Eren solo asintió, sin darle demasiada importancia. Para él, no había sido una hazaña digna de orgullo, sino una necesidad en aquel momento. Pero no sentía la necesidad de justificar sus acciones más de lo que ya había dicho.

Aqua, incapaz de resistir más la seriedad del ambiente, levantó su jarra nuevamente y habló en voz alta.

Aqua: "¡Jaja! ¿Acaso alguien puede siquiera comparar a un simple guerrero con la grandeza de un titán? ¡Y además tenemos a una diosa! ¿Qué más se puede pedir?"

La risa de Aqua fue recibida con una mezcla de sonrisas y miradas de resignación. Darkness, por su parte, miraba a Eren con admiración renovada. Siempre había sentido respeto por la fuerza de su líder, pero escuchar aquella historia en un ambiente tranquilo le hizo entender un poco mejor la frialdad calculadora de Eren en combate.

Iris, sonriendo con amabilidad: "Definitivamente, ustedes son un grupo único. Es un honor tenerlos como aliados."

La cena continuó, llena de historias y risas, y una calidez especial parecía envolver a los aventureros y a las damas de la corte. La princesa Iris, sintiéndose cada vez más cómoda, no dejaba de dirigir miradas curiosas a Historia, quien era la más tranquila del grupo, compartiendo anécdotas de su vida en la granja y sus primeras experiencias como ladrona.

Cuando la cena finalmente terminó, la princesa Iris se levantó y agradeció a todos.

Iris: "Quiero agradecerles una vez más por su valor y por su amistad. Este reino está en deuda con cada uno de ustedes, y siempre serán bienvenidos en el castillo. Espero que esta no sea la última vez que nos reunamos."

Los héroes se despidieron con una inclinación de cabeza, cada uno mostrando su gratitud a su manera. Después de la despedida formal, los aventureros salieron del salón y comenzaron a caminar por los jardines del castillo, disfrutando de la fresca brisa nocturna. Mientras tanto, Iris, Claire y Lain se preparaban para regresar a la capital a través de un hechizo de teletransportación. Sin embargo, antes de partir, Iris se giró hacia Historia, quien aún estaba hablando con Aqua y Darkness.

Iris (tomando la mano de Historia): "Pero tú… tú vienes conmigo."

Historia: "¿Qué? Pero yo…"

Antes de que pudiera protestar, Historia, Iris, Claire y Lain fueron envueltas en un destello de luz y desaparecieron, transportadas directamente al castillo de la capital.

Mientras tanto, en Axel, los aventureros que habían asistido a la cena comenzaron a retirarse, despidiéndose unos de otros. Eren, Aqua, Darkness y Megumin se quedaron de pie, mirando el lugar donde había estado Historia unos segundos antes.

Aqua, parpadeando lentamente: "¿La princesa… se acaba de secuestrar a Historia?"

Megumin: "Supongo que le gustó su labia. Creo que encontró las historias de Historia demasiado entretenidas."

Darkness, suspirando con una leve sonrisa: "La vida en el castillo debe ser bastante monótona. Tal vez solo quería algo de compañía."

Eren, frunciendo el ceño: "No me gusta que la haya tomado

Aqua: "¿Qué vamos a hacer sin ella ahora? ¡Alguien tiene que encargarse de la parte aburrida del trabajo en equipo!"

Eren suspiró, dándose cuenta de que, sin importar la seriedad del asunto, siempre terminaban en alguna situación caótica o inesperada.

Eren: "Solo nos queda esperar a que regrese… Ella ya vivido en castillos liujosos antes "

Pasaron unos segundos en silencio, hasta que finalmente todos regresaron a la mansion

Eren estaba visiblemente molesto, pero trataba de mantener la calma, sabiendo que Historia sabría arreglárselas en la capital. Sin embargo, no podía evitar sentir cierta incomodidad. Decidió que, al día siguiente, sería mejor informar al resto de su grupo sobre lo ocurrido.

A la mañana siguiente, Eren reunió a Mikasa, Armin, Sasha e Ymir en la taberna, quien no había sido informada aún de lo ocurrido. Todos estaban sentados alrededor de una mesa, con expresiones de preocupación.

Eren: "Escuchen, tengo algo importante que decirles. Historia… fue secuestrada."

Mikasa: "¿Qué? ¿Cómo pasó eso? ¿Quién se atrevería a secuestrar a Historia?"

Eren: "Fue la princesa Iris. Anoche, durante el banquete, se teletransportó con Historia directamente al castillo de la capital."

Ymir (poniéndose de pie de golpe, con los ojos encendidos de furia): "¡¿Qué?! ¡¿Y me estás diciendo que no hiciste nada?! ¡Tenemos que ir a rescatarla ahora mismo!"

Armin (tratando de calmarla): "Ymir, cálmate un poco. Escuchemos todo antes de hacer algo precipitado."

Eren (cruzándose de brazos, con una leve sonrisa): "Conociendo a Historia, dudo que necesite que la rescates. Probablemente ya se adaptó a la vida en el castillo sin problema alguno."

Sasha (mordisqueando un trozo de pan): "¿En serio? Pero, ¿no debería estar asustada o al menos preocupada?"

Eren (encogiéndose de hombros): "Estamos hablando de Historia. Ha sido reina antes, ha lidiado con situaciones mucho más complejas. Si alguien puede manejarse en un castillo lleno de nobles, es ella."

Ymir (todavía inquieta, apretando los puños): "Eso no significa que deba estar ahí sola… ¡No me importa, voy a ir por ella!"

Mikasa: "No es tan simple, Ymir. No podemos irrumpir en el castillo de la capital. Necesitaríamos una invitación de un noble o algo por el estilo para entrar."

Eren miró a Ymir, tratando de no mostrar su propia preocupación. Aunque intentaba parecer tranquilo, no podía evitar sentirse intranquilo al pensar en lo que Historia podría estar experimentando en la capital. Pero, tal como había dicho, confiaba en que ella encontraría la manera de sobrellevarlo.

POV HISTORIA EN EL CASTILLO

En el imponente castillo de la capital de Beelzerg

Historia apenas pudo procesar lo que había sucedido. Un instante estaba en los jardines del castillo de Axel, y al siguiente, estaba de pie frente a un majestuoso edificio de piedra blanca, con torres altas que parecían tocar el cielo. Los destellos de la luna iluminaban las banderas ondeantes del reino de Beelzerg.

Historia: (confundida, mirando a su alrededor) ¿Qué... qué acaba de pasar?

Iris: (sonriendo con inocencia) Bienvenida a mi hogar.

A su lado, Claire y Lain parecían al borde del pánico.

Claire: (susurrando frenéticamente a Lain) ¡Esto es un secuestro técnico! ¡La princesa acaba de teletransportar a una plebeya sin su consentimiento!

Lain: (susurrando de vuelta) ¿Y qué se supone que hagamos? ¡Es la princesa! ¡No podemos simplemente devolverla ahora!

Historia observó a ambas mujeres con una mezcla de incredulidad y diversión.

Historia: (riendo suavemente) Tranquilas, chicas. No voy a acusarlas de secuestro... aunque técnicamente, eso es lo que es.

Claire: (visiblemente aliviada, pero aún seria) Aún así, debemos formalizar esto. Voy a tramitar tu estatus como invitada oficial. No queremos problemas diplomáticos.

Historia: (arqueando una ceja) ¿Problemas diplomáticos?

Iris: (tomando la mano de Historia) No te preocupes por nada. Mientras estés aquí, eres mi invitada especial.

Una nueva rutina en el castillo

Tras los trámites de Claire, Historia fue conducida a una elegante habitación decorada con tonos cálidos y detalles en oro y rojo. Claire, siempre profesional, le explicó las reglas.

Claire: (señalando los amplios ventanales) No eres una prisionera aquí. Puedes moverte libremente por el castillo, pedir lo que necesites a los sirvientes e incluso escribir cartas a tus amigos.

Historia: (sonriendo) ¿Incluso pedir postres?

Claire: (suspirando) ...Incluso postres.

Los días pasaron con sorprendente fluidez. Historia pronto encontró una inesperada conexión con la princesa Iris, una niña de apenas 12 años, pero con una curiosidad insaciable y un espíritu brillante. La princesa pasaba horas escuchando las historias de Historia, riendo y fascinada por sus aventuras.

En más de una ocasión, Historia sintió una punzada de nostalgia. La mirada emocionada de Iris le recordaba a alguien... su hija, la que dejó atrás en su vida anterior.

Una propuesta inesperada

Un día, mientras estaban en una lujosa sala del castillo, Iris dejó escapar una idea que tomó por sorpresa a todos.

Iris: (con una sonrisa traviesa) He decidido darte un empleo aquí en el castillo, Historia.

Historia: (parpadeando) ¿Un empleo?

Claire: (con expresión de alarma) ¡Princesa! Eso no está en el protocolo—

Iris: (interrumpiendo) ¡Será un empleo pagado! Historia contará sus historias como entretenimiento oficial del castillo.

Historia: (riendo, inclinándose en una ligera reverencia) Bueno, supongo que no puedo rechazar una oferta real.

Claire: (susurrando a Lain) Esto se está saliendo de control.

Lain: (encogiéndose de hombros) ...Pero parece feliz.

Conexión inesperada

Un día, Historia e Iris estaban sentadas en la sala, rodeadas de muebles elegantes y tapices antiguos. Iris sostenía una taza de té mientras escuchaba con atención a Historia narrar otra de sus anécdotas.

Iris: (suspirando) Ojalá pudiera salir de aquí y vivir aventuras como tú.

Historia: (mirándola con ternura) La vida de aventuras no es tan glamorosa como parece. Pero entiendo lo que sientes.

Iris: (mirándola fijamente) Eres diferente a todos los que conozco. No como Claire o Lain... Tú me escuchas, y...

Historia: (con una sonrisa suave) Y te trato como una persona, no como una princesa.

Iris asintió lentamente, con una leve sonrisa. Historia la observó, sintiendo un extraño calor en su pecho. Había algo especial en la niña, algo que despertaba su lado maternal.

En el castillo de la capital, Historia había encontrado un inesperado lugar. Aunque extrañaba a sus amigos, en la sonrisa de Iris veía algo que le daba sentido a sus días.

Iris (sonriendo con interés): "Es increíble lo bien que te adaptaste, Historia. Es como si siempre hubieras pertenecido a un lugar como este."

Historia (sonriendo con modestia): "Bueno, digamos que tengo algo de experiencia en palacios y castillos. Aunque, claro, prefiero no hablar mucho de mi vida anterior."

Iris (curiosa): "Debes haber vivido cosas interesantes. ¿Tienes alguna historia que puedas compartir?"

Historia (pensando un momento, divertida): "Bueno, hay una que siempre me hace reír. Eren, uno de mis amigos, una vez contrató a una súcubo para soñar con su madre. Era algo inocente… o eso creía él. Pero resulta que las súcubos suelen conceder deseos de otro tipo, ya sabes, deseos… menos apropiados."

La princesa Iris rió suavemente, cubriéndose la boca con elegancia.

Iris: "¿En serio? Entonces, ¿él no sabía lo que estaba pidiendo?"

Historia (negando con la cabeza, riendo también): "No, para nada. Eren estaba tan confundido y avergonzado cuando se enteró. Es una de esas anécdotas que nunca voy a olvidar."

La conversación continuó, y a medida que pasaba el tiempo, Historia se fue sintiendo más en confianza con Iris. Al final, terminó compartiendo algunos de los conocimientos que había adquirido en su vida anterior como reina, hablando de tácticas de liderazgo y algunas ideas para mejorar el reino.

Historia: "He notado que los magos Carmesí tienen una escuela en su aldea. Sería beneficioso que este reino pudiera ofrecer algo similar. Una academia podría ayudar a preparar a futuros aventureros y apoyar la defensa contra el ejército del Rey Demonio."

Iris (suspirando): "Es una idea maravillosa, pero estamos en tiempos de guerra. La mayoría de nuestros recursos están destinados a la lucha contra el Rey Demonio. Crear planes sociales ahora sería… difícil, por decir lo menos."

Historia asintió, entendiendo las limitaciones, pero no pudo evitar sentir una leve frustración. Sin embargo, se limitó a sonreír y dejar el tema, aceptando la situación del reino.

Cada noche, Historia se daba cuenta de que las fuerzas del Rey Demonio intentaban asediar el castillo, pero sus ataques eran repelidos con éxito por diferentes aventureros, muchos de ellos reconocibles como marleyanos reencarnados. Historia los veía cobrar sus recompensas después de cada misión, lo cual solo reafirmaba su convicción de que había algo extraño en la cantidad de reencarnados en este mundo.

Una noche, mientras Historia y Iris conversaban, la princesa finalmente reveló el motivo de su "secuestro".

Iris (mirando al suelo, con una expresión melancólica): "Historia, hay algo que debes saber. Tengo un hermano con quien solía hablar mucho. Él… está en otro país ahora, y desde entonces he sentido un vacío en el corazón. Es difícil para mí abrirme con alguien más. Me siento Sola y aburrida"

Historia: "¿Eso fue lo que te llevó a secuestrarme? ."

Iris (asintiendo): "Sí,. Sé que fue egoísta, pero… necesitaba alguien con quien hablar de verdad. Además, yo no puedo salir del palacio sin un escolta de guardias reales."

Historia suspiró, pero le dedicó una sonrisa amable a la princesa. Podía comprender la soledad de Iris; después de todo, ella misma había sentido algo similar en su vida anterior.

Una conversación bajo las estrellas

Historia e Iris estaban sentadas en un banco de piedra en el amplio jardín del castillo, con la luz de la luna bañando las flores que las rodeaban. El aire era fresco, y la conversación, aunque ligera al principio, había tomado un tono más profundo tras la confesión de Iris sobre su soledad.

Iris: (mirándola con ojos brillantes) Siempre te muestras fuerte, Historia. Como si nada pudiera afectarte. Pero… ¿alguna vez te has sentido sola?

Historia bajó la mirada por un momento, jugando con los pliegues de su vestido. Luego suspiró, como si decidiera que ya no tenía sentido guardar secretos.

Historia: (con una sonrisa melancólica) Sí, Iris. Más veces de las que puedo contar. Supongo que… ya es hora de que comparta algo contigo también.

Iris se acomodó en el banco, escuchando con atención.

Historia: (mirando al cielo) Nací como hija ilegítima de un noble y su ama de llaves. Mi madre… nunca me quiso realmente. Siempre me hacía sentir como si yo no hubiera debido existir.

Iris: (sorprendida) ¿De verdad? Pero… eso suena tan injusto.

Historia: (encogiéndose de hombros) Supongo que sí, pero así fue. Pasé la mayor parte de mi infancia intentando ser invisible. Cuando crecí, me uní al ejército de mi país. Fue allí donde conocí a dos personas muy especiales.

Iris inclinó la cabeza con curiosidad, percibiendo un cambio en la voz de Historia.

Iris: ¿Te refieres a… amigos?

Historia: (con una sonrisa triste) Más que amigos. Fueron personas a las que amé profundamente, pero nunca pude estar con ninguno de ellos. Las circunstancias siempre se interpusieron.

Iris: (conmovida) Eso suena tan… triste.

Historia asintió, con un brillo en los ojos que parecía contener mil emociones.

Historia: Mi herencia real terminó por alcanzarme. Me vi obligada a asumir responsabilidades que nunca pedí, por un pueblo que esperaba que los guiara. Me casé con un granjero, alguien que fue mi vecino cuando era niña.

Iris: (sonriendo un poco) ¿Y fue un buen matrimonio?

Historia: (pensativa) No fue malo. Él era amable, un hombre sencillo que nunca me pidió más de lo que podía dar. Tuvimos una hija, una niña hermosa.

Iris notó el cambio en el tono de Historia al mencionar a su hija, como si una herida antigua se abriera nuevamente.

Iris: (con cuidado) ¿Y ella? ¿Dónde está ahora?

Historia: (con una sonrisa melancólica) No la vi crecer. La dejé cuando era muy pequeña. Pero sé que está bien.

Iris: (mirándola con ojos húmedos) ¿Por qué no vuelves con ella? Si la amas tanto, ¿por qué no estás con ella ahora?

Historia guardó silencio por un momento, mirando las estrellas como si buscara la respuesta allí.

Historia: (con voz suave) No puedo, Iris. Pero sé que ella estará bien. Tiene un buen padre y un buen lugar donde crecer.

Iris se quedó en silencio, absorbiendo las palabras de Historia. Por primera vez, vio a la mujer fuerte y serena con una vulnerabilidad que la hizo sentir más conectada con ella.

Iris: (tomando la mano de Historia) ¿Es por eso que aceptaste quedarte conmigo?

Historia asintió lentamente, apretando suavemente la mano de la niña.

Historia: Sí. Estar contigo, Iris… de alguna manera, siento que estoy recuperando el tiempo perdido con mi hija.

La princesa no pudo contener las lágrimas, pero no las ocultó. Historia, sorprendida por la reacción, la abrazó con ternura, como una madre que consuela a su hija.

Iris: (entre lágrimas) Nunca he tenido a alguien como tú. Claire y Lain siempre están ahí, pero contigo… es diferente.

Historia: (acariciándole el cabello) Yo también lo siento, Iris. Tal vez el destino nos puso juntas por una razón.

El jardín quedó en silencio, salvo por el suave murmullo de la brisa. En ese instante, Historia supo que había algo especial en esa conexión, una especie de redención emocional que nunca esperó encontrar en su nueva vida.

De vuelta en Axel, Ymir estaba cada vez más impaciente, a pesar de las cartas de Historia en las que aseguraba que estaba bien. No obstante, su determinación no hacía más que crecer.

Ymir (cruzada de brazos, frustrada): "No me importa cuántas cartas envíe diciendo que está bien. ¡Quiero ir por ella ahora mismo!"

Eren (tratando de ser razonable): "Ymir, ya te lo dije. No podemos simplemente irrumpir en el castillo. Necesitamos una invitación de un noble para poder entrar sin causar problemas."

En ese momento, Darkness llegó a la taberna con una expresión triunfante.

Darkness (sonriendo): "Tengo buenas noticias. La princesa Iris va a hacer otro banquete en la capital y… nos ha extendido una invitación."

Eren (levantando una ceja): "¿Cómo lo lograste?"

Darkness (con una sonrisa misteriosa): "Digamos que tengo mis conexiones."

La escena concluyó con todos mirándose con entusiasmo y determinación. Era su oportunidad para ir a la capital y, de una forma u otra, traer a Historia de vuelta a Axel.

Escena en el Castillo de la Princesa Iris

El grupo de Eren llegó al majestuoso castillo de la princesa Iris, donde la servidumbre los recibió con sonrisas, pero sus miradas no eran del todo amigables, especialmente hacia Historia.

Sirvienta 1 (en susurros): "¿No te parece sospechoso? Esa chica debe ser una espía de otro reino, tratando de meterle ideas a la princesa."

Sirvienta 2 (asintiendo): "Sí, debemos hacer algo. No podemos dejar que se quede aquí."

Mientras discutían, decidieron colaborar para que el grupo de Eren pudiera llevarse a Historia. Una de las sirvientas se acercó con una sonrisa forzada.

Sirvienta 1: "Oh, qué bien que han llegado. La princesa los espera en el jardín. Si desean, puedo indicarles cuál es la habitación de la joven Historia."

Eren agradeció con un gesto de cabeza, sintiéndose algo incómodo. El grupo se dirigió hacia la recámara de Historia, donde la sirvienta les indicó la puerta.

Historia (abriendo la puerta con entusiasmo): "¡Eren!"

Al ver a sus amigos, su rostro se iluminó, y pronto se encontró rodeada por Eren, Megumin, Darkness y Aqua.

Eren (con una sonrisa): "Ymir te extraña. Todos la extrañamos."

Megumin (saliendo del armario del shippeo): "¡Ah! ¡Eso significa que Eren también te extrañaba, por eso vino personalmente!"

Eren se sonrojó un poco, mientras Darkness interrumpía con su propia observación.

Darkness: "No fue fácil lograr que nos dejaran entrar legalmente. Tuvimos que hacer un trato."

Aqua (mirando el castillo con envidia): "Miren qué castillo tan impresionante. He vencido a generales también, debería estar viviendo aquí."

Darkness (bajando la voz, mirando a su alrededor): "¡Baja la voz! Estamos en el castillo real, por el amor de…"

En ese momento, la princesa Iris apareció detrás de ellos, sonrojada y con una expresión de culpa.

Iris: "Lo siento mucho, Historia. Me arrepiento de haberte… bueno, secuestrado. Pero… fue divertido hablar contigo."

Historia la miró, sorprendida, pero con una sonrisa comprensiva.

Historia: "No hay problema, Iris. Me alegra que hayamos podido hablar."

Iris (con un leve suspiro): "Pero tengo que liberarte. Sin embargo, como última cosa, me gustaría invitarte a un banquete esta noche como despedida."

Todos aceptaron, felices por la oportunidad de despedirse de Historia de una manera festiva.