Capítulo 6.
Temprano en la mañana.
El Código 015, mejor conocida como Ichigo, ya estaba bastante activa, pese a que apenas eran las 5 de la mañana. Tampoco es que pudiera dormir mucho. Se quitó el cabello que le tapaba la cara, sin la decoración que mantenía todo su cabello en su lugar; ahora solo le estorbaba. Tan concentrada estaba que no vio la figura que estaba subiendo por las escaleras que ella bajaba, chocando de frente y sorprendiéndola. Al principio, creyó que era Hiro, apunto de hacer el trato frío a su compañero. Se detuvo al notar las facciones más maduras y el cabello más largo.
"¿Hiroshi?" preguntó la chica, parpadeando como un búho, mirando de mejor manera al chico, gran parte de sus rasgos ocultos por la oscuridad de la mañana.
"Capitana", respondió el chico con un asentimiento.
"¿Qué haces por aquí tan temprano?" preguntó Ichigo con el ceño fruncido.
"Acabamos de regresar. Me dirijo a los cuartos. ¿Y tú?" fue la respuesta del peli negro, el cual pareció acomodar algo que estaba cargando a sus espaldas, llamando la atención de la peli azul que vio la mata de cabello rosa con un par de cuernos, que respiraba de forma lenta y calmada.
Mirando de manera más concentrada, notó que era el Código 02, la cual estaba profundamente dormida en la espalda de Hiroshi, el cual la cargaba con relativa facilidad.
"Hmmm, ¿regresar? ¡Oh! es cierto, ustedes fueron a investigar de dónde salió el Klaxosaurio", dijo Ichigo con una mirada de reconocimiento.
"Así es. Cuando el equipo se reúna, informaré lo hallado", dijo Hiroshi, dando una señal para continuar subiendo. Ichigo viendo esto, rápidamente se apartó, quitándose el cabello de la cara otra vez, para la frustración de la chica.
Notando esto, Hiroshi se quitó lo que parecía un resorte para el cabello, que mantenía el largo cabello del chico atado en una cola de caballo. Mirando el resorte para cabello que le ofrecieron de manera confundida, Ichigo miró al peli negro, que cargaba con una mano a la dormida Zero Tsu, y la otra tenía el aditamento para el cabello.
lo iba rechazar, ella en estos momentos Pensó muchas cosas, pero las palabras del chico la hicieron calmar sus pensamientos turbulentos.
"No puedo permitir que la capitana se esté chocando por todos lados, o peor aún, no de su 100 % solo porque su cabello está en el camino", dijo Hiroshi con calma, aún sin bajar la mano con el resorte.
Ichigo dejó salir un suspiro. Tenía razón. No era momento de que estuviera distraída con sus problemas personales. Aceptando el resorte, ella se ató su cabello en una coleta alta, no muy diferente a su compañera Ikuno.
"Gracias", murmuró la peli azul, mirando al chico el cual asintió con una sonrisa y continuó con su camino, no antes de despedirse.
"Nos vemos más tarde. Iré a descansar unas horas. Espero verte en un mejor estado", dijo el chico desapareciendo en el pasillo del segundo piso.
Ichigo se quedó así por unos segundos, viendo cómo rato después el chico salió de los cuartos de las chicas, para luego dirigirse al cuarto de los chicos. No mucho después, una soñolienta Zero Tsu salió siguiendo el camino de su compañero, para luego entrar al cuarto de Hiroshi. Después de algunos murmullos, el silencio reinó en el lugar.
Ichigo vio esta interacción y no pudo evitar ponerse celosa. Cuánto deseaba que Hiro y ella fueran así, pero nada es como lo deseas. Negando con su cabeza, se fue a prepararse. Hoy sería un día ocupado.
Después de todo lo acontecido en el día anterior, la ceremonia de arranque se reanudó, pero esta vez los adultos no estuvieron presentes. Los Franxx funcionaron sin ningún problema y pronto se haría un pedido para traer un nuevo Franxx personalizado para Hiro y Naomi.
"Bien, bien, ningún problema. Solo falta que adquieran experiencia y pronto podrán llenar el hueco que dejaron sus antecesores", dijo Werner mientras se sobaba su mentón.
"¿Qué ha dicho padre sobre la petición del nuevo Franxx?", dijo un hombre alto, de cabello casi rapado, que parecía un capitán del ejército en todo aspecto y regla. Este era Hachi, comandante de las fuerzas de protección urbana de APE y actualmente supervisor del entrenamiento del escuadrón trece.
"Estará pronto por llegar. He trabajado en ella por mucho tiempo. La Ascensión", dijo el doctor con calma, pero Hachi no la compartió, ya que ese Franxx no se creó para combatir Klaxosaurios, sino otros Franxx.
"Se supone que esa cosa era la nueva generación de Franxx. Debería estar en manos de pilotos experimentados, no en manos de novatos", pensó Hachi mirando de reojo a los futuros pilotos de ese Franxx, metidos en uno de clase industrial para participar en la ceremonia.
Delphinium miró a sus compañeros Franxx moverse en la zona, haciendo movimientos para detectar cualquier problema. Sus ópticos se movieron al suelo, donde vio a los pocos adultos de la Plantación Trece, en específico al dúo de jóvenes que miraba todo con aburrimiento, por parte de la chica, y anticipación por parte del chico.
Ella se llenó de determinación; sería una buena capitana y un buen ejemplo a seguir.
"El Delphinium tiene niveles de conexión sobresalientes. Quizás esa pareja sea la indicada para pilotear la Ascensión, en vez de Hiro y Naomi", comentó Nana mirando una tableta.
"Tal vez. Veremos cómo van las cosas", dijo Werner con calma.
Hachi recibió un mensaje que lo hizo fruncir el ceño.
"Doctor, quizás quieras escuchar esto. Hay nuevas órdenes. Van a enviar una pareja veterana a ser monitores de los pilotos especiales, órdenes directas de papá. Esta información se debe ocultar de los pilotos, ya que estarán observando desde la Plantación 15, que es la más cercana a esta, y se quedarán con la Ascensión por ahora", dijo Hachi con algo de irritación por el repentino cambio de órdenes.
Werner frunció el ceño. Eso era fastidioso. Se suponía que debían crear un escuadrón especial, pero le cortaban el presupuesto y una de las mejores armas se quedaría en la retaguardia.
"¿Quizás ese infeliz ya esté sospechando?", pensó el hombre-máquina.
"Oye, darling, ¿qué piensas de todo esto?", preguntó Zero Tsu mirando lo que ella pensó era un espectáculo y nada de ceremonias importantes.
"No creo que deba dejarlos morir como el anterior escuadrón trece. Sé que odiamos a los humanos, pero estos chicos son diferentes. Siento que lo serán", dijo Hiroshi con seriedad.
"Ya veo. ¿Cuándo les darás eso entonces? No te desvelaste todas esas noches para luego guardar esos viales en una nevera", dijo Zero Tsu con una ceja alzada.
"Aún no es el momento. Cuando vea que sus lealtades no estén con APE. Por ahora, están muy ansiosos por impresionar a los ancianos", dijo el chico mirando todo con los brazos cruzados.
"Entonces a esperar. Qué pereza. apenas dormí 4 horas. No me culpes", se quejó Zero Tsu, mientras se estiraba y bostezaba de sueño. ante la diversión de Hiroshi.
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Más tarde.
Hiro pensaba en muchas cosas: desde el momento en que el otro chico similar a él lo ayudó a pilotear, hasta el ataque del Klaxosaurio y cómo iban las cosas con Naomi. Pero no se preocupaba; ahora podía volar y no era un niño indefenso. Él vino a enterrar a la pequeña ave que, pese a sus esfuerzos, no sobrevivió, algo que lo puso un poco triste. Era muy poca la vida animal en el mundo, y cada vez que moría uno, era una posibilidad menos de que existieran en el futuro.
"Miau, miau, ¿de dónde saliste, pequeño?", dijo una voz femenina, llamando la atención de Hiro, que vio con algo de sorpresa a Ichigo jugando con un gato negro. Notó desde el principio el cambio de su peinado, ahora llevando una coleta, pero no vio por ningún lado el broche que le regaló de niña.
Cuando iba a saludar y preguntar sobre el broche, vio con curiosidad que ella no era la única afuera.
"22, 23, 24, 25", gritó Zorome sudando a mares, mientras hacía lagartijas, ahora estando sin su camisa, y no era el único. Goro, Futoshi y Mitsuru estaban haciendo lo mismo, mientras las chicas estaban afuera observando todo, Nana también estaba, con una mirada pensativa.
"¡7!", gritó Futoshi sudando a mares, mientras sus brazos temblaban por subir la número 8.
"Yo haré más, te alcanzaré, maldito bastardo", gritó competitivamente Zorome, mientras miraba algo en particular.
Goro y Mitsuru eran los más silenciosos, pero el ejercicio ya los estaba golpeando.
Pero Hiro notó algo más sorprendente.
"200, 201, 202, 203, 204", contó con respiración uniforme Hiroshi, vistiendo solo unos pantalones deportivos, revelando un cuerpo musculoso, el cual tenía leves gotas de sudor. Algo peculiar era que la chica peli rosa estaba sentada en la espalda del chico animando a que este hiciera más. Hiroshi, ya no siendo un humano, su resistencia estaba a un nivel muy elevado.
Negando con su cabeza, Hiro iba a saludar a Ichigo, que era la que más cerca estaba de él, pero esta ni le prestó atención. Sin embargo, alguien más lo saludó.
"Hora Hiro, ¿dónde estabas?", preguntó y saludó Naomi saltando sobre el chico, que por poco pierde el equilibrio.
"Código 016, es bueno verte aquí, pero no debes irte sin informar", regañó Nana mirando a Hiro, el cual se rió nerviosamente ante la mirada penetrante de la mujer.
"Como puedes ver, Hiroshi me sugirió que los pilotos debían estar en forma para mejorar su rendimiento, algo que veo lógico. Por eso, y debido a tu ausencia, deberás hacer el mismo número que termine haciendo Hiroshi en los 15 minutos restantes. Eso también aplica a todos los demás, ¿entendido?", dijo Nana recibiendo gemidos quejumbrosos de los chicos, excepto de Hiroshi, mientras Hiro se encogía en su lugar al recibir las miradas de odio de sus compañeros masculinos. Naomi intentó consolarlo torpemente.
"Una pregunta, ¿es normal que el cuerpo de un chico de nuestra edad se vea así?", preguntó Miku mirando a Hiroshi.
"Ummm, no lo sé. Los chicos de nuestro escuadrón no se ven así, pero se ve muy en forma", agregó Ikuno.
"No lo sé, chicas. Me hace sentir rara", murmuró Kokoro sintiendo sus mejillas rojas.
"Oye, ¿qué te pasa? ¿Estás enferma?", preguntó Miku mirando el estado de su compañera.
"No es nada de eso, solo no lo sé", intentó defenderse Kokoro, la cual se encogió ante la mirada de la chica de coletas.
"No la molestes, Miku, y prepárate. Después de los chicos, nos toca hacer la misma rutina de ejercicio", dijo Ichigo llegando donde las chicas.
"Qué malvada", se quejó Miku, mientras se desplomaba en el suelo, cansada ante la mera idea de hacer todo eso.
"Lindo peinado. ¿Cuándo decidiste usar una coleta?", preguntó Ikuno mirando a la peli azul, mientras se acomodaba sus lentes.
"A partir de hoy, me ayudará a que mi cabello no se interponga en el camino de mis ojos", dijo la chica con calma.
"Y el accesorio que mantenía todo en un solo lugar", preguntó Kokoro curiosa.
"Se me perdió", dijo Ichigo fríamente, no dando espacio a más preguntas, dejando a las demás chicas en silencio.
Ubicación: Jaula de pájaros, mansión hogar de los pilotos, comedor.
"Ah, estoy tan cansado y hambriento", se quejó Futoshi mientras estaba sentado en la mesa junto a los chicos.
"Ni que me lo digas", dijo Zorome, bebiendo mucha agua.
"Debemos estar listos, esto será parte de la rutina a partir de ahora", dijo Goro mientras se secaba el cabello mojado.
Después de hacer el ejercicio, fueron a bañarse y luego a almorzar. Mitsuru solo se mantuvo silencioso.
"Hiro, demasiado cansado ni siquiera para pensar", mientras en el otro lado las chicas estaban en un estado similar al de los chicos.
"Esto se hará una pesadilla muy pronto", murmuró Miku, con la cara plana contra la mesa.
"No te preocupes, pronto nos acostumbraremos", intentó animar Kokoro débilmente.
"Ikuno solo pudo asentir, luciendo sin aliento.
"Bien, todos lo hicieron bien, pero no es hora de relajarse. Recuerden que aún hay que realizar los ejercicios de entrenamiento con los Franxx", dijo Ichigo mientras comía con bastante ganas.
"Hola chicos, ¿guardaron algo para mí?", preguntó Naomi llegando al comedor, siendo la última en ducharse y por eso llegó un poco más tarde.
"Otra vez de estas pasando con la miel", comentó Hiroshi mientras comía. Él estaba en una mesa aparte en compañía de Zero Tsu, quien había echado una enorme cantidad de miel sobre su filete de carne y luego lo devoró de un bocado, llamando la atención de todos los demás.
Miku puso una cara verde de náuseas al ver tanta miel.
"Vaya, es una chica peculiar. Se nota que le gustan los dulces", dijo nerviosamente Kokoro.
"Ella no es humana, ya viste los cuernos", susurró Miku a Kokoro.
"Basta ya. Ella y su compañero nos salvaron la vida", regañó Ichigo, pero no quitó su curiosidad, mientras Miku bufó molesta por ser regañada.
"Será cierto esos rumores, que dicen que ella tiene sangre de Klaxosaurio, además su código es de un dígito...", comenzó a decir Ikuno, pero también tocó el tema del chico que era demasiado similar a uno de sus compañeros.
Hiro y Naomi guardaron silencio, aunque tenían sus reservas con respecto a Zero Tsu, el tema de Hiroshi aún los tenía pensativos. No sabían por qué, pero el chico les daba esa vibra inhumana.
"No se ven tan desgastados como yo creía", dijo Futoshi mientras agarraba varios panes, mirando al dúo de chicos de aspecto mayor.
"Mira que tenemos aquí. Se ve que eres una nena muy fuerte", dijo Zorome arrogantemente, parándose al lado de la mesa del dúo de chicos de aspecto mayor.
"Puedo ser mejor que este chico. Mis habilidades no tienen comparación", dijo nuevamente el chico peli castaño mirando a Hiroshi, el cual se limpió la boca con una servilleta.
"Soldado", dijo Hiroshi de forma fría que congeló a todos en el lugar, los cuales se tensaron con un frío recorriendo sus espaldas.
"S-sí, señor", tartamudeó Zorome con la cara pálida.
"Regresa a tu mesa", dijo nuevamente el oji azul, sin voltearse a verlo.
"De inmediato", dijo el chico, el cual se fue corriendo a su silla.
Todos permanecieron en silencio incómodos ante la extraña presión que cayó sobre ellos.
"Mira, darling, está muy bueno", dijo Zero Tsu, rompiendo la tensión mientras ofrecía un pedazo de carne con miel a Hiroshi, el cual negó con la cabeza con una leve sonrisa y comió el pedazo de carne ofrecido, para la alegría de la chica, que decidió que su silla no era lo suficientemente buena y se sentó en las piernas de Hiroshi.
"¡Eeehhh!", exclamaron todos ante el repentino acto tan cercano, eran niños, ver esas cosas era extraño para ellos.
"Umm, la cosecha de miel está bastante buena esta vez", dijo Hiroshi, no importándole la cercanía. Dormía con la chica casi todas las noches y ella era muy pegajosa, entonces, ya se estaba acostumbrando, pero no quitaba el hecho de que sus mejillas se pusieran un poco rojas.
"Bien, niños, basta de escándalos", dijo Nana entrando al comedor.
"Señorita Nana", saludaron los chicos, menos Hiroshi y Zero Tsu. Esta última porque no le importó, mientras Hiroshi solo asintió en reconocimiento.
"Bueno chicos, apenas me llegaron sus órdenes, pero seré su cuidadora, como en Garden", dijo la mujer con una sonrisa.
"¡Genial!", celebraron los chicos, siendo notable que Zorome murmuró que su cuidadora era muy hermosa, solo para que Miku le jalara las orejas.
Zero Two y Hiroshi se quedarán con ustedes hasta nuevas órdenes, dijo Nana analizando la reacción de los chicos, viendo sorpresa, curiosidad, ¿y miedo? Eso último la sorprendió, pero tendría que averiguar por qué. De hecho, notó que Zorome estaba muy silencioso, normalmente él era uno de los niños más ruidosos.
"Bien, Hiroshi, Zero Two, acompáñenme", dijo Nana nuevamente.
"Oh, ¿por qué? Estaba muy cómoda aquí", se quejó la chica peli rosa.
"Quizás es para informar de nuestros hallazgos", agregó Hiroshi, limpiándose los restos de comida de su cara y manos, mientras Zero Two hizo un puchero al escuchar eso, dar informes era lo peor.
El dúo se fue siguiendo a la mujer, cerrando la puerta y dejando un silencio atrás.
"Ahora entiendo eso de que dan miedo. No es la chica, sino él, que da miedo", dijo Miku con un temblor.
"No es aterrador, solo demostró quien era de mayor rango", pensó Ichigo. ¿Eso era lo que debía apuntar a ser una líder?, hacer que todos obedezcan sin replicar, no, eso es cuando es hora de controlar a un rebelde, pensó Ichigo recordando lo que pasó con Zorome.
"¿Cuál es el problema?", se quejó Zero Two mientras bajaba en un ascensor en compañía de Hiroshi y Nana.
"No es que haya problema, pero sabes que no se pueden mezclar con los niños", intentó decir Nana, pero Zero Two la interrumpió.
"Porque no somos humanos, porque somos monstruos", dijo la chica fríamente, mientras Hiroshi miró a otro lado. Aún le dolía que ya no era humano, si más el monstruo que mató su mundo.
"No es eso", dijo Nana con calma.
"Es para protegerte. Ustedes pueden vivir muchos años, incluso más que yo. El doctor me lo dijo. En cambio, ellos, no pasarán su adolescencia", dijo Nana con tristeza.
"Oh", dijo Zero Two al darse cuenta, de hecho, eso era lo que habló con Hiroshi esta mañana.
Los niños modificados estaban predestinados a vivir poco, un efecto secundario del crecimiento acelerado para reemplazar y aumentar las filas de los pilotos constantemente.
"Eso está por verse", dijo Hiroshi de repente, mirando por la ventana del ascensor hacia la ciudad que contenía el cerasus.
"Qué sofocante lugar", murmuró Zero Two parándose al lado de su compañero.
"Sí, para qué tener eso aquí, no hay humanos de todos modos", dijo Hiroshi mirando toda la estructura.
Análisis terminado. Klaxosaurio desconocido que apareció en la plantación 13, neutralizado por Strelizia, el código 02. y el código 016_ 1, informa de terreno anormal pero nada de dónde se originó la posible mutación en los Klaxosaurios, dijo una voz femenina artificial en un espacio grande similar a una esfera de cristal, que en realidad era una multitud de pantallas, que transmitían imágenes del exterior. En el centro se elevaron 7 brazos robóticos con sillas en el final, de las cuales se sentaron varias figuras con capas blancas, entre ellas estaba el presidente de Ape y su segundo al mando, el resto vestían capas blancas con máscaras de animales.
"Cerasus está al 50% de su capacidad de carga de combustible, solicita beso con la plantación 26", dijo la voz fémina.
"Concedido", dijo el presidente con calma, recibiendo un entendido por parte de la computadora. Todo esto mientras varios hologramas mostraban los daños que recibió la plantación 13 y una repetición de la pelea de Strelizia.
"Esos dos son demasiado poderosos, el doctor creó esta vez una pareja perfecta", dijo uno con máscara de Marmoset, mientras miraba a otro con máscara de Tarsio, el cual tarareaba pensativo.
"Desde la llegada de ese chico, Hiroshi, la chica se ha calmado mucho, aunque hace lo que se le da la gana, ya no nos perjudica tanto", comentó otro con máscara de babuino.
"Ese no es el problema", gritó otro.
"Ese Klaxosaurio no era normal, pese que su núcleo se destruyó, aún estaba vivo. Peor aún, comenzó a fortalecerse", gritó el mismo hombre con una máscara de gorila.
"De hecho, eso es un desarrollo preocupante, el enemigo se está adaptando a la nueva forma de batalla, es por eso que le di rienda suelta al doctor en la investigación", dijo el presidente llamando la atención de todos.
"No quita que ese hombre ha estado haciendo movimientos extraños, y pedir al ascensión fue muy descarado, por eso enviamos a esos dos", dijo el vicepresidente con calma.
"Exactamente, pero por ahora solo observaremos", dijo el presidente con seriedad, mirando una grabación de dos figuras, paradas en frente de otra que era tres veces más grande que un Franxx.
En otro lugar.
Hiroshi caminó por un pasillo, exactamente donde los pilotos se ponen los trajes. Estaba pensativo, el hecho de que la princesa tuviera el coloso era preocupante. "Dale a la niña Klaxosapien una fábrica de armas y espera una sorpresa a cada momento", pensó. Pero es extraño, esa bestia atacó con intenciones de inhabilitar al Strelizia y no destruirla.
Un escalofrío lo congeló y miró por encima de su hombro, pero solo vio más personal pasando, pero aún su mal presentimiento estaba. Mirando a las personas, no vio nada raro, pero le recordó mucho a esa misma sensación que tuvo antes de. La puerta de su lado se abrió y de esta salió Ichigo con su traje de piloto, la cual se sorprendió ante la presencia del chico, pero se recompuso.
"Deseas conectarte con el coloso", dijo una voz en su cabeza. Hiroshi de inmediato la descartó. Había estado recibiendo ese mensaje, no mucho atrás se dio cuenta de que no estaba loco. Esa voz era la forma que el sistema de los Buchers tenía para controlar la
mente enjambre, y él rechazó cada intento. ¿Por qué? Temía que si lo hacía, dejaría de tener el control sobre su cuerpo y se haría una monstruosidad asesina más, y él no quería eso. Es por eso que rechazó el sistema. Sí, con él podía saber al instante dónde estaba el coloso y si había más de su especie por ahí, pero de nuevo temía el perder el control sobre sí mismo.
"Hiroshi, ¿sucede algo?", preguntó Ichigo notando que el chico estaba con la mirada perdida.
"No es nada, solo pensando en algunas cosas. ¿Estás lista para el entrenamiento?", dijo Hiroshi descartando sus pensamientos, no notando cómo uno de los miembros del personal se detuvo a verlo por unos segundos, solo para continuar con su camino.
Ichigo se movió nerviosa, de hecho, estaba un poco ansiosa. Antes sí estuvo piloteando, pero eso fue para comprobar el estado de los Franxx. Aún no iniciaba el verdadero entrenamiento, y estaba nerviosa de saber cómo sería su rendimiento.
Viendo la ansiedad de la chica, Hiroshi dio una sonrisa suave.
"No te preocupes, lo harás bien, todos lo harán bien", dijo el chico.
"¿Tú crees?", dijo la chica con una sonrisa agradecida.
"Sí, tienen talento. Solo esfuérzate y quizás superen a mí y a Zero Two", dijo Hiroshi, que no se pudo contener ante la imagen tierna de la chica y le revolvió el cabello antes de irse, mientras Ichigo se congeló ante el contacto y se llevó lentamente sus manos a la cabeza donde fue mimada, sintió un cosquilleo demasiado bien.
Nota del autor: No den ideas raras, Hiroshi es amable y dulce por naturaleza, le encanta mimar a Zero Two cuando puede, entonces es normal que mime a los niños pequeños a sus ojos. Agréguele que estos niños no tuvieron mucho afecto, ser alagados, felicitados y mimados es suficiente para que sean felices.
No soy de los que hacen fanfics donde siempre hay una insinuación romántica y sexual, son simples mimos, como entre buenos amigos o hermanos, así de simple.
Fin de la nota, y por favor dejen de pensar con la lujuria, esta historia es seria y no tiene cosas turbias, bueno si, pero no con ese tema.
"¿Cómo te sientes?" preguntó Futoshi a su compañera, la cual estaba dando expresión a su Franxx, el cual era un mecha con armamento pesado y color principalmente negro, con colores secundarios en verde, naranja y blanco.
"Estás haciendo bien, no te preocupes", dijo el Franxx a Futoshi, quien dejó salir un suspiro de alivio.
"Qué cursis", dijo Zorome mientras el Franxx que pilotaba se movía a sus deseos, para la molestia de Miku, que se sentía como un títere.
El Franxx que pilotaba tenía un color predominante rosa, destacando más en su cabeza y torso. Tenía dos orejas que salían de la cabeza en forma de arco, con dos aberturas en la parte superior. La boca era de color blanco, mientras que los ojos tenían una especie de gafas rosas. La parte superior del torso estaba cubierta con un chaleco, y sus brazos eran de color rosa con garras doradas en las manos, su principal arma. Sus piernas tenían líneas blancas y rosas con botas rosadas. Este era el Argentea.
El otro Franxx, pilotado por Mitsuru e Ikuno, era un mecha con una mirada inexpresiva, de color blanco y morado, con ojos azules. Sus piernas parecían cuchillas, y sus brazos tenían apéndices en forma de abanico. Su cintura estaba rodeada por una armadura en forma de falda. Este era el Chlorophytum, el cual miraba la forma de sus compañeros en silencio.
"Mientras los de Genista son cursis, recuerda esto Delphinium, yo soy el primero y el mejor", dijo Zorome de forma arrogante.
"¿Oíste, Hiro, Naomi? Su Franxx es estándar, no es especial como el mío", dijo Zorome, señalando al silencioso Franxx con colores más apagados y una simple lanza.
Mientras, el Franxx estándar solo bajó la cabeza.
"Eso es ir demasiado lejos", regañó Goro desde su posición.
"Jum", resopló Zorome.
"Bájalo dos rayas", dijo Miku, mientras se ponía una mano en la cabeza.
"¿Qué importa? Aquí ya nadie me puede vencer", dijo Zorome encogiéndose de hombros.
"Si es así, demuéstralo", dijo la voz de Zero Two, solo que más sintética. Mientras tanto, Strelizia salió de su hangar, llamando la atención de todos. No sabían por qué, pero cuando ella aparecía, una aura pesada caía en el sitio.
"Sorprendidos de verme otra vez", dijo Strelizia con una sonrisa torcida, su lanza reemplazada por un bastón de entrenamiento. A su lado había otros más.
"Todos ustedes, como me dijo el señor calvito de Hachi, deben enfrentarse a mí", dijo Strelizia, señalando a cada uno de los Franxx con su bastón.
"¡Calvito!", farfulló Hachi molesto, mientras Nana a su lado no pudo evitar soltar una risita.
"Oye, espera, en serio, ¿tenemos que pelear contigo? No nos dijeron eso", se quejó Argentea, mientras los otros Franxx asintieron.
"Este, no me siento muy segura de enfrentarme a ella", dijo el Franxx estándar con la voz de Naomi.
"No te preocupes, eso hace parte del entrenamiento", animó Hiroshi mientras veía a su compañera desde su posición.
"Supongo que esto es para clasificar el estado actual de nuestras habilidades", dijo Chlorophytum con calma, mirando al Strelizia que parecía impaciente.
"Siendo así, iré primero", comenzó a decir Delphinium, pero fue interrumpida por Argentea.
"¡Ah, no! Ustedes ya tienen lo bueno de ser el capitán, esto me toca a mí", dijo Zorome con una sonrisa, tomando un bastón.
"Al fin pensé que me saldrían raíces de tanto esperar", dijo Strelizia con aburrimiento, algo que molestó a Zorome.
"Tú, maldita", gritó Zorome haciendo que su Franxx cargara de cabezas.
"Eh, oye espera, no seas imprudente", gritó Argentea en pánico, pero ya la batalla había comenzado.
Strelizia se apartó de un columpio y simplemente puso su pie para que el Argentea se tropezara, cayendo estrepitosamente, para el mal de Miku, que gruñó de dolor. Pero a Zorome no le importó y cuando hizo que su Franxx se levantara, la punta del bastón en la cara de Argentea lo detuvo.
"Estás muerto", dijo Strelizia, mirando al Franxx caído.
Zorome abrió sus ojos en sorpresa y vio fijamente el bastón que lo apuntaba.
"Viste, te dije que no seas tan precipitado", se quejó Argentea, mientras se levantaba. Strelizia ni siquiera le ofreció una mano en ayuda.
"¿Quién sigue?", dijo Strelizia sin mucho ánimo.
"Eso fue muy rápido", pensaron todos los demás, mientras Argentea se apartaba. Sin duda, Zorome fue brutalmente herido en su orgullo.
"Strelizia, regaño Hachi".
"¿Qué? Estaba demasiado abierto, no pude evitar hacerlo tropezar con sus pies tan descuidados", se quejó Strelizia.
"Debo tener cuidado con mis pies", pensó el Franxx estándar, siendo Naomi que tragó saliva ante tan unilateral derrota, y ella era la siguiente.
Más tarde.
"No me sorprende", murmuró Strelizia mirando al suelo, todo el escuadrón trece derribado.
"Auch", dijo débilmente Argentea.
"No siento mis piernas", dijo el Franxx estándar.
"Qué enorme diferencia", murmuro el Chlorophytum, mientras estaba tirada boca abajo.
"Oigan, creo que Futoshi está apunto de desmayarse", dijo Genista preocupada.
"Delphinium negó con su cabeza. Esta, por lo menos, estaba arrodillada y no tirada en el suelo y miró con ojos muy abiertos al Strelizia que jugaba de manera magistral con el bastón, como si fuera otra extensión de su cuerpo.
"Hay mucho trabajo por hacer", dijo Hiroshi con cansancio, notando lo muy novatos que eran estos pilotos y cómo ya los querían arrojar a peleas reales, sin duda los parásitos eran vistos como herramientas y no humanos.
"No muy diferente de cómo nos ven ellos a nosotros", dijo Zero Two desinteresada, a diferencia de Hiroshi, a ella no le importaba mucho este escuadrón. Sinceramente, quería estar en otro lugar con su compañero y no haciendo de niñera, aunque sentía que las cosas se pondrían divertidas.
En otro lugar.
"Esos dos no tienen moderación", dijo una figura encapuchada.
"Déjalos, mientras no sean problemáticos pueden hacer lo que quieran con los novatos", dijo otra figura.
Ambas miraban una pantalla que mostraba la pelea de entrenamiento.
"Código 05 y 06, estén preparados ante cualquier situación. Pueden hacer lo que quieran mientras no sean descubiertos por el Escuadrón 13", dijo la voz del vicepresidente.
"Afirmativo", dijeron las dos figuras uniformemente.
Fin del capítulo.