[ En la Isla Fortuna Grande… ]
Enzo llevó a Athena de paseo por el centro de la ciudad, donde disfrutaron de las diversas exhibiciones de faroles en las calles y parques.
Esos faroles eran coloridos y estaban intrincadamente elaborados, representando símbolos tradicionales, animales y personajes del folclore.
—Esto es increíble. Los faroles son tan brillantes y hermosos por la noche —exclamó asombrada Athena, con la mirada recorriendo las calles llenas de diferentes tipos de faroles.
Enzo solo pudo sonreír al observarla. —Me alegra que te guste aquí.
Mientras se movían a través de las concurridas calles del centro de la ciudad, Luna los seguía desde atrás.
—Creo que ya es hora de que la gente del pueblo lance faroles flotantes. Vamos al lago —Enzo tomó la mano de Athena, guiándola hacia el lugar.
Al llegar al Lago Fortuna, vieron un mar de personas sosteniendo faroles flotantes de diferentes diseños.