—Está bien. Esta es la Puerta del Dragón.
Ye Rufeng condujo a Jian Wushuang hacia un imponente pabellón dorado. A primera vista, el pabellón parecía tener 13 niveles.
En ese momento, muchas personas estaban de pie frente al pabellón dorado. Las dos personas más prominentes eran un hombre mayor vestido con una túnica negra y una mujer elegante vestida de blanco.
Aunque Ye Rufeng era un experto, al ver a estas dos personas se inclinó para mostrar respeto y dijo:
—Saludos, Maestro del Palacio Negro y Maestro del Palacio Blanco.
—Ye Rufeng. —La mujer elegante de blanco lo miró a él y a Jian Wushuang, luego dijo con una sonrisa:
— ¿Trajiste a este chico pequeño para que atravesara la Puerta del Dragón?
—Sí —dijo Ye Rufeng asintiendo.
—Tendrán que esperar un minuto. Alguien más ya está pasando por la Puerta del Dragón ahora —dijo la mujer elegante de blanco, luego giró la cabeza inmediatamente.
Ye Rufeng y Jian Wushuang no tuvieron más opción que esperar en silencio.
