Justin recibió la llamada. Al ver que el nombre de Sr. Ford se iluminaba en la pantalla, levantó la mano para señalar a Noah que guardara silencio y contestó.
—Sr. Ford —dijo Justin con calma.
—Aiden, espero no estar interrumpiéndote en un mal momento —la voz de Alberto sonó a través del teléfono, ligeramente preocupada.
—No estoy ocupado —respondió Justin, su tono era cortés pero carecía de cualquier calidez que pudiera sugerir cercanía.
—¿Está Natalie contigo?
—No está.
—¡Oh! ¿Has visto las noticias sobre Natalie?
—Lo he hecho —confirmó Justin.
—No te tomes esa noticia demasiado en serio, ¿de acuerdo? Fue solo una simple discusión entre hermanas. Natalie no es la clase de persona que están pintando. No la malinterpretes, ¿vale?
—No lo haré. Ten la certeza —respondió Justin, su voz firme.
Alberto soltó un suspiro de alivio.