Llegaron rápidamente a la obra en construcción.
Un gran grupo de reporteros ya se había reunido afuera. En el momento en que vieron a Eric y a Ella salir del auto juntos, se abalanzaron hacia ellos.
El rostro de Eric se volvió gélido. Ignoró todas las preguntas, y solo después de que los guardaespaldas bloquearan a los reporteros lograron entrar en la obra.
No muy lejos del lugar había un pequeño edificio, dentro del cual había varios cientos de bolsas de cemento. Veinte de esas bolsas habían sido manipuladas.
—Jefe, el director adjunto afirma que es inocente, pero el empleado que debía estar guardando el lugar ha huido —informó John, resumiendo la situación. Los ojos de Eric destellaron de ira. —Qué jugada tan astuta. Si los medios se enteran de esto, ¡la gente pensará que nuestro Grupo Nelson está escatimando en el proyecto! ¡Mitad real, mitad falso! Esto podría dañar seriamente nuestra reputación.