—Gracias, suegro —afirmó Liu Longwei.
Bai Xiang tropezó con su paso y casi se cae. Bai Tingfeng también se volvió y miró fijamente a Liu Longwei.
—¿Cómo me llamaste? —preguntó Bai Xiang.
—Suegro —Liu Longwei hizo una cara confundida.
—¿Quién te dijo que me llames así? —preguntó Bai Xiang apretando los dientes.
—Bueno, escuché a alguien decir que el padre de tu prometida es tu suegro. Por eso te llamo así. ¿Estoy equivocado? —Liu Longwei tembló, temiendo que Bai Xiang dijera que estaba equivocado.
Al ver la expresión de Liu Longwei, quien parecía querer llorar, Bai Xiang no pudo decir lo que realmente quería decir.
—Bueno, técnicamente no estás equivocado. Pero aún no estás casado con mi hija. Por lo tanto, por favor abstente de llamarme así —Bai Xiang contuvo su enojo.
—No importa porque nos casaremos tarde o temprano. Necesito practicar cómo llamarte —Liu Longwei sonrió ampliamente.
—¡Humph! Nadie sabe qué sucederá en el futuro —interrumpió Bai Tingfeng.
