La abuela Yu no recibió respuesta de Yu Dong y su ira subió a otro nivel, pensó que esta nieta suya ahora era capaz y había aprendido sus maneras después de andar por el camino equivocado por tanto tiempo pero ¡parece que estaba equivocada! ¡Yu Dong no ha aprendido nada! ¡Mira nada más! Mira cómo bajaba la cabeza, ¿les dijo algo a los niños? Pero, ¿qué?
—Yu Dong tú... —la abuela empezó a hablar con voz tensa.
—Abuela, creo que deberíamos dejar que la hermana se calme —Yu Tong sintió que su abuela se estaba enojando, así que rápidamente la interrumpió; sabía que si no lo hacía, la abuela explotaría contra Yu Dong y, mirando a Yu Dong que ya estaba tan alterada, no parecía ser lo correcto en ese momento.