—Fang Chi corrió al baño donde se echó algo de agua en la cara —él no era como otros tritones que se pintaban la cara con colorete y polvo blanco, su piel bronceada estaba libre de maquillaje y era un tritón atractivo, un poco varonil pero aún así guapo, por eso no pensó ni dos veces antes de lavarse la cara para suprimir las náuseas. Se lavó la cara una y dos veces antes de mirar hacia arriba y ver su reflejo en el viejo espejo colocado sobre la mesa con el cuenco de agua delante de él. Su cara estaba pálida y carente de cualquier color —Fang Chi vio esto y apretó los puños—, ¿realmente cuánto tiene que disgustarle Mu Yuxi antes de que pare?
Ahora, debido a sus repugnantes artimañas, todos los buenos recuerdos que compartieron se estaban contaminando lentamente... esta mujer... ¿qué fue exactamente lo que él vio en ella? —(Yu Dong: Estoy intentando encontrar la respuesta a la misma pregunta).