—Despierta Der —Lavanda sintió que alguien lo sacudía para despertarlo.
Abrió los ojos para ver a Jayden mirándolo con una expresión cariñosa.
—Buenos días —Jayden dijo con una sonrisa.
—Buenos días Jay —Lavanda respondió.
—Tenemos que irnos rápidamente antes de que llegue la próxima persona en el turno de la mañana y nos encuentre aquí —Jayden le dijo.
—Ok, ¿puedo tener un beso primero? —Lavanda preguntó.
Jayden se inclinó y depositó un beso en sus labios.
—¿Feliz ahora? —preguntó.
—¡Más! —Lavanda dijo con un puchero.
Jayden suspiró, a Lavanda siempre le gustaba actuar mimado como un niño.
Se inclinó y lo besó de nuevo, luego lo levantó junto a él.
—Vístete ahora, no más trucos —ordenó.
—Sí señor —Lavanda respondió, saludando de forma burlona.
Lavanda se vistió rápidamente y ambos salieron del puesto de vigía.
Cuando bajaron, vieron a los centinelas reunidos.
—¿Qué está pasando aquí? —Jayden preguntó.
Cuando los centinelas lo vieron, se volvieron más respetuosos.