Chase tuvo una larga reunión por la mañana. Después de la reunión, miró su reloj y se dio cuenta de que era hora de almorzar.
Chase pensó: «También es el primer día que Hazel regresa al trabajo. Quiero ir a ver qué está haciendo».
Entonces Chase empacó sus cosas, agarró su llave del coche y salió de la empresa.
—¡Pii! ¡Pii!
Chase caminó hacia el aparcamiento y desbloqueó su coche.
Antes de que Chase pudiera subirse al coche, escuchó una dulce voz femenina.
—¡Hola, Chase! ¡Hace mucho que no te veo!
Chase se quedó atónito y se dio la vuelta para ver quién era la mujer.
Chase encontró a una hermosa mujer con un abrigo blanco parada detrás de él. Ella tenía el cabello largo y ondulado y estaba vestida como una chica dulce.
Chase se quedó atónito y preguntó:
—Jennie, ¿qué haces aquí?
Jennie sonrió dulcemente y explicó claramente:
—Tenía que encontrarme con una amiga cerca. Desafortunadamente, mi amiga tuvo algo que hacer y no pudo venir a verme.