—¡Zas! Chris estaba tan enojado que pateó fuertemente a Amara.
—¡Ya no soporto tus tonterías! Si vuelves a decir algo así, ¡sin duda te divorciaré! —dijo Chris.
—¡Entonces hagámoslo! ¿Crees que tengo miedo de ti? ¡Mañana te divorciaré si me das la mitad de tus bienes! —gritó Amara enojada.
—¡En tus sueños! —Chris estaba tan enojado que jadeaba fuertemente, gritando.
—Lyra, escúchame. Tienes que abortar al niño mañana —dijo Chris, volviéndose hacia Lyra.
—Después de eso, puedes encontrar a un hombre común y vivir una vida tranquila con él. Esa es la mejor solución para ti.
—Chase no es un hombre que puedas controlar. No serás feliz aunque logres estar con él. Además, las cosas ya han llegado a este punto. No tendrás un buen final si sigues molestando a Chase.
—¡Hmph! Chris, por supuesto que quieres que Lyra deje a Chase porque esperas que Hazel esté con Chase —gritó Amara, furiosa, sus ojos ardían.
