```
—Esta maldita mujer, ¿por qué demonios sigue yendo al distrito mientras está embarazada?
El teléfono seguía sonando, pero Hazel se negaba rotundamente a contestar.
Mientras tanto, Hazel ya estaba siendo examinada.
Todas las pruebas cumplían con los estándares quirúrgicos, y ya estaba en fila para el procedimiento.
—¡Bip, bip, bip!
Chase hizo tres llamadas consecutivas, pero Hazel seguía sin responder.
—¿Por qué demonios no contesta su maldito teléfono?
Luna observaba atentamente a Chase. —Sr. Black, ¡Nova acompañó a la Srta. Haynes al distrito!
—Si tienes prisa, ¡puedes llamar a Nova!
Al escuchar esto, Chase frunció el ceño, su rostro apuesto se contorsionó de ira.
Incapaz de contactar a Hazel, en vez de eso marcó el número de Nova.
—¡Bip, bip, bip!
Nova estaba esperando en el salón cuando escuchó sonar el teléfono. Sacó rápidamente su móvil.
Al notar que era una llamada del Sr. Black, Nova no perdió tiempo y contestó de inmediato. —¡Hola, Sr. Black!