Después de finalizar el plan, Mary se excusó de Rei, Anton y Roana en el estudio de Anton para refrescarse antes de irse a dormir. Optó por no participar en sus discusiones para minimizar la posibilidad de cometer errores limitando su conocimiento del plan.
Para mantener el engaño, colectivamente acordaron continuar retratando el desagrado de Mary por Roana, asegurando que Kevin y los demás lo creerían. También hicieron un acuerdo para no revelar los detalles de su plan a Amy y Henry, asegurando así la efectividad de su puesta en escena para todos los involucrados.
Disfrutando de un baño caliente, los pensamientos de Mary divagan sobre si el interés de Roana en Anton realmente había disminuido. Sin embargo, tomó la decisión consciente de permitir que el tiempo revelara la verdad en lugar de sacar conclusiones precipitadas.