[Punto de vista en tercera persona]
Mientras el intercambio de golpes por parte de los dos contrincantes se llevaba a cabo a una distancia lo suficientemente segura, se encontraban los demás niños del monasterio, así como sus mayores, en lo que parecía ser una formación. El instructor Mito, un pequeño Krillin y los demás superiores del monasterio, en ese preciso momento, podían ver cuánto había evolucionado el pequeño Shingen. La razón de esto es que casi nunca lo podían encontrar sin hacer nada. Debido a que el joven siempre estaba ocupado ideando nuevas formas de entrenar, los demás niños lo miraban como a un bicho raro.
Aunque, para sorpresa de los demás, el único niño con el que Shingen podía hablar sin terminar discutiendo era Krillin. Todos en el monasterio sabían de él y de su inseparable vínculo de hermano con Shingen.
Después de divagar en su mente, un anciano habló con sus compañeros con voz suave:
—Es simplemente increíble el nivel de crecimiento de este niño, ¿no creen? -preguntó un anciano.
Después de decir eso, los demás se giraron hacia él, y cada uno de ellos quería expresar su opinión acerca de cómo les había parecido el gran talento del muchacho.
(Voy a empezar por darles al menos un nombre antes de no volver a verlos, jajaja).
El primero en hablar fue claramente el más "joven" entre los ancianos allí presentes, a quien llaman Tobi y con una edad de 68 años. Pudo establecerse como uno de los más fuertes en el monasterio.
—La verdad, ese chico es incluso más talentoso de lo que alguna vez fui. Y no me refiero solo al hecho de que aprende todo muy rápido y sin casi ningún error, sino que constantemente él mismo ingenia nuevas formas de entrenamiento y las prueba en sus ratos libres. Aunque me cueste decirlo, nosotros ya no le podemos ayudar a crecer como artista marcial; nos hemos quedado sin más estilos de combate o técnicas de KI para poder enseñarle. Lo mejor sería entregar al muchacho al maestro Tsuru, y si el muchacho pierde el reto, yo estaría dispuesto a arrodillarme ante el maestro Tsuru para que le pueda enseñar" —terminó diciendo Tobi.
Con una mueca de tristeza, los cuatro ancianos no pudieron evitar asentir ante lo dicho por uno de ellos.
Tanto fue así que, después de pensarlo un poco, cada uno de ellos habló.
—Señores… Yo, Iku, he decidido hacer todo lo posible para que el muchacho siga adelante con su objetivo de ser más fuerte, sea con el maestro Tsuru o no —terminó de decir Iku.
—Yo, Shino, también estoy de acuerdo con lo dicho por mis dos colegas. Incluso si el maestro Tsuru no lo acepta, yo mismo iré a buscar al maestro de la Escuela Tortuga y lo convenceré de aceptar al joven —dijo Shino.
—Mmm, y yo, Ichiro, me comprometo a no dejar que tal talento, que solo aparece una vez cada cien años, sea desperdiciado. Por esa razón, estaré incluso dispuesto a dejar a un lado mi orgullo y pedirle ayuda a mi ex rival, el maestro de la Escuela del Colmillo de Leopardo, para que pueda tomar como discípulo al mocoso —terminó diciendo Ichiro, que era el más viejo de todos allí presentes a excepción de Tsuru.
Después de que cada uno expresara su opinión, volvieron a mirar el combate y, sin darse cuenta, el instructor Mito los escuchó y no pudo evitar asentir con aprobación. Él sabía que los ancianos no dejarían pasar la oportunidad de entregar en buenas manos al joven Shingen, todo esto debido a que ellos alguna vez fueron jóvenes y de la misma manera les hubiera gustado que se les diera una recomendación para ir a alguna escuela marcial reconocida. Pero lamentablemente, en aquellos tiempos no había la opción de salir del monasterio; si querías hacerlo, deberías no solo vencer a todos los estudiantes, sino también a tu instructor y a los superiores.
Con estas condiciones, muy pocas personas lograron salir de allí, pero muchas otras murieron en el combate o se resignaron y aceptaron su destino de ser monjes toda su vida.
Habiendo terminado de reflexionar, el profesor Mito dirigió su mirada hacia la pequeña pelea que se estaba llevando a cabo. Con gran orgullo, no pudo evitar pensar que el futuro de este joven era demasiado prometedor y que, con el tiempo, se convertiría en el artista marcial más fuerte de todos.
Mientras todos observaban el combate, Krillin estaba muy asombrado del poder de su 'hermano' mayor. Incluso vio cómo, en ciertas partes de la lucha, Shingen estuvo a punto de tomar el sombrero, pero con gran rapidez y agilidad, el maestro Tsuru lo evitaba. Después de un tiempo, el maestro atacó con un fuerte golpe en la cara del joven.
Sintiendo el dolor del golpe, Shingen no pudo evitar pensar que, no importaba cómo lo intentara, aún mezclando todas las artes marciales que conocía, no podía tomarlo por sorpresa. 'Si es así, entonces tendré que usar mi última carta', pensó el joven. Y en ese momento, comenzó a cargar su técnica en una pose muy llamativa; al hacer eso, sus músculos se hincharon y comenzó a sudar profusamente, mientras que una esfera eléctrica aparecía y se hacía más y más grande en las palmas de sus manos.
Los ancianos miraron a algunos de los maestros allí presentes en búsqueda de respuestas, pero para su sorpresa, todos negaron con la cabeza en señal de no saber quién le enseñó esa poderosa técnica. Incluso el profesor Mito estaba desconcertado de cómo su alumno pudo crear una técnica de KI tan poderosa sin que ellos le instruyeran.
Después de verlos de reojo, el maestro Tsuru supo que este muchacho había logrado crear su propia técnica.
El solo hecho de saber que el joven había creado una técnica ya lo asombró demasiado, pero lo que le sorprendió aún más fue cómo, mientras cargaba su técnica, el poder del joven crecía aún más. Después de ver eso, el maestro Tsuru elogió al muchacho en su mente. Tras elogiar al joven por su hazaña, Shingen, sin perder más tiempo, lanzó su técnica que tenía un gran parecido al 'Final Flash' de Vegeta.
Tras lanzar su ataque, el maestro Tsuru, con toda su fuerza, bloqueó la técnica con las manos desnudas, y mientras el ataque chocaba con las manos de Tsuru, explotó al instante y, con una gran nube de polvo a su alrededor, el maestro no pudo sentir a Shingen por ninguna parte. Mientras lo buscaba con la mirada, no pudo evitar reír entre dientes, todo debido a que el objetivo del muchacho no era lastimarlo; su objetivo era distraerlo con la cantidad de polvo producido por la explosión.
Tras sentir al joven en su espalda, el maestro Tsuru optó por una forma muy extravagante de escapar del ataque sorpresa: volar.
Cuando el maestro Tsuru voló, todo el mundo miró con los ojos muy abiertos y con bocas abiertas se preguntaron: ¿Cómo ese anciano podía hacer eso?
Mientras todos se asombraban por la capacidad del maestro para volar, inmediatamente dejaron de mirarlo y volvieron su atención al joven que estaba quieto y con una sonrisa en su rostro, mientras que al lado de él estaba el sombrero del maestro Tsuru. Después de verlo, el maestro Tsuru no pudo evitar reír entre dientes; cuando bajó al suelo, felicitó al joven y en ese momento aprovechó para elogiar la manera en que el joven aprovechó su descuido y tomó su sombrero. Tras muchos elogios, el maestro Tsuru y los ancianos entraron a un salón privado y conversaron entre ellos, y en medio de la conversación, el monje Shino preguntó con voz seria al maestro Tsuru."
- Maestro Tsuru, ¿puedo preguntar por qué te dejaste ganar?
Después de hacer su pregunta, todos miraron sutilmente al maestro Tsuru, quien en ese momento estaba tomando una taza de té y sentía todas las miradas posadas sobre él. Luego, dejó suavemente la taza de té en la mesa y habló con voz tranquila y un toque de burla:
—Quién sabe, tal vez me sorprendió su manera única de pelear y su habilidad para crear una técnica tan poderosa con tan poca enseñanza en el uso del ki.
Tras esas palabras, todos suspiraron algo decepcionados por la respuesta, pero no le dieron mayor importancia y continuaron conversando sobre otros temas.
Tiempo después, en la habitación del joven herido, se encontraban Shingen y Krillin. Este último lloraba porque su "hermano" se iba. Después de calmar a Krillin, Shingen le prometió que se volverían a ver cuando ambos fueran más poderosos. Krillin salió del cuarto de Shingen y este último se quedó dormido.
Al día siguiente, el maestro Tsuru y Shingen salieron del monasterio y, tras caminar durante dos largos meses (que Shingen pasó muy aburridos, ya que Tsuru se mantuvo callado durante todo el trayecto), finalmente llegaron a la Escuela de la Grulla.
Al llegar a las puertas de la escuela, Tsuru las abrió y Shingen lo siguió. No pudo evitar maravillarse ante el tamaño de la escuela marcial; en comparación, esta escuela era al menos cuatro veces más grande que el monasterio.
Mientras caminaban, Shingen observó cómo varios discípulos peleaban entre sí en lo que parecía ser una arena de combate. Cuando Tsuru hizo acto de presencia, todos dejaron de prestar atención a la pelea y se acercaron a saludar a su maestro.
Uno de los discípulos se percató de Shingen y enseguida preguntó quién era. Otros también se sumaron a la misma pregunta.
El maestro Tsuru le pidió a Shingen que se presentara ante sus nuevos compañeros. Tras hacerlo, Shingen notó muchas miradas hostiles dirigidas hacia él y no entendía por qué.
A pesar de las miradas incómodas, Shingen encontró a la persona que quería ver y con la que esperaba entablar amistad. Con una sonrisa, Shingen extendió la mano hacia el joven Ten Shin Han, quien lo miraba fríamente. Sin embargo, Ten decidió ignorarlo y se alejó de allí.
El maestro Tsuru, tras ver esto, solo le informó a Shingen sobre el nombre del niño de tres ojos, que era Ten Shin Han, y que, al igual que él, Ten era un huérfano que había sido dejado en las puertas de la escuela.
Después de decir eso, Tsuru ordenó a un discípulo que llevara a Shingen a su respectiva habitación. Mientras se estaban por ir, Tsuru le recordó que comenzaría a entrenar las verdaderas artes al día siguiente, a primera hora.
Tras cumplir con la orden, el discípulo llevó a Shingen a su habitación y se fue sin decir nada.
Al entrar, Shingen notó lo espaciosa que era su habitación, aunque su único defecto era la cama de bambú cubierta con pieles de animales. Sin importarle demasiado esta situación, Shingen sonrió triunfante, ya que había conseguido por fin entrar en la segunda mejor escuela de artes marciales del mundo.
Habiéndose acomodado como pudo, Shingen por fin pudo descansar debidamente mientras, de vez en cuando, pensaba en lo que le depararía el destino de ahora en adelante.
[FIN DEL CAPÍTULO N°3]
[NOTAS DEL AUTOR]: Hola a todos, espero que les haya gustado el capítulo del día de hoy. Hoy he tratado de abarcar un poco más a los demás personajes secundarios antes de sacarlos de escena, ya que desde ahora en adelante Shingen obtendrá nuevos amigos, enemigos, amores, tragedias, etc.
Por último, tengo que aclarar lo que sucederá con Krillin en la historia debido a la intervención de Shingen en su vida. Como ya deben saber, el pobre Krillin había sido molestado y tratado mal en el monasterio. Sin embargo, en esta historia, eso no pasará, ya que todos saben que Krillin era muy cercano a Shingen, quien, en términos de artes marciales, podía vencer a varios monjes si se esforzaba lo suficiente. Si se metieran con Krillin ahora, es muy probable que Shingen vuelva al monasterio y se vengue de todo lo que le pase a su pequeño hermano, es decir, Krillin.
Esto hará que no solo Krillin pueda mejorar sin obstáculos de por medio, sino que también lo convertirá en alguien menos odioso y más humilde, como cuando entrenó con el maestro Roshi. Todo esto es porque Krillin entrenará con el Profesor Mito, quien moldeará su personalidad y lo hará mejorar muchísimo.
[NIVELES DE PODER]
*Shingen: 20
*Tsuru: 120
*Prof.Mito: 35
*Anciano Tobi: 63
*Anciano Iku: 54
*Anciano Shino: 50
*Anciano Ichiro: 65
*Krillin: 2
*Ten Shin han: 22