—Vale, vale, ¡vete ya! No te preocupes por mí. Solo concéntrate en estudiar mucho y si no entiendes algo, asegúrate de preguntarle a su tío. No te avergüences de hacer preguntas —Zhou Lanfang tenía miedo de que Zhou Siyu fuera demasiado tímida, así que hizo hincapié en recordárselo.
Hoy era el último día de tutoría y tenían que aprovechar cada segundo. Cuanto más aprendieran, mejor. Cada punto extra que pudieran obtener en el examen era crucial.
El objetivo era entrar a la escuela secundaria, lo que luego abriría la puerta a la universidad.
—Tío, tía, adiós —Después de intercambiar cortesías con Zhao Xinlan, Shen Jianhua y Zhou Lanfang, los dos se fueron juntos.
—Adiós, adiós —Shen Jianhua dio una sonrisa forzada, imitando a Zhao Xinlan con un gesto de despedida incómodo.
Antes de irse, Zhou Siyu echó una mirada especial a Shen Mianmian. Al ver que ella había permanecido en silencio como si no estuviera interesada en sus asuntos, se sintió aliviada.