—Por supuesto que es verdad. No lo había notado antes, pero ahora estoy varios días atrasada... Normalmente soy muy regular —Meng Yunhan se sintió un poco incómoda explicando su ciclo menstrual a un hombre; no era algo a lo que estuviera acostumbrada.
Después de la emoción inicial, la cara de Yun Hao se ensombreció.
Él y su esposa habían sido íntimos por poco más de medio mes, y ahora de repente había un bebé en camino.
Cuando se enteró por primera vez de que su esposa estaba embarazada, se puso contento, pensando que ahora que ella tenía su hijo, se quedaría con la Familia Yun para siempre. Pero al momento siguiente, se serenó—ahora, iba a tener que ser abstemio.
Su esposa estaba justo allí, a la vista pero fuera de alcance.
Pero la idea de que su esposa llevara a su hijo lo hacía dispuesto a cuidar de ella.
Tenía casi treinta años. Él también quería tener hijos.
