Gu Yundong levantó la vista sorprendida cuando vio el tael de plata.
Tía Ke dijo de manera poco natural —No comeré tu comida por nada. Trata el tael de plata como dinero para la comida. De todos modos, tienes que cocinar para algunas personas. También puedes cocinar la mía para ahorrarte la molestia. Un tael de plata es suficiente, ¿verdad?
—Es suficiente, suficiente.
—Ven conmigo a comprar víveres otro día. Sé qué tienda tiene comida barata y fresca.
Gu Yundong guardó la plata e inmediatamente asintió —No hay problema.
Ahh, el tael de plata que había gastado hoy finalmente había vuelto. Su corazón ya no dolía tanto.
Gu Yundong colocó felizmente los tazones sobre la mesa. Los dos pequeños y la Señora Yang miraban con impaciencia los platos en la mesa.
La Hermana Mayor era asombrosa. Nunca habían olido una fragancia así antes.
Gu Yunke tomó un bocado del huevo al vapor. Su cara parecía brillar como si estuviera intoxicada.
—Es suave y delicioso.
Gu Yundong la miró y se sintió un poco triste. La joven señorita nunca había comido huevos al vapor. La Señora Zhao era muy tacaña con su familia. Si había buena comida, se la daban a las familias del segundo y tercer tío. Si se atrevían a desearla, ella les pegaba sin piedad.
Le sirvió una gran cucharada a Gu Yunke —Come más si te gusta. Te lo prepararé a menudo en el futuro.
—Hermana Mayor, eres la mejor —La niña levantó la cabeza y se rió—. Me gusta este lugar. Aquí no está la Abuela Zhao para regañarme, ni la Segunda Hermana para pegarme. También hay comida deliciosa. Es incluso mejor que en mis sueños.
La Segunda Hermana de la que hablaba era su prima de la familia del Segundo Tío. Era un año menor que Gu Yundong, pero era arrogante y dominante. Al ver que Gu Yunke era rosada y tierna y más bonita que ella, a menudo la pellizcaba.
La pequeña lloraba y corría a buscar a Gu Yundong. La original Gu Yundong era una llorona y débil, pero aún así la ayudaba a razonar con la chica de la familia del Segundo Tío. Al final, discutieron.
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La señora Zhao inmediatamente la abofeteó, causándole sangre en la oreja. Estuvo en cama unos días antes de recuperarse.
La joven Gu Yunke estaba asustada. Desde entonces, no se quejaba más. Lloraba en silencio cuando la pellizcaban. Al final, simplemente se quedaba en su habitación todo el día y no salía.
Ahora que la señora Zhao y la Segunda Hermana no estaban aquí, su personalidad se volvía gradualmente alegre.
El corazón de Gu Yundong dolía, pero al mismo tiempo, estaba muy satisfecha. Sentía que hacer que la vida de los miembros de su familia fuera mejor le daba una sensación de logro.
Gu Yunshu y la señora Yang también sentían lástima por Gu Yunke. Cada uno le sirvió una cucharada de huevo al vapor para que comiera.
A la izquierda de la pequeña estaba su hermana mayor, y a su derecha su hermano. Se sentía tan feliz y se llenaba la boca con comida.
Ella estaba muy feliz, y Gu Yundong no podía evitar querer mimarla.
No solo ella, sino también la señora Yang, Gu Yunshu y la tía Ke alabaron sus habilidades culinarias sin cesar. Se comieron todos los platos. Nunca antes habían pensado en una vida así.
A Gu Yundong también le gustaban esos días tranquilos. Lo único que le preocupaba era que el dinero disminuía poco a poco.
Afortunadamente, tres días después, Nie Cong finalmente apareció en la entrada del patio de la tía Ke.
Además, había traído dos noticias sorprendentes.
Cuando Nie Cong vio a Gu Yundong de nuevo, casi no la reconoció. ¿Era realmente esa niña con el cabello desaliñado y ropa andrajosa? ¿Era realmente... tan guapa?
Gu Yundong ignoró su sorpresa. Extendió sus manos como una cobradora de deudas. —Mi plata.
Sí, la voz era muy familiar. Definitivamente era ella.
Solo entonces Nie Cong sacó un billete de su bolsa de dinero.
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