Osisael
Mientras esperaba sentado en la silla de dirección junto con otros psicólogo miraba a la ventana esperando a que pasará Emma porque supuse que tal vez la curiosidad la harían aparecería ahí, de todas formas no era malo tener curiosidad por la persona que la había amenazado para conseguir un puesto en esa escuela y mientras esperaba mi turno y a Emma me tomé el tiempo de imaginarla. En mi mente ella era nerd, chaparra, de cabello ondulado y anteojos rosa pero con una mirada fuerte y jodidamente hermosa.
De repente, mi visión se interrumpió cuando un chico alto, de cabello rubio y ojos azules, pasó por la ventana y abrió la puerta junto a ella. Su mirada parecía distraída, volteando varias veces hacia atrás como si buscara a alguien en específico.
Al regresar su mirada a la sala, caminó entre los postulantes y se detuvo en otra puerta, la que separaba la "sala de estar" de la habitación de entrevistas donde el director conversaba con un candidato. Con un toque sutil en la puerta, esperó una respuesta desde adentro y al aún no recibirla voltió a mirar hacia atrás, fijando su vista en un punto específico a través de la puerta abierta por donde había pasado anteriormente.
Intrigado, regreso su mirada a la sala donde nos encontramos pero está vez recorriendo con sus ojos a los postulantes para al final detenerse en mi mirada, como si hubiera encontrado lo que buscaba. Se detuvo ahí un momento supongo esperando a que desistiera pero eso nunca iba a pasar después de un momento el chico me regaló una sonrisa y regreso su mirada a la puerta cuando porfin hubo una respuesta:
—pase— exclamó el director.
El chico giro la manija y le permitió el paso al candidato que anteriormente ya estaba dentro, para después en cuanto pudo pasar entrar con unas hojas blancas llenas de pregunta y cerrar la puerta detrás suyo.
— ¡¿Lara?! ¿A quien esperas?— pregunto una chica.
El grito nos distrajo a todos volteando (supongo) al mismo tiempo para ver asía afuera que era lo que pasaba. como a dos metros de distancia de dónde estábamos en el campo de visibilidad de la puerta abierta se encontraba parada una chica alta, de cabello corto, de mirada fuerte que en cuanto volteo a mirar a la chica que le había gritado suavizó su miarar, de piel canela y nada más, nada que destacará como para que fuera Emma pero aún así mire su interacción con la otra chica.
— no a nadie, me pareció ver a alguien conocido.— respondió Lara mientras la chica se acercaba y se asomo a la sala — ya no importa. ¿Que ocupabas? — pregunto tomando de los hombros a la chica para hacer que la mirara a ella y no a dónde estaban los candidatos.
— quería pedirte un favor. Supongo que con el repentino cambio de amistades entre tú y... Ya sabes Emma te has quedado sin equipo para el trabajo del viernes no sé si te gustaría unirtenos.— insinuó con ilusión.
Lara en respuesta sonrió y asintió para después voltear hacia adentro de la sala y solo verme a mi otra vez con esa mirada de haber encontrado algo.
una sensación espantosa recorrió mi cuerpo que me hizo pensar que tal vez Amy se le habia pasado un detalle importante a la hora de amenazar a alguien Y era el investigar sus posibles conexiones para escapar. porque no hay peor percance que una víctima que tiene apoyo de alguien más.
Si no fuera porque alguien la distrajo hubiera podido jurar que se habría quedado mirándome un buen tiempo, se notaba que algo en mi no le había gustado.
—ya vamonos Lara — pidió la chica junto a ella.
Esta otra vez asintió y para calmar la tensión volvió a regalarle una sonrisa.
Olivia
Ni siquiera podía deducir porque derrepente había haceptado seguirle la corriente a alguien que me había amenazado, pero era verdad que de todas las posibilidades tal vez la pista que me llevaría a salvar a Emma estaba en esa sala de candidatos al empleo disponible.
Antes de abrir la puerta Mat llevo uno de sus dedos a la boca indicando que no hiciera ruido en un claro ejemplo de burla. Ignore su seña y espere a que cruzará y pasará por la sala con los papeles que el maestro nos había dado, ahora ni siquiera sabía cómo iba a reconocer al indicado pero aún así quería quedarme.
Cuando Mat cruzó la puerta en medio de todos los candidatos directo asia el otro extremo de la sala para llegar al director todos lo voltearon aver, curiosos por su repentina interrupción.
Mientras el hacía la distraccion mire a detalle a cada una de las personas en la sala esperando estúpidamente a qué alguna brillara o diera señales de ser quien yo buscaba. Mat tocó la puerta y pidió pasar, al no obtener respuesta volteo a mirarme supongo que para descifrar si de casualidad habia podido ver al sospechoso. Al notar en mi mirada algo de confusión, miro a todos los candidatos deteniendoce porfin en uno solo, en el único que aún le sostenía la mirada.
Mat sonrió y justo ahí la voz del director le permitió pasar.
— ¿¡Lara!? A quien esperas? — exclamó serca una de mis compañeras que repentinamente le había nacido hablarme.
Nosé si por la adrenalina del momento ese fragmento en específico desapareció pero lo único que recuerdo es haber volteado de regreso a la sala y ver exactamente lo que buscaba, los ojos de aquel hombre con los lentes que llevaba lo hacían ver dulce aunque su cuerpo ejercitado lo hacia ver colosal, al verme el rostro de el me permitió ver qué no era para nada angelical volviendoce exactamente la mirada que esperaría de alguien que tiene algo que ocultar.
Mat salió distrayendo a todos incluyendome a mi, sus manos estaban basias y nuestras miradas se decían todo. Al volver a ver a aquel hombre de ojos color miel y pestañas destacables este aún me miraba, está vez sin una pizca de miedo.
Mat miro mi mirada extrañada por la de aquel hombre y cerro detras suyo la puerta por donde antes había entrado en primer lugar.
— a, había olvidado que se habían venido juntos, lo siento, si quieres después hablamos del trabajo del viernes bye — me dijo la chica antes de marcharce.
— al final no fue tan difícil de encontrar — agrego Mat al quedar frente a mi aún en shock.— Lara — chasqueo los dedos y me despertó del limbo.
— ¿Cómo supiste que era el?— pregunté con curiosidad.
— de la misma forma en la que tú también lo supiste Lara.
Asentí no satisfecha con su respuesta pero mentalizada de que era obvio que me ocultaba algo.
Mat camino devuelta al salón y me límite a seguirlo nada más, repasando en mi cabeza una y otra vez su amenaza.
Poniendo todo a analizar que tan mala era esa propuesta, ¿Que cosa tan mala debia de estar pasando como para permitir que yo también fuera amenazada?. Aún sin comprender mucho lo único que logré pensar fue ¿No creo que sea tan malo como matar a alguien?
Antes de entrar detuve a Mat, tomándolo por el hombro, a diferencia mia el solo volteo a mirarme.
— mi respuesta a tu pregunta es por las malas — respondí quitándole la mano de la manija y abriendo la puerta del salón.
Busque a la chica de antes y cuando porfin pude verla serca de un asiento libre, tome mis cosas y hechandole un último vistazo a Mat me fui al otro lugar rezando por qué mi decisión no fuera a causarle problemas a Emma.