[Catter mira a su hermana Mei y le dice que si lo puede acompañar un rato. Ella acepta, pero se le acerca el caballero y le da unas palmadas en la espalda.]
- Caballero: no se te olvide que me debes tres monedas de plata, héroe Catter.
- Catter: Lo siento, caballero. Cuando consiga trabajo, te pagaré las tres monedas de plata que me diste para quedarme en la posada.
- Caballero: Tranquilo, pero acuérdate de pagarme mientras siga con vida. ¡Jajaja!
[El caballero se retira de la sala riendo. Catter y Mei se ríen también y se retiran, diciendo que tienen cosas que hacer. Mientras caminan, Catter le dice a su hermana Mei que necesita mirar si Elena está bien, ya que la dejó en la posada. Ambos salen del castillo.]
- Mei: Dime, Catter, ¿por qué te preocupas tanto por esa niña elfa? Y le diste permiso para que te llamara hermano. Sabes que eso me pone muy brava, ¿no? Dímelo, respóndeme.
[Mei mira a Catter con una expresión seria y enojada. Catter desvía la mirada y le dice que mejor hagan una carrera, y que el primero que llegue podrá pedirle lo que quiera al otro. Mei acepta con una pequeña sonrisa mirando a Catter.]
- Catter: Bueno, Mei, a la cuenta de tres corremos. ¡Uno, dos, tres!
[Ambos arrancan corriendo con todas sus fuerzas a alta velocidad. Al principio, Catter tiene la ventaja gracias a que activa su mejora física, pero Mei también activa su habilidad para igualar la carrera. Catter sigue corriendo con todas sus fuerzas, pero pasan por un restaurante y casi choca con una mesera. Él la esquiva rápidamente, lo que le hace perder el control y chocar contra una pared, dándole mucha ventaja a Mei, que llega primero y gana la carrera.]
- Mei: ¡Gané, gané! Catter, yo gané. ¿Pero a dónde se metió este ahora?
[Mei se confunde al ver que Catter no está con ella. En realidad, él se encuentra desmayado tras golpearse contra la pared. La mesera con la que casi choca lo ayuda y lo lleva adentro del restaurante, donde lo acuesta en una cama de una de las habitaciones de hospedaje. Catter comienza a despertar lentamente y se da cuenta de que está en una cama que no reconoce. Sale de la habitación, aunque con un poco de dolor de cabeza, y ve que está en un restaurante. La mesera que casi choca con él se le acerca.]
- Mesera: Oye, ¿ya te encuentras bien? ¿No te duele el cuerpo o la cabeza? (no tiene ninguna herida, eso es normal).
- Catter: No, no, estoy bien. Ya me siento mejor. ¡Mira, estoy como nuevo! ¡Jajaja!
- Mesera: Menos mal que estás bien. Jajaja. Yo me llamo Sora, que significa cielo.
- Catter: ¡Qué hermoso nombre, Sora!
- Sora: Gracias. Sabes, puedes venir al menos una vez al día y comer algo.
- Catter: Sí, creo que pasaré más tarde y comeré algo. Gracias por tu ayuda, Sora.
[Sora le da una sonrisa a Catter mientras se despiden.]
[Catter mira que ya se está haciendo tarde y sale corriendo hacia la posada, donde lo esperan su hermana Mei y Elena.]