Ian pov
Sabía que estaba siendo descuidado. Ni siquiera sabía qué estaba intentando hacer. No debería haber pedido deberes de duquesa. Y qué quería decir con controlar al personal. Realmente quería golpearme por hablar insensatamente.
Entré a la oficina con tantos pensamientos en mi mente. Sabía que su alteza estaba dudoso, pero no hizo una sola pregunta por lo que estaba agradecido. O de lo contrario ni siquiera sabía cómo responderla.
—Señor Ian.
—Sí, Sylvia.
—Olivia está aquí otra vez —cuando ella me dijo que Olivia quería verme, inconscientemente una sonrisa floreció en mis labios. Aunque sé que no quería verme a mí sino a la persona a cargo de los deberes de duquesa, aún quería ver su cara cuando me viera sentado aquí. Ese día había pedido a los guardias que me echaran, diciendo que era un fraude.
Ahora quería ver su reacción.
—Mi señor, sé que está ocupado, pero esta es la quinta vez que solicita una audiencia. ¿Debo negarla o dejarla pasar? —preguntó y yo asentí.