—Dylan, es la primera vez que conduzco un coche sola. ¿Cómo lo estoy haciendo? Todavía no me siento muy bien, ¿por qué no me acompañas a la siguiente tierra vacante para practicar de nuevo? —propuso Charlotte, señalando la carretera vacía no muy lejos de la villa.
—Dylan echó un vistazo a la carretera. Estaba lo suficientemente oscuro como para que los jóvenes enamorados hicieran algunas cosas íntimas.
—Lo hiciste bien, y definitivamente puedes conducir sola. No más entrenamiento —dijo secamente.
—Charlotte se sintió un poco decepcionada. Veía la esperanza cuando Dylan venía a su casa a cenar cada vez que su abuela lo invitaba, pero él aún mantenía distancia de ella.
—Ella no podía entender qué tramaba Dylan...
* * *
—Al mismo tiempo, Kaiden estaba junto a la ventana en su cuarto de juegos, sosteniendo la pelota en brazos, y observaba la escena abajo. Dio un resoplido de descontento y lanzó la pelota.