—Depende —Lionel no tenía el corazón para herir a su hermana, pero aún así dijo tajantemente—. ¡Ahora el hombre que te gusta está a punto de casarse con otra mujer!
—¡Es solo una propuesta, no un matrimonio! Mientras no esté casado todavía, todavía tengo una oportunidad, ¿no? —Charlotte miró a su hermano con expectación, esperando que pudiera obtener su apoyo.
Lionel frunció el ceño. —Charlotte, ¿quieres decir que vas a sabotear la relación entre Dylan y Savannah? ¡Ni lo pienses! La hija de la familia Rowe jamás debe permitirse convertirse en una tercera persona. Mamá y papá te regañarían si lo supieran. ¿No hay otros buenos hombres en el mundo? ¿Por qué deberías luchar con otra chica inocente por Dylan?