[AN: Recomendación Musical: Sacrifice (con Jessie Reyez)]
Aunque lo habían hecho al revés, en contra de los estándares tradicionales de la primera noche de matrimonio, donde Aila no era virgen, ni era su primera noche juntos. Aila aún estaba nerviosa.
Nerviosa como si realmente fuera la primera noche juntos. Técnicamente lo era... como pareja casada.
También era la primera noche juntos en su nueva habitación. La suite principal de Rey Alfa y Reina Alfa.
—No vayas a destrozar esta —bromeó Aila mientras se detenía frente a la cama.
Damon la siguió y comenzó a besar el lado de su cuello, con las manos a ambos lados de su cintura. Ella ya podía sentir la tensión calurosa y su dureza presionando contra su pantalón, empujando en su espalda.
—Hmm, no puedo hacer promesas, ángel. Te ves demasiado divina así, y ha pasado demasiado tiempo desde que pude tocar lo que es mío —la profunda voz de Damon sonaba más como la de Darius, pero era difícil de decir.