Ningún estudiante saldría.
Por supuesto, Jiang Xun podía correr en la Montaña Wenping porque ¡podía trepar las paredes!
—Gran Jefe, somos estudiantes de tercer año de secundaria —dijo uno de los chicos—. Son las vacaciones después del examen de ingreso a la universidad. Sabía que estabas aquí para grabar un programa, así que vine. No esperaba ver a tantos estudiantes en la puerta del colegio. Todos te vieron y corrieron hacia aquí.
—Entonces, ¿cuando yo estaba en mi tercer año, tú estabas en tu primer año? —dijo Jiang Xun con una sonrisa.
—¡Sí, sí, sí! —Todos asintieron al unísono.
—No vamos a molestarlos mientras graban el programa. Solo observaremos en silencio desde un lado, ¿está bien? No hablaremos más. —Temiendo que el equipo de producción los echara, los estudiantes rápidamente hablaron primero.
—Esta es tu escuela —dijo Shuli con una sonrisa—. Estamos aquí ocupando tu lugar. ¿Cómo vamos a echarte? Pueden mirar.
—¡Gracias, director! —Todos lo agradecieron felizmente.
