—Bueno, entonces —Lu Qi fingió morder la bala y dijo de mala gana—. Incluso pretendió ser muy amable y considerada. Yo también puedo entender tus dificultades. Entonces serán 1.5 millones de yuanes. Por favor, intenta poner tanto dinero como puedas en la producción.
Hizo que sonara como si realmente fuera por su buena voluntad.
—Claro, muchas gracias por entender. Haré que el abogado redacte un nuevo contrato ahora mismo y te lo enviaré por correo —Ji Cheng se burló internamente, pero su voz seguía siendo normal, sin poder notar ninguna diferencia. Se sentía como si realmente estuviera teniendo una conversación muy feliz y agradable con ella.
—No hay necesidad de pasar por tantas molestias. ¿Cómo no iba a creerte? Volaré directamente al equipo y lo firmaré en el lugar —Lu Qi se rió secamente.
