—¿¡A dónde crees que vas!? —Amelia gritó con una voz infantil. Se lanzó hacia adelante y pisó la cara.
—¡Chirrido! —La cara dejó escapar un grito y fue aplastada al instante.
Amelia resopló y colocó sus manos en la cadera condescendientemente —Corre. ¡Sigue corriendo si te atreves!
Emma, William y Harper: "…" ¡Su hermana era tan valiente!
William, Harper y Emma miraban a Amelia con admiración.
Amelia pisaba la cara y no podía liberarse por más que lo intentara. Dejó salir un grito agudo. Amelia pellizcó sus dedos y gritó —¡Fuego!
Al segundo siguiente, una bola de fuego salió de las yemas de los dedos de Amelia y quemó la cara hasta convertirla en cenizas.
William: "¡!"
Harper: "¡¡!"
Emma: "¡¡¡!"