Me contaron que al nacer, nací muy bajo de peso, a diferencia de mi hermano que nació sano, pues yo nací muy flaco, tanto que el doctor solo me daba un mes de vida.
Parte 1
Mi madre a los 2 meses y medio termino contando lo del embarazo, Chatita no lo tomo muy bien, y menos por la noticia de que Crescencio no se iba a hacer responsable.
Chatita era una mujer ya mayor, ya con canas y con una mentalidad de que la mujer debe ocuparse para el hogar, a tenido la desafortunada suerte de que sus hijas han trabajado porque ninguna a escogido un buen hombre, todas han sido madres solteras, y ultima cereza del pastel, los hijos que tienen han Sido de diferentes hombres.
Ella pensó que su nietas serían diferentes, pero mi madre ya iba por ese camino también.
Enojada, descontroladamente, corrió a Abigail de su casa, eso sí, no le permitió llevarse a Jefte.
Mi madre me contó que en ese momento su mundo se callo, ya no tenía a su padre, su madre bologica había regresado a trabajar por lo que no se enteró de lo ocurrido, su madre Chatita le dió la espalda, y sus hermanos no comentaron nada, y por último su hijo no se iría con ella.
Ella solo tenia algo de dinero, cuando salió de la casa se fue directo a un hotel, al día siguiente salió desde temprano a buscar trabajo, pero por el embarazo le era muy difícil encontrar trabajo.
Los días pasaron, no encontraba trabajo, el dinero se iba terminado, después de un tiempo ya no pudo pagar la habitación, no le quedó más remedio que vivir en la calle.
Ya en la calle, el dinero de la comida también se terminó, ella ya hambrienta, sin fuerzas solo bagaba, si antes no pudo conseguir trabajo, ahora que tenía más tiempo de embarazo y que no tenía buena higiene, se le terminó complicando más.
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Parte 2
En la calle Abigail pasaba frío, hambre, y más cuando comenzaron los tiempos de lluvia.
No volvió a pensar en buscar a Crescencio, pues tenía en mente que estaba sola.
En las noches frías, solo miraba el cielo, en una banca Serca del parque, observando el cielo y pensaba en su Papá, pues si no hubiera fallecido el nunca hubiera permitido que la corrieran.
Un día Abigail se encontraba pidiendo limosna, ya tenía 3 días sin comer absolutamente nada, ella no se preocupaba por ella, si no por el bebé que iba en camino.
En eso una chica de pelo largo, con un gran pecho, algo llenita, se acercó a ella, termino siendo una amiga de la escuela, que reconoció a Abigail, su nombre era Estela.
-¿Abi?, ¿eres tu?- dijo estela con mucha duda pues no se parecía nada ala mujer que ella conoció alguna ves
Abigail con pena y vergüenza contesto -Si, soy yo, hola Estela-
-¿Pero que te paso mujer?-
Abigail contó los hechos de lo ocurrido, Estela no podía creer que le dijera Abigail que estaba embarazada, pues no sé le notaba, después de un rato se dió cuenta que no se le notaba por falta de alimentación.
Estela invitaría a Abigail a comer, después de eso la invitaría a su casa para bañarse, le prestaría ropa, y después de una charla entre Estela y su Madre Mirella llegarían a una conclusión.
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Parte 3
-Abigail te puedes sentar, quiero platicar contigo- dijo Mirella la madre de Estela, una mujer algo mayor, de pelo negro y corto, con unos ojos chicos y tenía casi la misma figura de su hija
-Si claro ¿que pasa?- dijo Abigail con pena
-Mi hija me comentó de la situación, ¿Cuánto tiempo llevas de embarazo?-
-Ya 6 meses y medio señora-
-¡Dios mío!- dijo muy sorprendida -no se te nota la panza, debo suponer que es por la falta de alimentación-
-Supongo-
-Bueno, pues Abigail, eres bienvenida a mi casa por si gustas quedarte, aquí no te faltará de comer, minimo frijoles siempre va a ver-
Abigail sorprendida, le dieron ganas de llorar, simplemente le lleno de alegría estar bajo techo, al mismo tiempo un poco de remordimiento a sus familiares que no la apoyaron llego, pues ella decia ¿Cómo era posible que la madre de una amiga le de un techo, mismo que su abuela le quitó, corriendola.
-Eso si, no te pediré que trabajes, está claro que en poco tiempo no podrás ya moverte con libertad- dijo Mirella -Pero si quiero que me ayudes con los deberes de la casa, a tenerla limpia más que nada-
-Si señora está claro, yo la ayudaré a todo lo que pueda- dijo Abigail con agradecimiento
-Y no me digas señora, hablame de "tu", o dime Mirella-
Y así fue como Abigail termino en otro hogar que no era el suyo.
En esos días Abigail ayudaba al quiaser, lavaba los trastes, ayuda a Mirella con la comida, entre otras cosas.
Estela aún estudiaba la universidad pues al igual que Abigail solo tenía 23 años. Aunque ya le faltaba poco para su carrera.
Ella tenía un hermano menor, de unos 20 años más o menos, claro empezó a sentir atracción por Abigail, aunque ella no tenía ningún interés en el.
Pasaron los meses y el trataba de conquistarla, todos en esa casa ya sabían sus intenciones, por lo que Mirella se opuso a algo amoroso entre Abigail y el.
Al darse cuenta que Abigail realmente no le daba alas, se tranquilizo un poco, pero el miedo de que algo entre ellos fuera a pasar, quería correr a Abigail, pero el tiempo ya había pasado y Abigail ya llevaba 8 meses de embarazo, ademas de que ya estaban en diciembre, épocas de convivencia Familiar, por lo que lo dejo pasar.
Eso sí al platicar con Abigail de la situación le dejo claro, que después de aliviarse ya debía buscar su propio camino, Abigail comprendía la situación pues tal cual, ella ya debía de hacer su vida, aún le faltaba un mes por lo que ese tiempo tenía para buscar donde vivir.
Pero... Justo el 21 de diciembre alas 3:00 am, empezaron las contracciones, el bebé se habia adelantado, rapido Mirella la llevo a un hospital, y Estela se comunico con la familia de Abigail, justo en ese dia, Matilde ya iba de regreso ala casa.