Se dice que la gente vive por vivir, pero realmente hay personas que se aferran ala vida, ese fue mi caso, sin explicación más, me aferre a vivir, inconscientemente obviamente, o tal ves alguien con más poder me ayudó, no lo sé, pero si viví cuando no debía supongo que debe ser por algo.
Parte 1
Mi madre me contó que ella termino muy cansado durante el parto, por lo que se quedó dormida, ella sabía que podía cargar a su bebé después de descansar un poco.
Cuando despertó vio a mi Abuela Matilde frente a ella, rápidamente se sorprendió y le pregunto, -¿Que haces aquí, como llegaste?- Matilde le explicó que fue Estela la que se comunicó con ella.
Rápidamente Matilde se acercó y la abrazó, pidiendo disculpas por no haber estado en ese momento donde Chatita la corrió, pero que a partir de ese momento tendría todo su apoyo.
Mi madre la abrazó, lloro un poco, le dió las gracias, y pregunto por mi...
Matilde un poco nerviosa y triste le comento que el doctor le dió una noticia horrible, al parecer el bebé nació muy bajo de peso, tanto que se dificulta asta el respirar.
En eso el doctor entro, Mi madre pregunto por mi, en eso una enfermera también entro conmigo en brazos.
-Hija, lamentablemente el bebé está muy bajo de peso, se le dificultaba el respirar, pero parece que ya puede, pero por su peso, y por falta de muchas vitaminas y con una defensas muy bajas....- Al doctor se le cortaría la voz -Disfruta a tu bebé un mes hija, lo siento mucho-
Abigail sintió como un disparo en el pecho, no podía sacarse de la cabeza que era su culpa por no cuidarse, se soltó a llorar mientras pedía a su bebé, al cargarlo solo lo miro, un bebé muy flaco, y morenito, sintió como si perdiera ella misma la vida.
Matilde abrazo a su hija y el doctor se retiró, después de todo eso, ellos salieron del hospital y afuera estaba Abraham, Estela y Mirella esperando noticias.
Matilde le agradeció todo a Mirella y Abigail hizo lo mismo
-Nose como agradecerle todo a usted y a Estela, enserio que muchas gracias, se que ahorita no estoy para hacer favores, pero en un futuro si necesita algo, no duden en buscarme- les dijo ella
Matilde comento que se llevaría a mi Madre nuevamente a su casa, y que ahora ella cuidaría de ella y de mi
Mirella y Estela abrazaron a Abigail junto a mi en brazos y nos desearon mucha suerte, y así fue como nos dirigimos de nuevo ala casa de Chatita.
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Parte 2
Al llegar Abigail entro algo apenada y triste. Miriam y Chatita estaban esperándolos en la sala.
-Haber préstame ala criatura- dijo Miriam estirando los brazos.
Abigail dudo un poco, pues Miriam tenía el problema de ser racista, y Ezequiel era un niño morenito, aún así debía platicar con Chatita, por lo que no le quedó de otra en entregar a su hijo.
De inmediato Míriam y Abraham se retiraron con el bebé, dejando en la sala solo a Chatita, Matilde y Abigail, pues aún tenía cosas que atender
-Chatita me comentó lo sucedido, ¿Crescencio no sabe nada de ti entonces?- dijo Matilde mirando a Abigail
Abigail con la cara agachada respondió con una voz baja -No quiere saber nada el-
-Ya veo, aún así, creo que no es justificación que la corrieras madre- dijo Matilde ahora en dirección a Chatita
Chatita se levantó y se acercó a Abigail, se puso de rodillas para estar a su nivel y la abrazó
-Perdoname hija, el coraje me sego, no sabía lo que hacía, y cuando me arrepentí, intenté buscarte, pero no te encontré por ningún lado, termine buscado asta a Crescencio, después me dijo que no sabía nada de ti y le plante una cachetada y continúe buscándote, yo sé..., yo sé que no merezco tu perdón, y que por mi culpa tu bebé está muy malo, pero te juro que voy a apoyarte a partir de ahora- dijo Chatita llorando, se le notaba una cara de arrepentimiento
Abigail la abrazó y empezó a llorar, -Un mes.., solo un mes tendré a mi bebé, mama-
-No hija, estoy segura de que ese bebé se salvará, algo me lo dice-
Después de una escena de puros "perdón" y llorar, todos se sentaron en la mesa para cenar, Abigail amamantaba a su bebé, el que estaba muy apegado a el era Jefte, pues el sería el hermano mayor y quería ser el mejor, repitiendo eso durante toda la cena.
Abigail regreso a su habitación, claro Jefte fue con ella, para descansar después de un largo día.
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Parte 3
Ya un poco tarde Abigail se levantó al baño, sin hacer nada de ruido para no despertar a sus hijos, al pasar cerca del comedor escucho una conversación, parecía ser Chatita y Miriam platicando.
-Pues para colmo, el niño salió prieto- dijo Miriam
-¡Miriam, basta!- dijo Chatita sería
-Esque mamá, su primer hijo , güerito y gordito, y el segundo prieto y flaco, si que le fallo y mucho-
-Deberias dejar de decir esa palabra, recuerda que tú papá Valente también era algo morenito-
-Hay mamá, Pero que comparas, para colmo toda la cara del wey ese-
Abigail solo escucho, al no soportar las palabras de su hermana decidio mejor ignorarla y volvió a su habitación.
Pero la conversación aún continuaba
-Aunque si se parece mucho a su papá, hay algo en ese bebé que también me recuerda a Valente- dijo Chatita
-¿Te recuerda a el?- respondió Miriam
-Si, además de...- se detuvo Chatita al querer hablar de algo
-¿De...?, anda mamá dime, ¿Hay algo que aún no me has contado?-
-Hija dirás que estoy loca, pero tú papá Valente vino a regañarme en un sueño hace ya unos meses después de que corriera a Abigail-
-¿Que dices mamá?- dijo Miriam levantándose y muy dudosa
-Me dijo que estaba haciendo mal, y que ese bebé necesitaba nacer bien, nose porque, Pero Valente parecía que quería que el bebé viviera, y si... Talvez, el bebé sea el, se que es una locura, pero lo que si se, es que ese bebé está apunto de morir por mi culpa, y no pienso fallarle a Valente, así que cuidare bien de mi nieto, porque esa era la voluntad de Valente-
-Enserio enloquesiste madre- dijo Míriam mientras se retiraba
Chatita, se quedó un poco más a pensar, y luego se fue a dormir, esperando que fuera un nuevo día para empezar a remendar su error.