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Chapter 23 - Reencuentro

Primera parte – Distraerse. 

Quedemos de juntarnos con Asuna en la fuente dentro del pequeño Mall de Arekkaido. 

-Creo que esa niña nuca llegara a la hora. 

Akari me miraba algo extrañada. 

-¿Hikaru, no te da pena que te vean hablando solo? 

Mire a mis alrededores, había mucha gente yendo y viniendo de un lado para otro, algunos saliendo de Top model, tienda de ropa que era la más cercana de nosotros en este momento. 

-Me da igual si creen que estoy loco, tú estás aquí conmigo, eso es lo que importa. 

-No creo que me guste mucho que no te importe tu alrededor, pero por otro lado me alegro, Hikaru aun siento que puedo sentirte desde el abrazo. 

-Akari, siento que todo es muy injusto, pero todo lo que nos ha pasado en este corto tiempo, cada instante que nos ha hecho acercarnos lo atesoro 

Ella hizo como si su cabeza hubiera golpeado mi hombro y se quedó ahí un rato. 

-Chicos perdonen la tardanza, pero Asuna 2.0 ya está aquí. 

Asuna se había cambiado de ropa, ahora traía un estilo sacado de un juego de éxito llamado Ciberpunketa 3088, su vestimenta se basaba en el personaje Lebeeca. 

-Un momento Asuna ¿esa no es la vieja chaqueta de bombero de tu padre? 

-Te disté cuenta, si como ves la ajuste a mi tamaño y le hice unos cabios en clase de vestuario, me dieron una muy buena nota por esto, así que ves el primer diseño original de mi persona. 

Asuna estaba bien orgullosa, el resto bueno como lo digo, tenía media abierta la chaqueta, por debajo solo llevaba un bikini negro que pedía auxilio por las tetas de Asuna y un pantalón que, hacia juego con la chaqueta, que menos mal no copio entero del personaje de videojuego porque si no Asuna estaría sin pantalones. 

-¿Hikaru estas bien?, tienes los ojos como si hubieras llorado, de hecho, los tienes algo rojos e hinchados. 

-No es nada, no sabemos cómo, pero pudimos abrazarnos con Akari. 

-Eee se pudieron tocar, yo también quiero abrazos. 

Asuana intento abrazar a Akari, pero paso atreves de ella, a lo que Akari respondió pegándole una cacheta en los senos a Asuna que las terminaba atravesando. 

-No me gusta que me traspasen Asuna. 

-Lo lamento Akari, pero podrías hacer eso de nuevo. 

-Con gusto. 

Ella lo hizo nuevamente, después de unos intentos comprendí porque Asuna pidió que la golpeara de nuevo. 

Akari le estas moviendo la ropa. 

-Si se siente como pequeños toquecitos que me da mi ropa al moverse. 

-Akari tu entrenamiento está dando frutos estas siendo capaz de tocar objetos más fácilmente - dije orgulloso de Akari, mientras veía como aún seguía intentando golpearle. 

-Akari no te dije esto en la escuela, pero te ves muy bonita sin esos anteojos que antes ocupabas, como los hiciste desaparecer – dijo Asuna 

Akari se sonrojo un montón. 

-Cuando estuve practicando también me di cuenta que podía hacer desaparecer o aparecer mi ropa, miren. 

Los lentes de Akari habían vuelto aparecer por un instante, luego hizo que volvieran a desaparecer. 

-Entonces porque no te pones una ropa más cómoda. 

-No puedo, solo puedo hacerlo con lo que llevaba puesto cuando ya saben... 

-Bien no pensemos en eso, porque no comemos unos completos y conversamos de cualquier cosa que no sea el asunto de Akari, creo que a ambos nos haría bien pensar en otra cosa de vez en cuando, y no conozco mejor persona para eso que Asuana. 

Asuna hizo un saludo militar. 

-Si señor acepto la misión. 

Fuimos a la tienda del "engordador" que estaba en el patio de comida del tercer piso, estuvimos hablando de tonterías por mucho rato, de películas, sobre todo de películas viejas que tanto me gustaban a mí, o de cosas paranormales, incluso tonteamos de poner en el futuro un videoclub juntos, también charlamos de algunos animes que habíamos visto, incluso de hasta ropa llegamos a conversar. 

Fuimos a varias tiendas, vi varia ropa que me gusto, pero que no podía comprarme, aun así estaba animado, incluso hasta Akari, se puso a ver ropa de la marca que solía ocupar mi hermana Kaede, la mayoría era ropa bastante reveladora o vestidos que se acentúan muy bien al cuerpo, no pude evitar imagina a Akari con esa ropa, esos pensamientos hacía que me excitara, pero intentaba evitar que Akari se diera cuenta, además llevaba tiempo sin poder hacer eso, al estar las 24 horas con Akari, y el otro tiempo con Emi no tuve tiempo para consentirme. 

Por desgracia la que si se dio cuenta de lo que pensaba era Asuna, así que cuando Akari se alejaba un poco para ver alguna prenda que le gustaba, Asuna aprovechaba de molestarme. 

-Así que Hikaru quiere hacer cosas lascivas con su novia, pensé que serías más conservador. 

-No moleste Asuna, sabes de sobra que no soy conservador, y no creas que lo que digo lo hago con orgullo. 

-Lo se aún recuerdo cuando me espiaste hace 2 años cuando me cambie de ropa. 

-Nunca te espié, tú te sacaste la polera frente a mi, pervertida y más encima tuviste el descaro de gritar. 

-Jejeje bueno shi, aun así recuerdo que al menos a tú compañero si le gusto la vista, después de eso no me hablaste por 3 meses, estuviste muy enojado. 

Estaba rojo por la vergüenza del recuerdo. 

-Tampoco soy de acero, además claro que me enojé, Baki pensó que me quise propasar contigo, estuvo molesto un buen tiempo conmigo hasta que le contaste la verdad. 

Ella se rio y me zarandeo el pelo, luego comenzó a frotar su cabeza en mi brazo, como si se tratara de un perrito que quiere atención. 

-Asuna podrías de dejar de coquetearle a mi novio. 

-No estaba haciendo eso Akari no creas... 

-Fuiste pillada con las manos en la masa Asuna. 

-No me vendas así Hikaru, nooooo. 

Asuna hizo un gesto algo melodramático como si se desfalleciera, gesto que no pudimos evitar no reírnos. 

 

Parte 2 – Con final amargo 

Ya era de noche, estábamos en la sección del mirador del Mall que mostraba toda la ciudad, enserio la ciudad era bella de noche. 

Habíamos quedado de esperar aquí a Emi. 

-Oigan chicos no les gustaría pasar la noche recorriendo la ciudad. 

-De hecho, a mi si me gustaría, pero Emi no me dejaría, no al menos hasta que sane. 

-Creo que a mi también me gustaría, la ciudad es muy bonita, quiero conocer más de esos colores que vimos esa noche. - Dijo Akari mientras miraba por el monocular. 

-¿Entonces por qué no vienes conmigo Akari? 

Akari me miro, estaba seguro que a ella le encantaría hacerlo. 

-Adelante Akari porque no vas con Asuna. 

-Gracias Asuna, pero voy a pasar, con Hikaru prometimos que íbamos a salir de noche juntos, quiero tener una salida con él. 

-Akari quiero besarte. 

-Lo sé, pero aún no se puede. 

-Yo podría besar a Hikaru por ti Asuna. 

Tanto Akari como yo nos quedamos en silencio unos segundos, mientras Asuna estiraba sus labios. 

-Hikaru hazlo 

Seriamente le dije. 

-¿En sus senos? 

-No en el cabeza tonto. 

Le di un pequeño manotazo a Asuna en la cabeza. 

-Eso por atrevida. 

-Y por intentar seducir a mi novio – Dijo Akari más divertida que molesta. 

-Solo estoy jugando, Akari se bien que Hikaru solo te ama a ti. 

-Bueno entonces, yo me iré a recorrer la ciudad como siempre cuídense duerman bien, y tú descansa Hikaru, enserio cuídate. 

Ambos nos despedimos de Asuna. 

-Oh Asuna que tal... 

Emi había llegado. 

Hikaru ¿qué le paso a Asuna? 

-De que hablas nos acabamos de despedir. 

-Hermano ella estaba llorando. 

Nos miramos con Akari, no me gustaba ser la razón de llanto de Asuna, incluso Akari se sintió mal y me lo hizo saber. 

-No te preocupes Emi mañana hablare junto a Akari con ella. 

-Entonces no me preocupare, ahora ¿qué crees que haces? 

Emi me tiro de la oreja, cosa que me dolió bastante. 

-Te pido disculpas, pero necesitaba distraerme, al igual que Akari, si estuviera en la casa estaría pensando todo el rato en cómo solucionar el asunto de ella. 

-Aun así, tú tienes que cuidarte, así que nos vamos directo a la casa, y tú Akari no creas que por que no te puedo ver te vas a librar de esta, tienes que hacer que este idiota piense bien las cosas, no alentarlo, existe la posibilidad que pronto estemos viviendo los tres juntos así que necesito que me empiecen a hacer caso. 

-¿Los tres? 

-Si aun no podemos solucionar lo de Akari para ese entonces, ella supongo que se vendrá con nosotros. 

Abrace a Emi. 

-Emi tanto yo como Akari te agradecemos, ella está llorando porque la hiciste feliz. 

-Ya les dije cuenten conmigo, pero hablo enserio tienen que hacerme caso en lo que les digo. 

-Lo intentaremos. 

-Sabes que eso no me deja tranquila, ya vamos es tarde y estoy muerta de cansancio. 

-Emi se viste muy distinto a como lo hace en casa, parece ropa que ocuparía un mesero en un bar caro... disculpa si lo que estuvo fuera de lugar Hikaru. 

-Descuida mi hermana suele vestirse de manera masculina cuando está fuera de casa, ¿no es así Emi? 

-¿A qué viene eso?, a si es verdad Akari es la primera vez que me ve con esta ropa puesta, desde niña sé que he tenido un muy buen cuerpo del que estoy orgullosa, pero llama mucho la atención de personas imbéciles, así que para dejar de tener problemas decidí ocupar esta ropa, además es más cómoda y me gusta. 

-Ahora entiendo, de hecho, Emi tiene el cuerpo para ser una modelo sensacional. 

Supongo que sí Akari. 

-Al menos dilo sin ponerte rojo, novio infiel. 

Ella se estaba burlando de mí. 

-¿Qué dijo Akari que te puso rojo, dime acaso están Flirteando. 

-Ella dijo que tienes un cuerpo muy bueno para ser modelo. 

Al final la que termino más roja de todos fue Emi. 

Ya estábamos por salir del Mall, esperábamos al taxi que pidió Emi por teléfono. 

-¿Hikaru?, ¿Emilia? 

Me quede helado, estaba tiritando, el miedo se apodero de mí, deseaba no estar aquí en este momento, mire a Emi, y ella estaba igual que yo o incluso peor, le agarre la mano como si volviera a ser un niño que necesitaba que me sacaran de aquí. 

Aun ni siquiera veíamos a la mujer que nos habló, pero escuchaba sus pasos acercándose por nuestras espaldas, reconocía esa voz que no había escuchado desde hace 7 años. 

-¿Son ustedes en verdad? 

-Disculpe creo que se confundió de personas, ellos no se llaman así. 

-Lo lamento niña, discúlpenme los confundí, se parecían a mis hijos. 

Habíamos sido salvados por Akari, ninguno de los pudo ni siquiera decir una palabra, aun estábamos sufriendo por lo que acaba de suceder, de hecho, ni siquiera me había planteado como Akari pudo comunicarse con mi progenitora.