Punto de vista de Drake Helkar
Oscuridad, alegría, dolor, miedo, rabia, gozo y muchos otros sentimientos más atacaron mi corazón cuando entré al cuerpo del bebé.
Parece que por fin pude calmarme… Pensé después de llorar intensamente por varios minutos. Creo que desde el accidente no lloraba de esa manera….
Con los recuerdos frescos de todo lo que había pasado me dispuse a investigar un poco. Al abrir los ojos me di cuenta de que estaba en una cuna de paja, y al voltear a un lado me encontré con una niña parada no muy lejos de mi, ella, al estar mirándome tan fijamente hizo que me pusiera un poco incomodo.
Pero… ¿Quién es esta niña? No recuerdo haberla visto antes en la tienda. La misteriosa niña tenía un brillante cabello blanco que con el fuego de las lamparas de las tiendas lo hacía parecer dorado, además, tenía unos hermosos ojos similares a los de Bernal.
"¿Verdad? Hermanito." Dijo de repente rompiendo mi admiración al verla. Espera… ¿Qué dijiste?
"Por ahora descansa Drake, mañana será un día ajetreado." Dijo acariciándome suavemente la cabeza antes de irse a un lado de la tienda, a guardar algunas cosas que estaban tiradas por el suelo.
Así que ella es mi hermana, me pregunto cómo se llamará. Pensé con curiosidad. Además, ella me llamó Drake, así que… ese será mi nombre en este mundo? Creo que esta bien, no suena tan mal.
¡Es verdad! ¿Y esta niña no será el niño con capucha que vi cuando aún no renacía? Pensé recordando los momentos antes de renacer. Debe de ser eso, como tenía una capucha que cubría su pelo y rostro pensé que era un niño.
Llegando a esa conclusión surgieron otras preguntas, pero las ignoré por el leve pero repentino dolor que nació por encima de mi corazón.
Este dolor…. Cierto, si la información que me transmitió Bernal es correcta, este dolor debe ser producido por mi corazón de maná. Pensé mientras mi cuerpo sé ponía un poco inquieto. Ahora que lo pienso, es un poco raro este nuevo órgano que tiene una función similar a la de un corazón.
Me acomodé entre las mantas sobre las que estaba y rápidamente me empecé a sumergir en mi interior, para ver exactamente lo qué estaba pasando dentro de mi corazón de maná.
Según Bernal, el bebé murió porque no desarrolló completamente su núcleo. Pensé mientras recordaba sus instrucciones para solucionarlo.
Además, me dijo que lo reparara antes de que el maná que me habían dado se acabará. ¿Será que las personas en este mundo mueren si no tienen nada de maná en el cuerpo? Me pregunté sin esperar una respuesta.
La oscuridad sé fue apoderando de mí, a medida que mi conciencia se sumergía dentro de mi corazón de maná, causándome una extraña calidez.
Gracias a todo lo que me transmitió Bernal esto será pan comido. Pensé alegre por la ayuda que tenía.
Con mi conciencia ya dentro pude ver varios fragmentos transparentes esparcidos por toda la oscuridad del lugar, como si se trataran de grandes cristales rotos. Wow, estar aquí dentro es como estar en otra dimensión.
El maná que había dentro se podía ver como un gran cielo estrellado, similar a los que se mostraban en los animes de mi mundo pasado. Pero de entre todas las luces que habían había una que destacaba por intensa luz y tamaño.
Seguramente ese debe de ser el Fragmento de la Chispa Divina de Bernal. Pensé antes de sumergiéndome nuevamente en la información de Bernal para investigar un poco más al respecto.
Después de buscar por un rato pude encontrar algo de información relacionada que logró desviarme de mi objetivo. Ah… sé que es prioridad reparar mi núcleo, pero antes necesito resolver estas dudas.
Hace mucho mucho tiempo un Verdadero Dios visitó este mundo, a este Dios le agradó tanto este planeta que ayudó a sus habitantes organizándolos y enseñándoles varias cosas. Antes de irse nuevamente al espacio este Dios les dio algo a cada líder de una raza. Esto que les dio se conoció como la Chispa Divina. Pensé sin entender mucho lo que estaba diciendo en mi cabeza.
Al buscar información de la Chispa Divina descubrí más cosas interesantes. Entonces, la Chispa Divina te permite usar algunas habilidades de los Dioses sin que tu cuerpo se destruya en el proceso? ¡Espera! Eso significa que en verdad ¿Existen Dioses?
Bernal era uno de esos líderes en aquel tiempo, por eso, después de que aquel Dios abandonara el planeta estallaron varias guerras por el poder de las chispas. Por parte de Bernal tuvo que separar su Chispa Divina en 10 fragmentos. ¿Por qué? Ni idea. Lo que sí sé es que 9 de esos fragmentos los ocultó en objetos o seres vivos….
¡Mie*da! ¡Ahora entiendo! ¡El Bernal con el que hablé quería que reuniera todos los fragmentos de su chispa! ¿Pero por qué? Acaso al hacerlo él revivirá o algo parecido? Pensé con dudas por la falta de información.
Como sea, no me importa lo que quería exactamente, porque después de todo él ya está muerto, y no me puede obligar a hacerlo. Pensé despreocupadamente. Aunque siendo sincero si me intriga saber que pasará si reúno todos los fragmentos, pero por ahora lo mejor será investigar eso después.
Nuevamente al buscar entre mis cabeza encontré un poco más de información. Al parecer Bernal dio uno de los 10 fragmentos a su primogénito, junto con un poco de su maná en caso de que el Fragmento de su Chispa se perdiera.
Espera ¿Eso significa que el Bernal con el que hablé ni siquiera era el real? ¿Sólo era maná? Pensé curioso por las cosas que podían hacer con el maná en este mundo.
Este Fragmento de la Chispa se fue pasando de primogénito a primogénito, y así se volvió una tradición hasta pasar muchas generaciones. Pensé antes de volver a centrarme en mi corazón de maná.
Esta un poco loca la historia de este mundo. Pensé mientras levantaba lentamente mis mano.
Todo esto me recuerda a seguir la receta de un plato, mientras no me desvié todo saldrá bien…. Pensé optimistamente.
Los cristales que estaban esparcidos por el lugar eran mi núcleo de maná, así que lo primero que me dispuse a hacer era reparar su estructura.
Siguiendo un extraño sentimiento que tenía en mis memorias los empecé a reunir y fusionar, justamente sobre el fragmento de Bernal. Todo el proceso siguió hasta que después de unos segundos pensé que ya tenía suficientes cristales como para empezar a atraer el maná esparcido que había.
Atraerlos no era algo difícil, porque solo tenía que darles una orden fija con mi voluntad para controlarlas.
Al seguir con ese proceso me di cuenta de algo que me preocupó hasta el alma. Algunos pedazos de mi núcleo empezaron a juntarse en otro punto, haciendo que el maná tuviera dos opciones para fusionarse.
Maldición, creo que eso es porque empecé a atraer el maná antes de reunir todos los fragmentos ¡Soy un estúpido!
Sin saber como detener todo, la desesperación me empezó a ganar al ver como los pedazos de cristal se fueron funcionando con el maná hasta crearse dos esferas de distintos colores.
La primera esfera parecía estar llena de oro líquido, causando un pequeño brillo dorado que la hacia destacar sobre la otra. Por otro lado la segunda esfera era más pequeña, con un líquido violeta con algunas líneas negras y rojas.
OK… creo que eso no tenía que suceder. Reflexioné mientras el leve dolor que sentía al principio iba disminuyendo. En teoría, cada persona tiene un núcleo en su corazón de maná, este núcleo lo que hace es purificar el maná del exterior para que después el corazón de maná lo bombee al resto del cuerpo.
Pero… ¿Por qué veo dos núcleos ahora mismo? Pensé mientras miraba las dos esferas flotando estaban en frente mío. El fragmento de Bernal está en el dorado, supongo que por eso debe de ser más grande que el otro.
Maldición, no sé qué consecuencias tendrá todo esto en un futuro, lo mejor será investigarlo más adelante, por ahora los dejaré así, porque parece que ambos están estables. Pensé antes de que mi conciencia volviera a la realidad.
Abrí los ojos solo para encontrarme nuevamente con el techo de la tienda. Estas últimas 24 horas fueron muy cansadas, ahora por fin puedo descansar….
Mi joven cuerpo al estar cansado y con sueño dejé se relajara. Pero… me alegra tener una segunda oportunidad. Está vez… está vez aprovecharé cada momento…. Haré lo que en mi vida pasada no pude, lo que por cosas del destino fui un tonto al no hacer.
Después de unos minutos meditando y recordando algunas escenas de mi vida pasada lentamente me quedé dormido.
…
"—os irnos antes de que Boris envíe más hombres."
¿Eh? ¿Qué está pasando? Pensé aún medio dormido al escuchar una voz masculina muy cerca de mi.
Aún con los ojos cerrados intenté ponerme de pie para ir a la cocina a por un poco de agua, pero al hacerlo solo sentí como una pared me impedía el paso.
¡Cierto! Pensé mientras abría de golpe los ojos. "Pero Padre… ¿Madre estará bien si viaja después del parto?"
Maldición, por un momento pensé que estaba en mi departamento….
"Entiendo tu preocupación Zoe, pero mientras estabas dormida tu padre me curó con magia." Dijo una suave voz joven.
Intenté sentarme en mi cuna para ver que estaba pasando, pero al hacerlo se dieron cuenta de que estaba despierto.
"Drake ya está despierto ¿Me lo puedes pasar Zoe? Quiero verlo." Dijo una belleza acostada sobre una cama.
¡Wow! ¿Quién es ella? Pensé viéndola sutilmente mientras la niña que decía ser mi hermana de ayer se acercaba a mi. Es muy hermosa….
Al ser cargado fui llevado a los brazos de la bella mujer, haciendo que me pusiera nervioso. Por su aspecto parece tener unos 21 años, pero algo me dice que tiene más edad que esa.
Tenía un hermoso pelo carmesí, que hacía juego con sus ojos color verde oliva. ¡Eh! ¡Espera! ¿Ti-tiene cuernos? ¿De qué raza será? Me pregunté al observar los dos cuernos negros situados encima de su cabeza.
"Aquí tienes, madre." Dijo la niña antes de entregarme a sus brazos. ¿Madre? ¿Qué? ¡¡No!! ¡Espera! ¿¡Eso significa que también esta bella joven es mi madre!? Pensé asustado y arrepentido por la forma en la que la miré hace unos segundos.
¡¡¡Ahh!!! ¿¡Cómo puedo pensar eso de mi madre!? ¡Pero qué rayos me pasa!? Pensé antes de empezar a sentir un pequeño escalofrío en mi espalda.
"Me alegra ver que estás bien." Dijo la mujer revelándome una genuina sonrisa antes de abrazarme con dulzura.
"Entonces sin más preocupaciones partimos dentro de media hora" Dijo el hombre de ayer después de esperar unos segundos. "Mientras tanto, Zoe ayudarás a tu madre en lo que te pida." Dijo el hombre antes de salir de la tienda.
"Entiendo padre." Dijo mi hermana haciendo que confirmara lo evidente. Como pensaba, ese hombre es mi padre…. Pensé un poco incómodo.
"Zoe, ve a alimentar a Mork y Ness, necesitarán estar listos para el largo viaje que tendremos, yo me quedaré un rato con tu hermano para verlo a detalle." Asintiendo, mi hermana salió de la tienda sin decir una palabra, dejándonos a mi madre y a mí solos. ¿Eh?
"Mi pequeño Drake, me alegra que estés bien." Dijo acariciándome suavemente la cabeza. "En la mañana mientras dormías sentí algo raro con tu corazón de maná, así que pensé que te había pasado algo malo."
Uy si supiera…. Pensé dentro de mi cortando el bonito momento.
"Cierto, debes de estar con hambre." Dijo antes de levantarme con sus delicadas manos y ponerme en una posición que reconocía.
¡Espera! ¿Será posible? Pensé un poco ansioso. No no no, esto es algo normal para un bebé, no tengo que alterarme o sospecharán!
Cerrando los ojos lo suficiente como para nublar mi vista empecé a succionar mi alimento, después de que mi madre me mostrara una de sus poderosas armas.
¡No pienses en nada! ¡No pienses en nada! Gritaba repetidamente dentro de mi cabeza. "¿Eh? Se ve que estabas hambriento Drake." ¡¡¡AHHH…!!!
Después de unos minutos de tortura mental mi madre arregló su ropa y me dejó por un momento sobre su cama antes pararse y cargarme nuevamente.
Eso fue… Pensé mareado. Me-mejor no digo nada. Ella caminó lentamente hasta mover con sus hermosas manos el pedazo de tela que servía como puerta.
"Waa" Dije inconscientemente al sentir el sol sobre mi piel. Ahh… estaba olvidado este extraño sentimiento.
"¿Uh? ¿Te gusta el sol?" Dijo mi madre con una sonrisa al ver mi expresión de relajación. "Adivina qué, a mi también me gusta los días soleados."
Mientras nos movíamos a una dirección que desconocía me puse a observar los alrededores.
Wow, literalmente estamos acampando en un desierto. Comenté para mi mismo. Como ayer era de noche no pude ver casi nada del campamento.
Seguimos caminando por la arena por unos segundos hasta que pude observar a mi joven padre sacando las cosas de las otras dos tiendas, para luego juntarlas en un solo punto.
Después de que mis padres intercambiaran una mirada mi madre me siguió cargando por un par de minutos por el extenso desierto, hasta que después de llegar a la cima de una gran duna de arena pude ver dos grandes figuras enfrente nuestro.
¿Qué son esas cosas? Pensé con temor al ver a dos bestias reptilianas tan grandes como dos o tres casas juntas. Acaso son… ¿Dragones?
Pero ¿Por qué? ¿Qué-qué hacen en este desierto? Mis dudas y temores se disiparon al ver a mi hermana debajo de ellos, dándoles de comer y acariciándolos. Ahhh… entiendo entiendo, ellos deben de ser Mork y Ness.
Zoe, que era el nombre de mi hermana al darse cuenta de nuestra presencia se acercó inmediatamente.
"¿Cómo están Mork y Ness?" Preguntó mi madre. "Ellos están bien, cuando vine, vi que seguían un poco alterados por los acontecimientos de ayer." Comentó Zoe mirando a los gigantescos dragones. "Pero, ahora que están comiendo se encuentran más tranquilos."
Sin decir una palabra más, mi madre se acercó a ellos dejando a Zoe a nuestras espaldas. "Tienes razón hija, ellos se encuentran mejor." Dijo finalmente después de estar observándolos por un tiempo.
¿Cómo lograron domar a estos dragones? Me pregunté lleno de curiosidad. ¿Acaso mi familia tiene mucho dinero? No, no creo que sea eso, porque después de todo estamos durmiendo en unas tiendas en medio del desierto.
A pesar de que tenía poca información gracias a Bernal no sabía nada de la situación de mi familia, haciendo que me frustra un poco.
"Zoe" Dijo mi madre. "Kadian ya debe de estar acabando, así que recoge esto y vamos para que le ayudes." "Entendido Madre." Respondió mi hermana recogiendo algunas cosas que estaban cerca de los dragones.
Como no vi a más personas en el campamento supongo Kadian es el nombre de mi padre. Pensé antes de que mi madre de repente me agarrara con más firmeza.
"Vamos Drake. ¿Eh? ¿Y ahora a dónde vamos? Pensé antes de que mi madre me respondiera saltando sobre uno de los dragones.
¡Pero que rayos! A pesar de que eran más de 10 metros de alto, mi madre dio un gran salto con tanta elegancia que me hizo cuestionar nuevamente mi relación hacia ella.
Será mejor que deje de pensar en eso…. Pensé antes de despejar nuevamente los malos pensamientos de mi cabeza. Cierto, ahora que lo pienso ¿Mi madre no había dado a luz ayer? Si fue así porque está tan sana y saludable como para saltar 10 metros?
Pensando en lo poderosa que es la magia curativa en este mundo no vi como Zoe había llegado a la espalda del otro dragón. Espera ¿En que momento lo hizo?
Mi madre, aún parada sobre el lomo del dragón dio una suave pisada sobre su espalda, indicándole de alguna manera de que se prepara para volar.
Wow…. Pensé sorprendido al notar como el dragón de Zoe también se estaba preparando, segundos después ambos estiraron sus alas y emprendieron un leve vuelo que me hizo emocionar y temer a la vez.
Volaron lentamente hacia nuestro campamento, para finalmente aterrizar a un lado de las cosas que mi padre ya había terminado de desarmar y juntar.
"Zoe, baja para ayudarme a subir todo." Dijo mi padre. "Claro" Respondió mi hermana mayor. Luego de que terminaran de subir todo a los costados de los dragones, mi padre subió sobre uno de ellos.
"Yo iré con Mork" Dijo mi padre mientras me veía en los brazos de mi esposa. "Y tu Zoe dirigirás a Ness, junto con tu madre y Drake." "Está bien." Contestó Zoe antes de que ambos dragones de elevarán del suelo.
Una vez arriba mi padre estiró una de sus manos hacía nuestro campamento, haciendo que mi cuerpo temblara por unos segundos antes de que mi madre se percatara de ello.
"¡Cierto! Perdóname Drake, olvidé que aún no puedes ponerte una capa de maná sobre tu cuerpo." Dijo mi madre envolviéndome con su maná haciendo que el frio, viento y miedo que sentía hace poco desaparecieran.
¿Qué? ¿Pero qué es esto? Se-se siente muy cálido. Comenté para mi mismo. Necesito aprender lo más rápido posible esta capa de maná de la que habla.
Mi padre empezó a levantar suavemente su mano, y al hacerlo inmediatamente todo rastro de nuestro campamento se fue sepultado por una impetuosa arena qué se elevó a varios metros de altura.
¡Wow! ¿¡Cómo hizo eso!? Me pregunté sorprendido. Sin respuesta, su dragón se elevó al cielo casi al instante, y un par de segundos después el nuestro también.
Tanto Mork como Ness se elevaron a tal grado que se perdieron entre las nubes del cielo. Sé que para ellos esto es normal, pero para mi es contradictorio… No sé que sentir, si miedo o felicidad por estas vistas.
"Madre ¿A dónde iremos ahora?" Preguntó Zoe mientras volteaba su cuello a pesar del fuerte viento. "En la mañana conversamos con tu padre, y decidimos que nos quedaríamos en el sur del reino de Flock, más específicamente, en un pueblo que se llama Birton."
"¿Qué? ¿En Flock? Pero eso está al otro lado del mundo." Comentó Zoe con dudas en su tono.
¿Al otro lado del mundo? Pero… ¿Por qué haremos un viaje tan largo? Confundido, calle mis pensamientos para seguir escuchando las palabras de mi madre.
"Así es, sé que está muy lejos, pero es el mejor lugar para quedarnos por unos años hasta que Drake crezca." Opinó mi madre. "Entiendo… ¿Y cuánto tiempo nos tomará llegar a Birton?"
"Según la ruta que escogimos, tardaremos entre 190 a 200 días." ¿¡Cómo!? ¿¡Me estás diciendo que pasaremos medio año viajando de esta manera!? Pensé alarmado.
"Y madre ¿No crees que es un poco largo el viaje teniendo en cuenta de que no tenemos suficientes suministros como para un viaje así?" Preguntó Zoe antes de mirar al frente por un momento para confirmar que estábamos siguiendo a Kadian.
"Si, lo sabemos, por eso haremos unas pequeñas paradas en el Continente Central, para abastecernos de provisiones."
Asintiendo, Zoe no preguntó más, y al voltear a en frente se enfocó en el camino.
El Continente Central….? Creo que hay muchas cosas que tengo que aprender de este mundo. Pensé con un poco de emoción en el pecho, ante las cosas que se me venían.