—Señorita Aaron, aquí tiene el resumen detallado de la pista de baile —Peter trajo su tableta para mostrarle la pantalla y ella dejó caer el lápiz sobre el escritorio girando su asiento unos noventa grados.
—¡Chicos! ¿Pueden dejar de llamarme Señorita Aaron? Con Marissa será suficiente —les hizo una señal de aprobación con el pulgar.
Escuchó risitas de su equipo sentado a su alrededor y se puso de pie —Peter, necesito ir a traer agua para mí.
Antes de que pudiera dar otro paso, ocurrió un milagro y un vaso de agua helada fue colocado en el escritorio —Aquí —Marissa se quedó con la boca abierta cuando vio quién se lo había traído.
Con una sonrisa amistosa, Kate giró sobre sus talones y regresó al grupo donde estaban sentadas Delinda y Shang-chi.
Marissa le dio esa mirada a Dean que estaba sentado al otro lado de la sala y la estaba mirando. Él solo se encogió de hombros, pero tenía una sonrisa cómplice.