Y fue lo último que oyó antes de recibir un golpe del Centurión Dorado y caer al suelo como un muñeco desprovisto de vida. Super-Ultra, por su parte, no quería quedarse parado sin vengarse de semejante ultraje y se lanzó rápidamente hacia el Centurión Dorado. Este, esperando el ataque, agarró su mano, lo giró y, antes de que entendiera lo que estaba pasando, lo arrojó hacia arriba. Cuando Super-Ultra retornó al suelo, el Centurión Dorado ya lo esperaba con un potente gancho que lo lanzó nuevamente hacia arriba, dejándolo fuera de combate.
"¡Así se hace, compañero! Héroe o no, nadie se burlará de nosotros", dijo Aço Blake, dándole una palmada en el hombro al Centurión Dorado.
"¿Alguien puede darme una mano aquí con la jefa?", avisó Maestro Comando.
Ni el super boxeador ni el Centurión Dorado podían creer lo que estaban viendo.
"Tessala, por favor, no creo que este sea un momento para bromas", dijo el Centurión Dorado.
"¿Y quién eres tú para decirme eso? ¿No eras tú quien estaba golpeando a sus compañeros hace un momento?", replicó Tessala.
"Tessala, en caso de que no lo hayas notado, fui atacado primero. Y tú, como líder, deberías apaciguar y no incentivar peleas dentro de nuestra base..."
Pero antes de que el Centurión Dorado terminara su frase, un nuevo elemento entró en escena, derribando la pared en una entrada espectacular.
"Me parece que no llegué en un buen momento. Pero aun así, ¿no me van a invitar a entrar?", dijo el intruso, envuelto en un traje negro como un ninja, esperando la invitación que vino de la boca del Centurión Dorado.
"Si es una invitación lo que esperas, entra ahora", respondió el Centurión.
Un puñetazo sorprendió al elemento vestido de negro, arrojándolo al agujero que había hecho en la pared. Y sin esperar su regreso, el Centurión Dorado avanzó hacia el agujero con la intención de derrotarlo allí mismo. Pero el astuto elemento no era tan débil como él pensaba y, antes de que avanzara por el agujero, un potente puñetazo fue lanzado en su dirección, haciendo que el Centurión Dorado fuera lanzado hacia atrás.
"¿Con quién creen que están tratando? ¿Con un ladrón o un criminal cualquiera?", dijo el intruso lleno de arrogancia.
"¡Ah! Entonces explícame quién eres después de unos golpes en la cara, malandrín", dijo Bravo Veloz, mientras lanzaba varios golpes seguidos en la cara del oponente, sin que este se inmutara por los golpes que estaba recibiendo.
"Creo que no estás golpeando bien a este villano, Bravo Veloz", dijo Aço Blake, mientras avanzaba hacia el enemigo y lanzaba varios cruzados y algunos jabs.
Como respuesta a los ataques recibidos, el oponente vestido de negro, en una acción tan rápida como un parpadeo, lanzó solo dos golpes muy rápidos, pero lo suficientemente fuertes como para dejar fuera de combate a los dos superhéroes que lo enfrentaban.
"¡Espera un momento ahí, camarada! Yo aún estoy en la pelea", dijo el Centurión Dorado, apareciendo con fuerza total y lanzándose con un impulso que derribó a su oponente, llevándolo al suelo. Con él caído, comenzó a lanzar varios golpes en su rostro hasta que notó que su propia mano se estaba lastimando.
"¿Pero de qué estás hecho?"
Pero antes de obtener una respuesta, un fuerte contraataque lo golpeó, lanzándolo hacia atrás. Aún en el aire, el Centurión Dorado pronunció:
"Un flacucho como tú no puede ser tan fuerte."
La líder Tessala aún no se había pronunciado en un ataque porque aquello era una novedad para ella.
"Espera un momento, por favor", dijo ella educadamente al oponente. "¿Quieres decir que eres un supervillano o algo así?"
Levantándose bruscamente, el atacante respondió:
"Se puede decir, joven Tessala, que soy solo tu conciencia. Solo un poco más pesada, claro. Pero estoy aquí solo para ponerte en el camino correcto."
"¿Mi conciencia? ¿Qué historia es esa?", preguntó Tessala, sin entender nada.
"Cuando partiste de tu mundo, tenías una misión de la que te desviaste. Ahora estoy aquí para que continúes con tu misión original. Es bastante simple, ¿no?"
Intrigada por esta absurda declaración, Tessala aún intentó argumentar, pero antes de hacerlo, Super-Ultra entró en acción. Y lo que podría haber sido un desenlace a favor de Tessala, se convirtió en su total decepción. Pues con solo un golpe bien dado, el atacante dejó fuera de acción a Super-Ultra.