**Harper**
—Besar a Eli en un rincón escondido de un pasillo del hotel rápidamente se convirtió en la actividad favorita de Harper. Se sentía liberador poder compartir momentos íntimos como ese con él hasta saciarse, y por primera vez en su vida, Harper estuvo tentada a dejar plantadas sus reuniones de trabajo para poder pasar toda la tarde ahí, perdida en sus besos intensos, sus caricias suaves y sus susurros dulces.
A pesar de que la adicta al trabajo que llevaba dentro ganó al final, enviándola de vuelta a las salas de conferencias donde pertenecía, aún así era excepcional que llegara solo cinco minutos antes de la reunión en lugar de los quince habituales. Incluso era más excepcional que, en vez de ir directamente a su portátil, optara por revisar su teléfono lo primero después de sentarse, buscando ansiosamente la fila de corazones esperando su atención.
¿Era este el incipiente sentimiento de estar enamorada?