Justo cuando las palabras caían, Zachary Owen fue abofeteado contra el suelo por un joven de aspecto amenazador.
—Tú... ¿señor Gibson, está aquí? —Myles Owen intentó reaccionar con enojo, pero al ver al hombre de mediana edad parado en el medio, su expresión cambió instantáneamente, adoptando un tono adulador.
En ese momento, el hombre de mediana edad no tenía interés en prestarle atención a Myles, y en cambio volvió su mirada hacia Pedro y preguntó:
—Pedro, ¿qué está pasando? ¿Cómo es que no me avisaste cuando saliste?
—¡Jules!
Pedro también estaba sorprendido.
Los dos se acercaron, se abrazaron, y el hombre de mediana edad suspiró:
—Nos encontramos de nuevo. Oye, recuerdo cuando tuve mi ataque al corazón. ¡Si no fuera por tu ayuda de emergencia, ahora estaría muerto!
—Pareces estar bien ahora.