En recuerdos de Indigo hay un chico de baja estatura, complexión frágil y aspecto poco varonil, que es abordado por una chica más alta y de actitud decidida.
- Hola
- ¿Eh? esteee... hola
- ¿Tu eres Indigo?
- s... seh...
- Yo soy la nueva, Yerai
- Ah claro, si, tú estás hace una semana, ¿no?
- así es, ¿te puedo hacer una pregunta, tienes la materia de filosofía de ayer?
- S… si, de casualidad la ando trayendo...
- ¿Podrías prestármela hasta mañana?
- si... claro
- Oye, a ti te veo siempre solo, el único con el que te juntas es el Mílan, ¿te tinca que nos vayamos juntos a la salida?
- B... Bueno... - El muchacho se queda mirando a su compañera con incertidumbre, tal vez no sabe que esperar de su reunión. Al rato en clases habla brevemente con su único amigo;
- Mílan, oye
- ¡Dime!
- Porfa, shhhh... en silencio, es secreto
- Ah perdón, qué pasa
- Fíjate que en el recreo me habló Yerai, me pidió el cuaderno de filosofía, pero también quiere que nos juntemos a la salida, ¿Qué piensas, debo hacerlo?
- ¡Ohhh buena!
- Shhh, bájale
- Disculpa, es que me pillaste por sorpresa... ¡siii, dale!
- ¿En verdad?
- ¡Claro!, siempre te has quejado que las chicas no te pescan, ¡Esta puede ser tu oportunidad!
- Entonces... voy...
- Si, dale, y con convicción
- Oka...
- Vamos, ¡Ánimo!
Yerai los observa a la distancia. A la salida, Yerai e Indigo se juntan, Mílan los deja en paz contento por su amigo, Yerai lleva a Indigo a un parque en donde charlan;
- La verdad pasas demasiado desapercibido en el curso, eres como invisible, jajaja, no, en serio, a veces me daba cuenta de ti sólo cuando te molestaban los cabros, pero en la mañana justo escuché cómo hablabas con Milan y me llamó la atención que te sintieras solo, así que me decidí a conocerte, además, eres como lindo.
- si...
- Oye Indigo, ¿estás saliendo con alguien?
- ¿Queeeeé?- Indigo se ruboriza
- Eso mismo, ¿tienes alguna pareja?
- N.... n... noooohhhh…
- Pues la verdad siempre te veo junto a Milan, entonces tal vez pensé que ustedes dos...
- ¡Milan es amigo mío!... aaaaah mí... m... me gustan... las mujeres...
- ¡Oh, ya veo!, perdón por la equivocación, es que todos dicen que son pololos…
- N... No... pasa nada...
- entonces no tienes compromiso
- Así es
- y entonces, ¿puedo salir contigo?
- ¿QUÉ? ¿p... por qué?
- ¿es necesario explicar mis razones?
- p... per... perdón... es queeee... primera vez...
- Ya veo... está bien, como te dije, te encuentro lindo y quiero conocerte, además, tu soledad me provoca… ternura
- Ah...- Automáticamente y sin meditar siquiera si acaso Yerai le gusta, Indigo responde casi automáticamente - e... está bien, salgamos...
- ¡Aaahhh genial!, ¡entonces a partir de ahora démonos tiempo para charlar y compartir!
- Eee... está bien... - Indigo no puede creer lo que está sucediendo, piensa que está en una dimensión fuera de la realidad, hasta un poco asustado está
- Así que trata de avisarle a Milan que ahora vas a pasar tiempo conmigo, ¿entiendes?, no me malinterpretes, no quiero separarte de tu amigo, es sólo que ahora tendrás tiempo más compartido, ¿estás de acuerdo?
- oka
- ¡Buenísimo!, entonces hasta aquí te acompaño, podríamos contactarnos por chat
- ah, cierto- Indigo saca torpemente su celular, sus manos están mojadas de sudor y agrega a Yerai en sus contactos, Ella hace lo propio.
- ¡Listo!, ¡mañana nos vemos!- Y Yerai se despide con un beso en la mejilla del introvertido Indigo, quien se queda mirando hacia el vacío mientras Yerai se aleja. - Ni siquiera la conozco... ¿Qué acabo de hacer?...
Al otro día, la ansiedad hace que Indigo tenga miedo pero en vez de pasar con Mílan el recreo, Yerai lo va a buscar y se le pega, al comienzo Indigo se ve un poco contrariado de no estar con su amigo, incómodo, pero éste a la distancia le hace una señal de aprobación por estar con Yerai.
- Oye Milan, mira, la Yerai, la que no pesca a nadie, se está juntando con Indigo, ¡quién diría que ése se la tenía guardadita! – Le comenta un chico a Mílan
- ¡Está bien!, Es mi amigo y le hará bien tener contacto con una chica
- Siii, quien lo viera, chiquitito y calladito y la sorpresa que nos tenía, y esa Yerai, ¡sea como sea tiene su encanto!
- Estoy contento por mi amigo
Al principio la relación de Yerai con Indigo era más parecida a la de dos amigos, sin mucho contacto físico salvo algún discreto gesto de Yerai como tomadas de mano, algún beso en la mejilla pero conversaciones amenas, así estuvieron las cosas por dos semanas, al cabo de ese tiempo ya se veía a Indigo más relajado y acostumbrado a la presencia de Yerai, ya no había ansiedad, hasta que se encuentra con Milan en la salida ya que Yerai ese día está ocupada y le comenta;
- ¿qué tal todo, Indigo?
- ¡Bien, todo bien, Yerai no es como se ve en la escuela, no es para nada apática, tal vez como no conoce a nadie no tiene con quién conversar, pero es super simpática!
- ¡Genial!
- Si, creo que me estoy acostumbrando y todo va bien...
-Ya, pero, ¿Y han avanzado en otras cosas?
- ¡¡Q... Qué??
- Ya tu sabes, besos, caricias, lo que hacen los pololos
- N... n... nooooohhhh... - Volvió la ansiedad
- Deberías al menos pensarlo, es normal en las parejas, convérsalo con ella para saber qué piensa al respecto
- S... Se... supone que estamos saliendo, pero hemos tenido poco contacto, es como si fuéramos sólo amigos, p... pero creo q... que así estamos bien... n... no he p... pen...sado en otras cosas...
- Pero inténtalo y convérsalo con Yerai, no hagas nada sin decirle antes
- ¿C... Crees tú queeee... podríamos pasar a otro nivel de la relación?
- Yo sería más de que las cosas fluyan, pero si tienes esa inquietud, convérsalo con ella, si sientes la confianza de decirme esto que te pasa a mi como amigo, con mayor razón debes tener la confianza de decírselo a ella que es tu pareja, todo lo que pasa entre ustedes deben conversarlo, ¡Pero deberías de aprovecharlo!
- ¡Uy, me da miedo, pero, gracias Milan, sabía que puedo contar contigo!
- ¡Siempre man!
Mas tarde en su casa, Indigo le escribe a Yerai:
- Hola Yerai
- ¡holis! <3
- Yerai, quiero conversar mañana contigo de algo que estoy pensando
- ¿de verdad? oka, ¿te preocupa algo?
- si, pero preferiría que lo conversemos en persona
- te entiendo, aunque me vas a dejar con la copucha XD
- no es algo muy importante, pero pensaba si pudiéramos llevar nuestra relación a un siguiente nivel, perdona si soy patudo >w<
- ¿cómo es eso del siguiente nivel?
- aaaahhh me da verguenza!!!! X((
- jajajajjaja, ¡ya po!
- no sé, como besos y cositas
- ¿querís besos, cariñitos y otras cositas?
- ¿si fuera posible?
- está bien, lo voy a considerar
- ¿de verdad?
- si, ¿por qué no?, ya que somos pareja, pero déjame pensarlo
- :-) Bacán
- Si, pero aún no me decido, así que vas a tener que armarte de paciencia conmigo
- ¡No importa!, y disculpa que te pida algo así ^_^
A la mañana siguiente Indigo llega temprano al liceo, cuando atravesaba el jardín del mismo una mano anónima lo agarra de la mochila y lo arrastra hacia atrás, Indigo se asusta pero antes que pueda reaccionar alguien lo agarra de la corbata y le planta un apasionado beso en la boca, la intrusa lengua no deja espacio sin recorrer dentro de la boca del sorprendido muchacho, es Yerai
- ¿te gustó?
- s.... siiii....- Indigo está paralizado del susto
. ¿acaso querías esto?
- s... s... seh....
- ¿Y pensabas que pedir un beso era un trámite judicial?, jajajajaj, qué chistoso eres… ¡mucho drama para un beso!, ¡Somos pololos, es lógico que estas cosas pasen!, ya hay que entrar a clases, pero recuerda, una pareja es cómplice de las locuras que se les ocurran, ¡y obviamente está demás decir que esto queda entre nosotros!, no sólo se trata de ser amigos y confidentes, ¿de acuerdo?, ¡No tengas miedo de comunicarte conmigo!
- y..... ya.... - Indigo está rojo como tomate y con el corazón palpitando a full
- ¡Bien, nos vemos más ratito!
En toda la mañana Indigo no pudo concentrarse en clases, hasta Mílan lo notó;
- ¿Te pasa algo Indigo?
- nnnnn... no... nada... todo bien- Indigo baja la mirada de vergüenza, en un momento se toca los labios, mira a Yerai y ésta lo está observando, al cruzar miradas ella le guiña un ojo e Indigo vuelve a bajar la mirada rápidamente con su cara roja hasta las orejas y se tapa la cara con ambas manos.
Más aún, a la salida Indigo se iba con Milan cuando Yerai lo alcanza y se lo lleva tomado de la mano casi a arrastras, Milan sólo se los queda mirando, rato después en un parque, Yerai aún con la mano de Indigo tomada.
- ¿te gustó lo de la mañana?
- eeh... si...
- ¿Qué pasa?, ¿Estás asustado?
- No sé…, pero creo que... me sentí... violado... - Involuntariamente Indigo termina la frase con un volumen más bajo de su voz, completamente avergonzado como si le costara pronunciarlo.
- ¿qué?, jajajajajjajajaja, ¡eres divertido!... pero está bien, tal vez me pasé de brusca y agresiva, intentaré ser más suave, delicada y confidente pa la otra
- no... en rea... lidad... es... estu... vo... bien - Indigo trata de hacerse el gallito pero lo embarga los nervios
- Entonces te lo compenso- sin dar tiempo a que Indigo responda, Yerai toca los labios de Indigo suavemente con sus propios labios, con varios toques mientras le acaricia la suave cara, lenta y tiernamente, como enseñándole a besar, le aprieta un poco las mejillas para que Indigo abra un poco más la boca, con esto sigue tocándole los labios pero luego su lengua roza también sus labios para finalmente entrar en su boca pero esta vez más suavemente, casi asomando como buscando a tientas la lengua de su compañero y al encontrarla, la acaricia con suavidad, esta vez Indigo puede sentir con calma y detalle la suave humedad y el tacto de las papilas gustativas de la lengua de Yerai, así están un largo rato, con sus manos Yerai acaricia lentamente la cabeza y las orejas de Indigo.
En un instante Yerai baja la mano y se mete dentro del pantalón de Indigo
- Veamos qué pasa ahí abajo...
- ¿Eh?
- ¡Woah!, ¡estás mojado!... ¿Qué es esto?
- ¿Eh, q... q... qué? - Indigo se pone rojo de la vergüenza - P... por fa...
- Oye Indigo, ¿Vamos un rato a mi casa?
- ¿Ah?
Yerai toma la mano de Indigo - ¡Decidido, nos vamos!
Indigo se deja llevar, pero tiene mucho miedo, el ser tan introvertido y metódico le hace sentirse cómodo en su rutina, pero cualquier alteración repentina le asusta y paraliza. La casa de Yerai era grande y revelaba un estándar de vida acomodado, aparentemente no había nadie, Yerai trajo a Indigo casi arrastrando y ya dentro de la casa lo invita a acomodarse, al separar sus manos, Yerai nota que la mano de Indigo esta toda sudada, mientras ella pasa al baño, pero Indigo está lejos de estar relajado, parado aún en la entrada del living tenso mirando el suelo, estuvo un rato indeterminado en esa postura con la mente llena de confusos pensamientos, cuando de pronto lo sorprende la voz de Yerai
- ¡Hey!, ¿Qué haces ahí todavía?
Indigo sube la mirada y ve a Yerai de una delgada blusa corta y short corto revelando una pinta muy sensual, ¿En qué momento se cambió?, Yerai se apura y toma la mano de Indigo y se lo lleva al dormitorio, lo sienta en la cama y se lo queda mirando:
- ¡No me digas que estás asustado, estás super tieso!, vamos, tranquilo, soy tu polola ahora -Yerai le acaricia la cabeza a Indigo-, nada malo va a pasar mi niño - Yerai se agacha y le toma la mano - ¿Quieres conversar?
- Eeehhh... esteeeee... - A Indigo no le salen las palabras
- Esto no va a resultar, tengo que hacer que te relajes - Yerai le abre el pantalón a Indigo y extrae su miembro, se impresiona de lo pequeño que es;
- No me digas... tu tienes... falta de desarrollo..., déjame ver…
Yerai le saca toda la ropa a Indigo como quién desnuda un maniquí, éste se muere de miedo y vergüenza está paralizado, por lo que no le cuesta nada a Yerai desnudarlo. Yerai se impresiona del cuerpo desnudo de Indigo, blancura casi pura, escaso vello corporal, prácticamente lampiño, sus genitales poco desarrollados, su cuello no parece el de un hombre, lo mira por la espalda y ésta parece la de un niño, y lo que más le llamó la atención eran sus redondas y notorias nalgas. Yerai abraza a Indigo, al abrazarlo nota como su cuerpo tiembla y le acaricia la cabeza;
- ¡Eres una ternurita de bebé, tienes un cuerpo de mazapán!, no tengas miedo mi niño, yo te cuidaré.
Yerai se agacha ante Indigo le da unas caricias a su pene y luego se lo lleva a la boca, cálida y tierna, con suavidad la lengua de Yerai acaricia el pequeño miembro de Indigo, de pronto sus piernas ceden y se hecha en la cama mientras Yerai continúa el sexo oral.
Yerai se toma su tiempo, acariciando con su lengua el miembro de Indigo y sus pequeños testículos, todo desprovisto de vellos, y usando su mano a la vez para acariciar sus nalgas, Indigo está como hipnotizado, luego de unos minutos Indigo siente algo que jamás había sentido, en un momento su pene se endurece dentro de la boca de Yerai, en ese momento Yerai succiona y hace como un vacío dentro de su boca estimulando el suave, húmedo y tibio tacto envolvente al pene de Indigo alejando los dientes para no arruinar la experiencia lo que finalmente provoca un orgasmo del chico llenando de semen la boca de Yerai. El espasmo de Indigo hace que su torso se enrolle sobre la cabeza de Yerai hasta que su pera casi toca la espalda de la chica.
Implacable, Yerai sigue acariciando con la lengua y succionando mientras se traga todo el semen hasta que ya no queda nada, entonces Yerai se pone a sorber el pene de Indigo extrayendo los líquidos que aún quedaban dentro hasta dejar todo seco, el cuerpo de Indigo se estremece increíblemente sensible y Yerai sin darle tregua sigue succionando acariciando con su suave lengua la zona del frenillo del miembro. Finalmente ella se aparta de Indigo.
- ¿Te gustó?
Indigo se estira de golpe dejándose caer hacia atrás en la cama completamente relajado, sólo asiente con la cabeza enmudecido
- ¡Eres tan lindo!, ahora ve y lávate, luego te sirvo un jugo
Indigo se mueve obediente como autómata en silencio, luego de atenderlo un rato con jugo de fruta y galletas, Yerai lo acompaña al paradero.
- ¡Hasta mañana mi niño!
- Seh
Después de la partida de Indigo, Yerai piensa:
- Estaba tan asustado que no tuvo reacción, era como un conejito, je, sólo lo probaré una vez más y si no reacciona veré otra forma de hacerlo.
Al otro día Yerai e Indigo se vuelven a encontrar, pero Indigo está silencioso
- ¿Te pasa algo?
- No sé lo que siento... todo fue tan repentino...
- ¿Querrás intentarlo de nuevo?
- No sé, pienso que no pude funcionar como hombre...
- ¡Pero Indigo!, las cosas no pueden funcionar bien a la primera, apuesto a que fue tu primera vez y es normal nada salga como lo esperas, además, por un instante tuviste una buena erección, pero aún así, me gustó, ¡me provocas mucha ternura! - Yerai abraza por la espalda a Indigo
- Entonces... quiero hacerlo de nuevo
- Oka, pero tranquilo, te dije que te cuidaría – Yerai le acaricia la cabeza a Indigo
- Pero no hoy, quiero preparar mi ánimo
- Entiendo, entonces me avisas
- Mañana
- ¿Eh?
- Mañana podría ser...
- Hmmm... déjame ver, tal vez estén mis padres, te confirmo luego en el recreo, pero te digo, no te hagas expectativas de lo que pase, eso es estresante, sólo vive el momento
- O... oka...
Volvemos a ver al muchacho tímido, en el colegio, todo nervioso cuando su amigo se le acerca
- ¡No has estado muy concentrado en clases!
- Seh, no quisiera entrar en detalles
- ¿Es por Yerai?
- Si, pero todo esto es nuevo para mi
- Vamos, relájate, ¡por fin se está cumpliendo tu sueño de tener una pareja!, sólo tenís que preocuparte de pasarla bien con ella, ¡diviértanse los dos!
- Relajarme... divertirme...
- ¡Así es po! Todo está bien entre ambos, sólo deben tener diálogo, habrán cosas que a ella le gustan y otras que no, ¡Pero si están de acuerdo todo está permitido!
- Gracias Mílan
Aún así la espera hasta el viernes fue tensa para Indigo, nuevamente en casa de Yerai los chicos intentaron hacerlo una vez más, comenzando Yerai por el sexo oral, pero en esta ocasión la inseguridad de Indigo nuevamente le ganó también, Yerai se da por vencida y finalmente le da unas prendas de chica a Indigo
- Ya, no voy a desperdiciar mi tiempo y me aburre esto, quiero que te pruebes esto, a ver cómo te ves, tranquilo, es sólo un juego
Indigo mira asustado la ropa, pero obediente se viste con eso, una vez listo, Yerai le termina de acomodar las prendas, le coloca una peluca
- ¡Guau!, te ves súper bien, ¿a ver? – Yerai se entusiasma y va a buscar un set de maquillaje, casi de inmediato se pone manos a la obra
- P… pero… - la ínfima resistencia de Indigo no es suficiente para detener a la chica
Una vez que termina Yerai, Indigo abre los ojos y se mira al espejo, se veía como una chica tan hermosa que su nivel de nervios y emoción aumenta, siente su corazón saltar alocadamente en su pecho.
- ¡Te ves tan linda que de nuevo me dan ganas de besarte, pero soy tan apasionada que capaz que arruine tu maquillaje!, en fin, ¡Para la guinda de la torta, salgamos las dos!
- ¿Qué?, ¡y... yo pensaba que esto era sólo una fantasía tuya!
- Y si lo es, ¡pero aún no está completa!, en verdad te ves increíble, Indigo, en pechos no puedes competir conmigo, ¡pero tenís mejor culo que yo!
- C... Córtala...
- ¡¡¡Ayyy que linda!!!!, ¡te quiero comer de nuevo!
Yerai sin ninguna consideración le sube la falda a Indigo y le hace sexo oral, esta vez de manera más agresiva, lamiendo y succionando hasta extraer el néctar del niño como desesperada abeja, lo que deja la mente de Indigo en blanco y en ese estado crepuscular se lo lleva afuera, su atuendo y aspecto en general quedó tan bien que nadie en la calle sospecha que bajo esa pinta de atractiva feminidad se oculta un frágil chico, algunos muchachos lo piropean, incluso algunos automóviles pitean a su lado
- ¡No me equivoqué, te volviste muy popular de golpe!, con tu pinta de chico te ves tan sombrío y gris, no inspiras nada en quiénes te ven, ¡pero como chica te ves tan reluciente, estás muy linda, no me equivoqué!
- N... no me... d... digas esas cosas que estoy todo nervioso... - Indigo apenas contiene la emoción, su corazón golpea tan fuerte que tiene que apoyar sus manos contra el pecho. En un momento Yerai lo deja solo e Indigo se asusta, pero los hombres a su alrededor se muestran caballerosos y amables ante su presencia, una mezcla de sentimientos embarga a Indigo que sin darse cuenta sonríe - Es verdad... de alguna manera... soy popular... la gente me aprueba, ¿esto es vivir?
De pronto aparece Yerai
- Oye, se me antojó un helado, vamos allá
- Oka...
- Toma Indigo, compra dos helados barquillo de un sabor, yo quiero de pistacho y tu elige tu sabor, anda
- p... pero... pero
Dócil Indigo va a la heladería
- ¿Qué hago, me reconocerán por la voz! a ver si me sale imitar...
- ¡Hola linda, qué se te ofrece! - Un dependiente alto y varonil, de cuerpo musculoso y velludo lo atiende
- d... dos bar... quillos... un... sabor...
- ¿Dos barquillos simples?
- s... si
Indigo adelgaza su voz tratando de parecer una chica, lo que resulta en una voz de mujer de registro bajo, el enorme dependiente la atiende de manera amable y delicada, Indigo se muere de los nervios y le paga, luego con el boleto va a pedir sus helados.
- Toma, un detalle de la casa
El dependiente le entrega dos helados pero con dos sabores, Indigo se emociona y le responde con una sonrisa
- ¡Gracias!
- De nada, vuelva por favor, linda.
- Si
- ¡Guau!, ¡pinchaste Indigo, te volviste popular!
- s... seh
- Fíjate que ni yo como chica auténtica soy tan popular, pero te advierto, ni pienses en interrumpir nuestro paseo, una vez que terminemos te dejaré en paz, pero acompáñame hasta el final.
- N... no se me había ocurrido tal cosa...
- Más te vale, que si no, acá en medio de la calle te dejo en evidencia.
- ¿Eh? - De pronto Indigo entró en pánico, Yerai notando el sobresalto de Indigo le reafirma;
- ¡Y soy capaz de hacerlo!
- Me tiene completamente en sus manos - Piensa Indigo
Pasearon unos treinta minutos más hasta que Yerai se lleva a Indigo a un hotel a cambiarse,
- ¡Toma Indigo, tómate esta bebida primero!
Indigo confiado se bebe la bebida helada pero en vez de devolver sus prendas, le pone a Indigo un diminuto vestido negro con lentejuelas, el vestido cubría desde las axilas hasta la parte superior de los muslos, justo en la comisura de las nalgas, le repasa el maquillaje de forma más llamativa
- ¡No sabís lo prendida que me has tenido toda la tarde, ahora pareces una putita! -
- ¿Qué?
Yerai lleva a Indigo ante un espejo, Indigo se sorprende de lo atractiva que se ve, a lo que Yerai mete la mano en la ropa interior de Indigo
- ¿Estás toda mojada?, ¡está bien, tu lo quisiste!
Yerai manosea el cuerpo de Indigo y se agacha a hacerle sexo oral, Indigo mira todo por el espejo y empieza a sentir algo extraño su cuerpo, se pone más sensible al tacto, cada caricia es un placer profundo y extrañamente siente bienestar y felicidad, Yerai, que es más alta y más vigorosa que Indigo lo tira a la cama y lo pone de vientre dejando su culo expuesto, le baja la tanga y le empieza a besar las nalgas, rápidamente llegando al beso negro, luego lo lleva a la ducha
- Tranquila, ¡Te lavaré pero no la cara!
- ¿Q... qué cosa?
Con ropa y todo Yerai mete a la ducha a Indigo y procede a hacerle enemas, cada cosa que le hace Indigo lo siente exageradamente exquisita y se entrega. Luego de eso vuelven a la cama y Yerai le introduce tres dedos por el trasero a Indigo y empieza el cosquilleo por dentro mientras lo besa.
- ¡Como hombre eres un patético alfeñique pero como mujer eres una espléndida sumisa, pareces una muñeca de porcelana y te voy a dar lo que mereces. Ahora que estás bien lavadita por dentro y por fuera, tengo algo especial para tí!
La mirada de Indigo se pierde, se siente muy estimulado, ya no piensa ni razona ni reacciona, es como si su cerebro se hubiera apagado tomando el control sólo su cuerpo que responde a los estímulos, su única reacción es entregarse abriendo sus nalgas, Yerai se desnuda y se equipa con un arnés, tras lo cual fija un miembro de látex y rápidamente Yerai besa a Indigo
- ¡Te ves tan sexy y apetitosa de esa manera! - Rápidamente Yerai desnuda a Indigo mientras lo besa sin parar, sus sensaciones corporales se amplifican, el solo beso lo excita demasiado, ya listos Yerai procede a penetrar a Indigo
- ahhh ahhh ah esp... espe... espe.. rah... Yeh...rai... espe... ah... aaAAAAHHHH ¡¡¡¡GÑYAAAAHH!!!!
- Jeje, ¡Que rico tu gemido!, ¡menos mal que te dilaté un poco con mis dedos, cómo me provocas desgraciada!
Indigo se recoge sobre las frazadas como una gatita mimosa que se entrega voluntariamente
~ o ~
Volviendo a la línea temporal presente, con Indigo ya en su casa después del episodio del hotel y de haber hecho un repaso de su relación con Yerai, piensa;
- Ya veo, así que eso fue todo lo que pasó, algo me dió, Mílan insiste en la importancia de la comunicación, pero a diferencia de mí, ella jamás tomó mi parecer... a ver si mañana termino con Yerai, tal vez deba alejarme de ella... pero... ¡y por qué me emociono al recordar lo que hicimos! – Mientras lo piensa sus manos presionan sus genitales como impidiendo que se erecte su miembro.