—Solo una mirada suya podría enviar a cualquier hombre a su tumba. —La mujer que se encontraba a unos metros de distancia, de espaldas, bloqueando su camino, era de hecho la diosa de la luna. —Su voz sedosa resonaba, incluso cuando estaba de espaldas.
—¿Sabes cuál es la consecuencia de lo que has hecho?
—El eco de su voz llenó el bosque, incluso los murciélagos huyeron. —Denzel no tenía intención de irse hasta que obtuviera lo que quería. —No me importa. —Tú no has sido justa conmigo.
—Te di fuerza y sabiduría. —La voz sedosa volvió a resonar, pero a Denzel no le importaba que estuviera enfadada. —Ella era responsable de emparejar a los de su especie, entonces ¿cómo podía haberle dado a Valerie a un hombre como Tristan?
—Si Denzel no hubiera estado allí ese fatídico día, sin duda ella habría sido asesinada. —Ahora que se encontraba con la diosa de la luna por primera vez, comenzó a señalar sus deficiencias.
—Te llevaste a todos mis seres queridos. —Permitiste que murieran.