Aunque estaba a distancia, aún podía ver claramente que Qiao Lian estaba de pie fuera de la puerta, charlando alegremente con un chico.
El cielo se había oscurecido.
Estaba sonriendo muy sinceramente y esa sonrisa era incluso más brillante y resplandeciente que las estrellas en el cielo, tanto que no podía apartar la vista de ella.
Había pensado que ella solo podría sonreír de esa manera cuando estaba con Qiao Yi. Pero, ¿acaso también podría sonreír tan felizmente con un extraño que acababa de conocer?
¿Era acaso que... solo permanecía en silencio cuando estaba con él?
Este pensamiento lo hizo sentir triste e incómodo.
Mientras se esforzaba por desviar la mirada de ella, se dirigió hacia el chico, quien tenía destellos en los ojos.
—Qiao Lian salió después de terminar de hablar con Smiling Tiger.
Solo dio dos pasos antes de ver su coche. Se detuvo.
Se quedó allí durante dos segundos, recordando su comportamiento autoritario. Luego su rostro se quedó inexpresivo y se acercó.
