Los arboles se agitaban con violencia por los fuertes vientos provocados por la tormenta, hoplitas se movían de lado a lado, cargando flechas, lanzas, y espadas, varios de ellos temerosos del encuentro con los micénicos, hasta que al otro lado de la muralla los vigías dieron la señal.
-¡COMANDANTE!
El comandante salió de la habitación, subió la empalizada; ahora reforzada con piedra en algunos sectores y a lo lejos veía a los minotauros, Asterión escuchó el llamado del vigía y junto a Niko salió a presenciar la llegada del enemigo.
-Asterión ¿Cuánta fe le tienes a tu plan?
-La justa y necesaria.
El orgulloso comandante, armado con un imponente tridente casi del tamaño de un micénico fue el primero en hablar.
-¡Retira tus fuerzas de aquí Teseo, tus patéticas fuerzas serán aniquiladas sin siquiera dañar una sola casa de nuestra ciudad!
Teseo aún no podía hablar bien el idioma de los Helenos, por lo que un traductor a su lado le informaba de las palabras del comandante, sin ningún miedo el micénico avanzaba lentamente y la primera flecha fue disparada, atravesando el hombro del minotauro.
-¡La siguiente flecha no será de advertencia, vacuno desgraciado!
La empalizada estaba repleta de arqueros y cincuenta hoplitas salieron de esta, formando una muralla de bronce y carne contra los micénicos, Teseo observó con tranquilidad y su hacha de dos filos lanzó una tímida bola de fuego hacia el comandante que se esfumó con la lluvia, Niko casi libera una risa por lo débil que fue la flama.
-Nos enseñaron que los micénicos no son buenos disparando sus bendiciones, pero no imaginé que tanto.
Asterión por otro lado estaba completamente serio.
-No, no lo son, así que cuídate y mantén siempre distancia con ellos, no los enfrentes en un mano a mano… De todas formas eso no fue un ataque, fue la señal.
Los minotauros corrieron contra la empalizada y fueron recibidos por la vorágine de viento, lluvia y flechas, Teseo dio la primera orden.
-[¡ESCUDOS!]
Los aros que adornaban las narices de los primeros diez minotauros en el frente brillaron y desde sus brazos enormes escudos de piedra protegieron a sus compañeros de las flechas, algunos pocos proyectiles de los helénicos estaban benditos por Aura la diosa de las brisas por lo que, como misiles, cambiaron su curso e impactaron algunos micénicos en sus hombros y espaldas, pero ninguna baja fue consolidada.
-Comandante, se acercan a la zanja.
El comandante levanto su mano con sus cinco dedos abiertos y los fue bajando lentamente hasta formar un puño.
-¡AHORA!
La fila de escudos de piedra cayó en una pequeña zanja que apenas alcanzaba a cubrirlos hasta la cintura, pero ese pequeño obstáculo retrasó las fuerzas por unos instantes, en que los helénicos revelaron su primera carta, los anillos de decenas de hoplitas brillaron en sincronía y desde estos un relámpago destellante pulverizó los escudos e impacto en varios de los minotauros, matando unos pocos, ahora sin defensa los arqueros retomaron el ataque, pero Teseo no se vio afectado, caminaba lentamente atrás del grupo.
-[¡ARMADURAS!]
Una vez más los aros transformaron la piel de varios micénicos en bronce y junto sus escudos de cuero los minotauros benditos protegían la retaguardia, cuando todos los toros cruzaron la zanja los hoplitas corrieron a la pelea, Teseo por su lado detuvo su caminar y el comandante no pudo evitar insultarlo.
-¿Eso es todo? Regresa al corral de donde perteneces Teseo.
La batalla en el muro estaba a instantes de gestarse y sin los minotauros de bronce, la retaguardia caería en nada por los arqueros, la victoria estaba ganada pero la primera carta de Teseo estaba apunto de revelarse, los brazales que cubrían los cuernos del minotauro eran artefactos divinos al igual que el vellocino del Jason, por lo que brillaron intensamente al solicitar un favor hacia su dios, quien respondería amablemente la suplica de su más ferviente siervo.
- Ελευθερία -
El guerrero saltó hacia el cielo y en una nube de fuego y vapor cayó por el otro lado de la empalizada, generando una terrible explosión de un fuego extremadamente rojo, el impacto eliminó a algunos pobres guerreros que tuvieron la mala suerte de estar en la zona de aterrizaje, al otro lado de la muralla comenzaba el combate y los arqueros en confusión se dividieron en algunos esperando ordenes, otros disparando al ejercito y otros a Teseo.
-Comandante ¿Qué hacemos?
-Disparen al ejército, el resto encárguense de ese animal.
Asterión fue sorprendido por los diez hoplitas a su "mando".
-Capitán el barco está armado y en posición, debería sobrevivir la tormenta.
-… Bien, ahora céntrense en retrasar a Teseo, no lo enfrenten directamente, si se lanza a atacarlos retrocedan, solo distráiganlo y manténganse con vida, ya gastó un favor, cuando haya gastado los cinco corran al barco.
-A sus órdenes.
Los hoplitas marcharon al combate y Asterión se quedo a solas con Niko.
-Laconia es la siguiente carta, saldrá ahora a combatir polemarca, pero ¿Qué planea Teseo? No puede retrasar a casi cien hombres.
-No Niko, lo entendiste mal, el no busca retrasar a nuestras fuerzas, los cincuenta minotauros en otro lado de la empalizada tienen esa tarea, es Teseo quien va a aniquilar este lado.
-¿Tan fuerte es? Entiendo porqué los mandaste a retrasarlo, pero entonces Laconia no tendrá oportunidad.
-Vamos, ese es nuestro objetivo ahora, crearle una oportunidad a nuestra compañera para escapar.
-¿Escaparemos en ese barco, sabes que es imposible cruzar la niebla verdad?
-Tranquilo, sigamos el plan.
-Si, sigamos el plan que no tengo idea de que trata.
La batalla en las afueras de la empalizada trascurría normal, los micénicos aguantaban con decenas de flechas en sus cuerpos mientras superaban con pura fuerza bruta los escudos de los hoplitas, los minotauros luchaban con bendiciones de bronce y piedra protegiendo sus cuerpos y compañeros, mantenían su posición frente a la lluvia, viento y relámpagos invocados por los helénicos mediante favores, a pesar de eso la batalla parecía en favor de los helenos, hasta que la tormenta se intensificó y el viento interrumpía el trayecto de las flechas, incluso las de los bendecidos por la diosa Aura. Al otro lado del muro Teseo era imparable, bendiciones de agua, viento y truenos caían sobre el minotauro, uno tras otro pero eran absorbidos por las llamas que cubrían su cuerpo, Niko presenciando la destrucción se preguntaba cómo era posible esto.
-Sus llamas se ven distintas a las de Laconia, mucho más rojizas, pensé que Hefesto no bendecía a los micénicos.
-No lo hace.
Respondía Asterión mientras escalaba muy torpemente hasta llegar al techo de la vivienda donde se encontraba Niko.
-Para la otra… Ayúdame a subir… Teseo esta bendecido por Prometeo, él no bendice helenos, su fuego es muy distinto al de Hefesto, puede quemar favores.
-¿Qué significa eso?
-El fuego no puede quemar el rayo, el viento o el agua, pero el de Prometeo si puede, es un escudo casi perfecto contra los favores.
-Parece que ellos no lo saben ¿Por qué no lo informaste de esto al comandante?
-Porqué necesito que Teseo se confíe.
Terminada la lluvia de favores el minotauro se encontraba ileso y dando un imponente pisotón, se impulsó hacia el muro, aniquilando a cada hoplita que osaba cruzarse en su camino, un solo hachazo bastaba para destruir los escudos, el bronce y la carne, su fuerza bestial sumada al impulso de su carrera impedían cualquier retroceso hasta que el comandante no tuvo otra opción que saltar al combate.
- Αξία -
El anillo del comandante absorbió grandes cantidades de agua de la tierra y la lluvia, formando lo que parecía la cabeza de una hidra que luego se dispararía en dirección al minotauro, como una serpiente de agua colosal.
-[Ni siquiera sabes cómo luce una verdadera hidra, piel de cerdo].
- Αλυσίδα -
La espalda del minotauro explotó en fuego impulsándolo en línea recta, encarando a la hidra, quemándola y mientras cargaba con su hacha lista para partir en dos al comandante, Laconia saltó enfrente, cubriendo el golpe con su espadón, el impacto hizo que la guerrera volara hasta la empalizada, destruyendo gran parte de esta, pero salvando la vida del comandante, quien sin perder el tiempo empaló a Teseo en el pecho con su tridente.
-Lo lograron Asterión, apuñalaron el corazón de Teseo.
-Aún no termina su ataque.
En ese momento el pecho del minotauro expulso fuego en todas direcciones, quemando por completo la empalizada y lanzando hacia atrás al comandante y a todos los hoplitas a su alrededor, destruyendo lo que quedaba de la empalizada, el fuego no se apagaba ni con el viento ni la lluvia y quemaba todo a su paso, excepto a los helénicos quien extrañamente no tenían una sola quemadura.
-¿Qué fue eso?
-Las llamas de Prometeo son un escudo, no una lanza, no pueden quemar a otro bendecido, por esto mismo Teseo las libera con fuerza para que la onda expansiva cause algo de daño y sus llamas parezcan más peligrosas de lo que realmente son.
-¿Y como sigue vivo con ese tridente en su corazón?
-No lo se.
-¡¿No lo sabes?!
-Solo lo he visto luchar dos veces contando ahora, antes también ocurrió algo similar, no sé cómo sin utilizar ningún favor puede sobrevivir eso, pero ya gastó dos favores, vamos, hay que quitarle el tercero.
Con el muro caído y el comandante desarmado, los minotauros exaltados reforzaron su ataque y las fuerzas helénicas desorientadas se defendían pobremente, sin las flechas los micénicos avanzaban a paso firme y apenas habían caído unos quince minotauros, mientras que solo quedaban la mitad de los helenos defendiendo la ciudad. Teseo sacó el tridente de su pecho y una hilera de sangre recorrió su torso por unos instantes, pero se detuvo como si nada al rato.
-No hay bendición capaz de regenerar una herida así, es inmune a nuestras bendiciones y sana heridas imposibles ¿Qué hacemos polemarca?
Laconia se levantaba de los escombros y saltó hacia arriba y dirigiéndose con sus alas preparaba un corte descendente contra Teseo.
- Σφυρί -
Al impactar contra el minotauro el suelo y el anillo de Laconia se iluminaron y un pilar de fuego nació de este, Teseo se protegió del golpe con su hacha y no parecía tener ninguna quemadura, el favor no funcionó y la bestiaria rápidamente retrocedió sorprendida de la resistencia del micénico.
- Πατέρας -
Una bola de rayos impactó contra el minotauro desprevenido en una zona desprotegida por su fuego, causándole una terrible quemadura en sus costillas y finalmente apagando las llamas que cubrían su cuerpo.
-Te lo dije, es el fuego es lo que lo protege ¡Laconia, mantenlo ocupado! Niko escóndete y atácalo desde puntos ciegos cuando busque atacar a nuestra bestiaria.
-Entendido polemarca.
- Σφυρηλάτηση-
La armadura de llamas cubrió a Laconia, lanzando vapor al caer las gotas de lluvia sobre ella, Teseo mantenía sus ojos en la bestiaria y sus oídos sobre el tracio, levantó su brazo al cielo y los brazales de sus cuernos brillaron una vez más.
- Κληρονομία -
Un enorme y redondo escudo de fuego se formó en su brazo, con el diseño de un anciano hombre devorado por un águila, Asterión tenia un rostro serio pero por dentro estaba nervioso, Teseo miró por apenas un parpadeo al polemarca y la mente del minotauro entendió al instante la situación.
-[Eliminar a la cabeza].
Teseo ignorando a Niko y Laconia corrió directamente hacia Asterión, la bestiaria intentando cortar la cabeza del toro fue detenida por el escudo pero desde su flameante armadura nacieron pequeñas flechas que rodearon la defensa ígnea e impactaron contra el minotauro, pero el fuego de su cuerpo surgió otra vez y con una explosión de llamas nacida del escudo, Laconia voló lejos una vez más, pero ahora detuvo el retroceso con sus alas, mientras más rayos volaban hacia Teseo este los interceptaba con su escudo, que parecía brillar más con cada relámpago que impactaba.
-¿Por qué corre hacia Asterión?
Gritaba Niko hacia Laconia.
-Sabe que haciendo eso no nos dará tiempo para atacarlo con la guardia baja, nos está obligando a detenerlo.
Asterión corría en dirección a la playa, el minotauro destruía todo a su paso, cajas, carrozas e incluso paredes de algunas casas, Niko y Laconia apenas le podían seguir el paso, mucho menos detener su avance, el micénico imparable combatía contra ambos sin perder ni un solo paso.
- Σιδηρουργείο -
- Υιός -
Encarnaciones del fuego y el rayo impactarían contra Teseo quien paró su camino, detuvo al tracio hecho un relámpago con su escudo, repeliéndolo con fuerza y estrellando al joven contra una casa y apagó el fuego de Hefesto con el de Prometeo, pero desde este Laconia se ocultó y aprovechando la diferencia de altura, con una postura baja cortó desde el torso al hombro del minotauro y la armadura de fuego forjó una lanza de fuego que impactó directamente en el rostro del micénico, pero el movimiento de su brazo no cesó y como sin fuera un martillo, un hachazo descendente impactó contra el espadón de Laconia, evitó el corte pero la fuerza del toro era inigualable, aplastó a la bestiaria contra el suelo rompiendo varios de sus huesos y a pesar de la terrible herida en su cuerpo, el minotauro rápidamente siguió su camino, la situación parecía perdida pero el comandante armado una vez más salió desde un punto ciego, con su anillo iluminado hasta el máximo.
- Ίπποκάμπη -
Inmediatamente decenas de esferas de agua se formaron alrededor de Teseo y al mismo tiempo que el comandante atacaba al minotauro las esferas se dispararon con la potencia para destruir incluso la piedra, el fuego del minotauro no fue lo suficientemente rápido para absorber el ataque y fue empalado en su hombro izquierdo por el tridente y recibió el impacto de todas las balas de agua.
-Maldita vaca, sabia que no eras indestructible.
Teseo cubierto de sangre y moretones, soltó el hacha y agarró la cabeza del comandante, levantándolo y estrellándolo contra el suelo, entre gritos de dolor la cabeza del heleno fue aplastado por la mano del minotauro.
-[Maldito cerdo].
Laconia y Niko apenas estaban en pie y ambos fueron al lado de su polemarca quien estaba en la cubierta del barco y levantaron sus armas contra Teseo, estaban llenos de sangre, la bestiaria no podía levantar su brazo izquierdo y el tracio apenas podía mantenerse de pie contra el viento, pero aún estaban sin rendirse, el minotauro por su lado concentró su mirada en Asterión.
-[Aún me quedan dos cartas Asterión, esto no se ve muy bien para tu lado, otra vez].
-[Bueno, toda mi vida he luchado sin cartas Teseo].
En ese momento Asterión sacó una espada corta y sus compañeros se agacharon, una ballesta con un gran arpón se ocultaba por una rasgada tela en el barco y el polemarca cortó la cuerda sujetando el proyectil, este impactó en el brazo del minotauro, una cadena de metal estaba atada al arpón y la falange la sujetaba, tironeando al guerrero hacia el mar mientras este luchaba en contra.
-[¿Crees que tienes más fuerza que un micénico?]
-[No, por eso tengo un plan].
Con la espada Asterión cortó una segunda cuerda, liberando las velas negras del barco que con la fuerza de la tormenta venció a la fuerza del minotauro quien lentamente se arrastraba hacia el mar, pero este ultimo esbozó una ligera sonrisa.
-[Fue un buen intento Asterión, pero aún me estas subestimando].
- Τιτάν -
El fuego rojo como la sangre de Teseo brilló por todo su cuerpo y la fuerza del minotauro igualó el poder de la tormenta, el miedo inundó a Laconia y Niko cuando Teseo logró tirar el barco lentamente hacia él, el tracio con sus últimas fuerzas cayó sobre sus rodillas.
-Es… es un monstruo.
El viento y la lluvia seguían y seguían, al igual que Asterión pensaba y pensaba, buscando una solución, una gota de esperanza que no aparecería y al ver que Teseo consiguió otro tirón, el polemarca tomó su última decisión.
-Lo siento mucho.
El polemarca liberó la cadena del arpón, dejando libre el barco el cual se aventuraba directamente hacia la despiadada tormenta y la niebla prohibida.