Al día siguiente el grupo nuevamente fue a la ciudad Plutón para cazar a las criaturas de los portales. Cuando llegaron se dieron cuenta de que había mayor actividad de los policías y militares, ahora se estaban concentrando en cazar y fortalecerse. Ayer se concentraron en reclutar la mayor cantidad de personas y hoy solo se iban a concentrar en cazar, a menos de que las personas que se quedaron pidan irse de la ciudad.
La mayoría de los residentes de la ciudad Plutón habían decidido irse, la mayoría fueron a la ciudad Sol y otros se fueron a la ciudad Luna porque sentían que era más confiable al ser la capital del estado. Solo personas raras o extrañas decidieron permanecer en la ciudad.
Ahora la ciudad contaba con muchos goblins y arañas alrededor. Había muchas ciudades que habían caído a causa de los goblins, así que las personas no podían mantener todas las ciudades que habían caído limpias. Inevitablemente, habrá ciudades que serán hogar de los goblins y arañas. Cuando ocurra el próximo ataque a las ciudades, la cantidad de criaturas será mucho mayor al anterior, lo que hará que el peligro aumente, por eso era primordial prepararse con antelación.
El viaje hacia la ciudad Plutón transcurrió como el día de ayer, cazaron a las criaturas que andaban sueltas mientras buscaban al rey goblin por la ciudad. Desafortunadamente no lograron encontrar al rey goblin, así que tuvieron que dejar que permaneciera suelto y seguir siendo una amenaza para los residentes que aún se quedaron en la ciudad.
El día hubiera terminado con normalidad, si no hubiera sido porque durante el camino de regreso Víctor recibió una llamada de Francisco.
"Hola Francisco ¿Qué pasa?" Preguntó Víctor después de contestar la llamada.
"Necesito tu ayuda ¿Tienes tiempo?"
Después de pensar por un momento Víctor respondió. "Primero dime que paso"
"Tengo un hombre aquí enfrente mío, dice que por la tarde el cartel de Salazar comenzó a masacrar a las personas y secuestrar a las mujeres del Cerro de Arteaga. Afortunadamente, el logro escapar e informarnos, si no, probablemente hubiera pasado un tiempo para que nos diéramos cuenta"
El Cartel Salazar liderado por Eduardo Salazar siempre estuvo presente en el municipio del Sol, específicamente en un pueblo cercano a la ciudad, llamado Cerro de Arteaga. La policía nunca pudo hacer nada contra ellos porque no tenían pruebas, así que siempre estuvieron en libertad. Pero era de conocimiento público su existencia y sus fechorías, así que nunca fueron del agrado de las personas.
La policía no los había molestado en este tiempo, porque desde que aparecieron los portales, el cartel Salazar se había encargado de mantener seguro el pueblo de las criaturas de los portales. Así que los dejaron tranquilos hasta el momento porque necesitaban toda la ayuda posible, pero ahora tenían encargarse de ellos. Ahora que la situación se había estabilizado el cartel había comenzado a hacer nuevamente de las suyas.
Probablemente, el Cartel Salazar se molestó al ver que los residentes que anteriormente vivían en el pueblo decidieron abandonarlos y mudarse a la ciudad del sol para recibir mejor protección. Así que decidieron aprovechar el momento antes de que se fueran los demás residentes. Ellos no podían mudarse a la ciudad del Sol como los demás, porque siguen siendo criminales y no podían poner en peligro a los demás residentes, además de que la imagen de la ciudad se dañaría si los dejaban entrar.
"¿Ya corroboraste la información?" Pregunto Víctor de forma seria.
"Así es, Néstor llego hace unos momentos y confirmo que la información proporcionada por el hombre era verdad"
"Entonces ¿Qué necesitas?"
"Quería la ayuda de ustedes, para acabar con ellos y salvar a las mujeres que fueron secuestradas."
"... Está bien ¿Dónde nos vemos?"
Entonces Francisco le dio la ubicación de donde lo estaría esperando. El lugar que acordaron se encuentra en la salida de la ciudad que va hacia el Cerro de Arteaga que es el pueblo donde se encuentra el Cartel Salazar.
"Está bien, nos vemos ahí en unos minutos."
El grupo de Víctor era muy fuerte, así que Francisco sintió que ellos serían de mucha ayuda. Además de que sabía que Víctor perteneció a una unidad de las fuerzas especiales, por esa razón tenía experiencia en armas y técnicas de combate.
Cuando aparecieron los portales Víctor estaba pensando en que hacer, lo ideal hubiera sido permanecer como un militar y así su familia hubiera recibido la protección del gobierno. Pero Víctor decidió actuar por su cuenta, ya que se enteró de la existencia de Cifrid y lo que iba a suceder en un futuro.
Víctor pasó varios minutos explicándole la situación a sus compañeros y todos decidieron ayudar. Así que ahora en lugar de irse a su casa a descansar, el grupo se dirigió hacia el Cerro de Arteaga.
***
Después de reunirse con Francisco y los demás, el grupo avanzo hacia donde se encontraba el Cartel Salazar, en este momento era de noche, así que era fácil pasar desapercibido. Además de que no había personas transitando la carretera, ya que podían ser atacados por los goblins.
El grupo avanzo en silencio y después de varios minutos llegaron al Cerro de Arteaga. Lo primero que notaron cuando llegaron fue que el pueblo había sido tomado por los goblins y arañas. Las criaturas deambulaban por el pueblo comiéndose algunos cadáveres que aún quedaban en el suelo. Los cadáveres eran de las personas que habían sido asesinados por los del Cartel Salazar.
El grupo tuvo que ignorarlos y evitarlos, ya que no tenían tiempo para hacerse cargo de ellos. Su prioridad era acabar con el Cartel Salazar, así que no podían perder el tiempo y su energía en acabar con los goblins y arañas.
El grupo continuo avanzando pasando a través del pueblo, después de unos minutos salieron y continuaron avanzando por la carretera. El Cartel Salazar se encontraba en el Cerro de Arteaga, pero no específicamente ahí, ellos se encontraban en una hacienda cercana al pueblo.
Después de varios minutos el grupo por fin llego a la hacienda en la que se encontraba el Cartel Salazar. Claramente, cuando estuvieron cerca de la hacienda avanzaron despacio y con las luces apagadas para no alertarlos de su presencia. Gracias a la cultivación las personas mejoraron su visión y ahora podían ver mejor en la oscuridad, así que no fue tan difícil.
La puerta de la entrada estaba siendo custodiada por varios hombres, se podía ver claramente porque el lugar en el que se encontraban ellos está iluminado. El grupo se detuvo a varios metros de la puerta, donde los guardias no alcanzaban a verlos, entonces comenzaron a discutir como iban a actuar. Las personas que iban a participar en el rescate de las mujeres serían Víctor y su grupo, con la adicción de Néstor y Pablo.
Víctor quería que el grupo fuera pequeño con la intención de que pasaran desapercibidos. Las demás personas se encargarían de vigilar que no haya anomalías y todo avance sin problemas.
Francisco había designado a Víctor para que fuera el líder y tomara las decisiones, los demás solo tenían que seguir sus órdenes. Después de varios minutos, Víctor termino de dar las indicaciones y de prepararse, así que comenzaron a actuar.
Todos se acercaron a los guardias en silencio, para no alertarlos. El grupo traía un uniforme oscuro, un chaleco antibalas, un pasamontañas negro y un casco balístico encima. Ellos solo llevaban un par de navajas y una pistola, su intención era actuar lo más rápido posible, así que tenían que permanecer lo más ligeros posible.
El plan era acabar con ellos silenciosamente, pero no todo podía salir perfectamente, así que era probable que fueran descubiertos y tuvieran que enfrentarse a ellos. Su cuerpo aún era débil ante las armas de fuego, así que tuvieron que protegerse correctamente.
Afortunadamente la hierba de alrededor era muy alta, gracias a la nutrición que habían recibido las plantas del qi. Además, había un par de árboles que bloqueaban la visión de los guardias, así que ellos pudieron avanzar fácilmente y esconderse perfectamente.
"¿Puedes acabar con ellos?" Pregunto Víctor.
"Creo que sí" Respondió Arturo apuntándole a los dos guardias que se encontraban al frente de la puerta.