—¿No tienes miedo de que te sigan los paparazzi? —preguntó Lin Nuannuan emocionada en cuanto se subió al coche.
—Encuentra un lugar donde los paparazzi no puedan rastrearnos.
—¿Dónde?
—Te lo estoy preguntando a ti —respondió Shen Feiwan con una sonrisa.
Lin Nuannuan se quedó sorprendida.
—¿Has estado rondando por clubes nocturnos durante años y todavía no los conoces bien? —se burló Shen Feiwan.
—Espera un momento, voy a hacer una llamada.
Qué broma.
Ella es la princesa del club.
¿Cómo no iba a tener un as bajo la manga?
Rápidamente hizo una llamada:
—Club Banquete Nocturno, el club nocturno más exclusivo de toda Ciudad Rong. Es tan privado que ni siquiera una mosca podría entrar, y mucho menos los paparazzi.
—Guía el camino.
—Usa el navegador.
—¿No has estado allí antes? —se sorprendió Shen Feiwan.
