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—¡41 millones! —Shen Feiwan subió el precio.
No era ni arrogante ni inquieta.
Parecía tranquila y racional.
Lin Nuannuan, que estaba a su lado, ahora estaba un poco ansiosa.
41 millones.
¿De verdad no le dolía a Wanwan deshacerse de una suma tan grande de dinero?
Ella misma empezaba a sentir la presión.
—Wanwan, cálmate un poco —Lin Nuannuan tiró del brazo.
—No te preocupes, sé lo que estoy haciendo —Shen Feiwan se aseguró riendo.
...
—¡45 millones! —Zhu Rongchang subió la oferta.
—¡46 millones! —Shen Feiwan siguió pujando.
Zhu Rongchang estaba tan enojado que se le puso la cara roja.
¿Esta mujer se había vuelto loca?
¿Por qué estaba subiendo el precio contra él?
Si esta situación continuaba, él no podría soportarlo más.
Aprieta los dientes:
—¡50 millones!
Shen Feiwan levantó la mano:
—51 millones.
Zhu Rongchang empezó a sudar profusamente de la ansiedad.
No podía evitar girar la cabeza y mirar a Shen Feiwan.
¿Quién era esta mujer?
