—¿Qué tiene de malo que invirtamos más? ¿No es acaso darnos más dinero? Eso es algo bueno —dijo Adrián Zhekova.
—¡Qué tontería!
Mokleys maldijo internamente.
Cuanto más inversiones haya, más acciones poseerá uno a cambio.
—¡Y un retorno más alto!
Si no, ¿quién invertiría solo por invertir?
Nadie quiere absorber tales pérdidas, ¿verdad?
—En ese caso, es necesaria una redistribución —declaró Mokleys.
—Por supuesto —respondió Adrián Zhekova asintiendo.
De hecho, ya que la distribución es proporcional.
Por ejemplo, si el total es 100, que la firma de Mokleys tenga 60 es constante, y los 40 restantes se reparten entre otros como Golros de Nación de la Franja Estelar, Botalli de Italia, Egerton de Avalón y la Corporación Takahashi del Reino del Cerezo en Flor.
La inversión y los dividendos se dan basados en la proporción.
Si Pingla también se une, los cuarenta restantes tendrán que ser reasignados.