—¡Retirada total! ¡Volvemos a la Dinastía!
Tan pronto como se dieron las órdenes, la Vanguardia levantó sus escudos y formó una línea defensiva, mientras los otros soldados trabajaban juntos para desmontar las tiendas y almacenar todo lo que pudieran llevar.
Los Orcos todavía estaban a una buena distancia de ellos, por lo que tenían más que suficiente tiempo para empacar todo antes de dejar su campamento temporal.
Los Altos Rangos, todos alineados en el frente, miraban con odio a los Orcos que se acercaban. A decir verdad, no tenían miedo de luchar contra ellos en combate cercano.
Sin embargo, estaban muy indecisos de hacer esto porque sus enemigos habían logrado capturar sus Armas de Guerra.
Si los Orcos usaban las mismas tácticas que habían usado contra ellos en el pasado, entonces sus posibilidades de victoria eran muy escasas.
