—Kieran especulaba que fusionar las Habilidades de Clase innatas de un Heredero con el abstracto poder del Significado sería un objetivo ambicioso. Sin embargo, también esperaba que esa conjetura se demostrase errónea, permitiéndoles encontrar un éxito directo.
...No había sido así.
Su suposición se mantuvo firme, y los días que pasaban lo verificaban.
El Heredero Sagrado y Kieran se sentían frustrados con el objetivo aparentemente inalcanzable. Innumerables fracasos casi los habían vuelto locos, pero nada como lo que la Llama podría lograr.
Kieran conocía muy bien la locura. Esto no era locura —era insania.
—¡Mierda! Esto es una locura. Hemos estado en esto durante días y parece que no hemos avanzado ni un ápice.
Kieran se llevó las manos a los ojos y gimió, dándoles a los cansados oculi un breve masaje. Desafortunadamente, no fue tan placentero como hubiera esperado. Una voz quejumbrosa resonaba en su mente, y no pertenecía a la Llama.