—Dado que estás en contacto con Gaea, ¿te ha alertado sobre mi situación? —preguntó Kieran.
—Lo ha hecho y eres libre de irte. No tengo intención de retenerte aquí en el Bosque de Gardenia. Puedes reunirte con la Heredera Mística para decidir tu próximo curso de acción —respondió Vitalia, ofreciendo a Kieran una sonrisa tenue, pero amigable.
—Agradezco tu comprensión, Reina Vitalia —dijo Kieran mostrando el respeto que correspondía y asintió levemente, ya que no estaba en su carácter inclinarse ante nadie.
Después, se volvió hacia Ayduin, ofreciéndole la misma cortesía respetuosa. Dado que podía prever otro encuentro con los Elfos en el futuro, Kieran decidió que sería mejor mantener un cierto nivel de respeto entre ellos. Aunque, esta decisión fue independiente de los generosos actos de Gaea. Por encima de todo, Kieran mantenía presente la farsa de la Misión Calamidad.