Los pensamientos de Nico decían que ya estaba moviendo cosas entre bahías para poder fabricar las nuevas naves, ya que el cliente que había pedido el yate en su bahía actual aún no había llegado para recogerlo. Estaba en camino, pero con todos los visitantes que llegaban, no llegaría por un día o dos, dependiendo del sistema del que viniera.
Los Enviados estaban todos entusiasmados con las innovaciones del nuevo transbordador, lo innovador que era y lo único que era para la cultura humana un diseño así. Muchas otras especies usaban formas fluidas o inspiraciones orgánicas, pero solo los Cazadores usaban naves espaciales Biomecánicas.
Ahora que estaba dentro, Max notó que esta nave era mucho más insidiosa de lo que había pensado. Aunque parecía inofensiva y acogedora para el ojo inexperto, Max podía identificar fácilmente dónde Nico había fusionado la filosofía de diseño de los Cazadores con la morfología de Klem para crear una nave singularmente capaz.